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sábado, 12 de enero de 2019

Kenia comenzará a enseñar chino mandarín en las escuelas públicas

Kenia comenzará a enseñar chino a estudiantes de escuela primaria a partir de 2020

Por Abdi Latif Dahir, Quartz.




Kenia enseñará mandarín en las aulas en un intento por mejorar la competitividad laboral y facilitar un mejor comercio y conexión con China.

El instituto de desarrollo curricular del país (KICD, por sus siglas en inglés) ha dicho que el diseño y el alcance del programa de mandarín se completaron y se implementarán en 2020. Los alumnos de la escuela primaria de cuarto grado (10 años) y en adelante podrán tomar el curso, El jefe de la agencia, Julius Jwan, dijo a la agencia de noticias Xinhua. Jwan dijo que el lenguaje se está introduciendo dado el creciente crecimiento global del mandarín y la profundización de las conexiones políticas y económicas entre Kenia y China.

"El lugar de China en la economía mundial también se ha vuelto tan fuerte que Kenia se beneficiará si sus ciudadanos pueden entender el mandarín", señaló Jwan. Kenia sigue los pasos de Sudáfrica, que comenzó a enseñar el idioma en las escuelas en 2014 y Uganda, que está planificando lecciones obligatorias de mandarín para estudiantes de secundaria.




Kenia se encuentra actualmente en medio de la implementación de un nuevo plan de estudios educativo para mejorar la calidad educativa y centrarse en las habilidades que harían que los graduados sean más empleables en el mercado laboral. Apenas el año pasado, los funcionarios de educación presentaron la hoja de ruta para el primer piloto del nuevo plan de estudios para estudiantes en preescolar y estándares uno y dos.

Luego, el secretario de educación, Fred Matiang’i, dijo que el programa de estudios se probaría para ver qué se debe mejorar antes de que se implemente por completo en todas las clases de primaria y secundaria. El mandarín está programado para ser enseñado junto con otros idiomas locales, además de otros idiomas extranjeros, como el francés y el árabe.

Mientras los funcionarios de Nairobi deliberaban sobre la introducción del idioma en las escuelas, recibieron el apoyo de Beijing en los últimos años. Una delegación de académicos chinos ayudó con el desarrollo de los cursos, mientras que las becas se repartieron a estudiantes graduados de Kenia para estudiar en universidades chinas.

La beneficencia es estratégica para China, que ha prestado miles de millones de dólares a Kenia, construyó un ferrocarril entre sus dos principales ciudades, realizó importantes festivales culturales en el estado de África oriental y cuyas compañías están involucradas en la construcción de todo, desde carreteras hasta apartamentos. Mucho antes de su prevalencia en África, China estableció el primer Instituto Confucio de África en la Universidad de Nairobi.

jueves, 21 de diciembre de 2017

Crecer en la clase trabajadora te otorga mayores capacidades de socialización

Crecer en la clase trabajadora proporciona a las personas habilidades sociales que ayudan a ampliar su perspectiva durante los conflictos.



Nicolas Hoizey / Unsplash
Cuanto menor es tu clase social, más "inteligente" eres, sugiere un nuevo estudio
Por Michael Price  Science Magazine

Hay una aparente paradoja en la vida moderna: la sociedad en general se está volviendo más inteligente, pero no estamos más cerca de descubrir cómo llevarse bien. "¿Cómo es posible que tengamos tantos, sino más, conflictos como antes?", Pregunta el psicólogo social Igor Grossmann de la Universidad de Waterloo en Canadá.

La respuesta es que la inteligencia cruda no reduce el conflicto, afirma. La sabiduría sí. Tal sabiduría, en efecto, la capacidad de tener en cuenta las perspectivas de los demás y buscar el compromiso, llega de forma mucho más natural a quienes crecen en la clase trabajadora o pobre, según un nuevo estudio de Grossman y sus colegas.

Para llevar a cabo el estudio, Grossmann y su estudiante graduado Justin Brienza se embarcaron en un experimento de dos partes. Primero, pidieron a 2145 personas en todo Estados Unidos que realizaran una encuesta en línea. Se les pidió a los participantes recordar un conflicto reciente que tuvieron con alguien, como una discusión con un cónyuge o una pelea con un amigo. A continuación, respondieron 20 preguntas aplicables a ese o cualquier conflicto, que incluyen: "¿Alguna vez consideró una perspectiva de terceros?" "¿Cuánto trató de comprender el punto de vista de la otra persona?" Y "¿Consideró que podría estar equivocado? ? "

Grossmann y Brienza analizaron los datos y asignaron a los participantes un puntaje de "razonamiento sabio" basado en las respuestas al conflicto y un puntaje de "clase social", luego trazaron las dos puntuaciones una contra la otra. Descubrieron que las personas con los puntajes más bajos en la clase social, aquellos con menos ingresos, menos educación y más preocupaciones sobre el dinero, obtuvieron el doble de puntaje en la escala de razonamiento sabio que los de la clase social más alta. Los niveles de ingreso y educación iban desde la clase trabajadora hasta la clase media alta; ni los muy ricos ni los muy pobres estaban bien representados en el estudio.

En la segunda parte del experimento, el dúo reclutó a 200 personas en Ann Arbor, Michigan, y sus alrededores, para que tomaran una prueba de cociente intelectual estándar y leyeron tres cartas en la columna de consejos de Dear Abby. Una carta, por ejemplo, preguntaba sobre elegir lados en una discusión entre amigos mutuos. Luego, cada participante discutió con un entrevistador cómo pensaban que se desarrollarían las situaciones descritas en las cartas. Un panel de jueces calificó sus respuestas de acuerdo con varias medidas de razonamiento sabio. En el ejemplo anterior, pensar cómo un extraño podría ver el conflicto ganaría puntos para la sabiduría, mientras que confiar solo en la propia perspectiva no lo haría.

Al igual que en la primera parte del experimento, los de las clases sociales más bajas obtuvieron puntajes de razonamiento sabio más altos que los de las clases sociales más altas, informaron los investigadores hoy en las Actas de la Royal Society B. Los puntajes de CI, sin embargo, no se asociaron de una manera u otra con razonamiento sabio.

Los hallazgos tienen sentido, dice Jayawickreme, ya que las personas que crecen en un entorno de clase trabajadora tienen que depender de recursos compartidos y comunitarios más que las personas de la clase media, y por lo tanto perfeccionar las técnicas sociales que suavizan los conflictos con sus pares. Los de la clase media, en cambio, tienden a centrarse en la educación, lo que mejora sus puntajes de cociente intelectual, pero no ponen casi tanto esfuerzo en las habilidades de resolución de conflictos, dice Grossmann.

Si desea fomentar el razonamiento inteligente en usted mismo, aconseja Grossmann, trate de usar un lenguaje en tercera persona cuando piense en conflictos. Mente mentalmente a usted mismo y a su compañero de conflicto por su nombre, por ejemplo, ya que lo obliga a ver la situación como otros lo verían. Y busque situaciones en las que sus propias experiencias y expectativas no estén en el centro de atención, como asistir a un festival de cine multicultural o ser voluntario en un refugio para personas sin hogar.

Eventualmente, Grossman quiere expandir su estudio de la sabiduría a las personas en los extremos de la clase social. "No me sorprendería que el resultado sea aún más pronunciado en los extremadamente ricos, pero aún no tenemos los datos para hablarle", dice. "Me encantaría entrevistar a Donald Trump".

miércoles, 1 de marzo de 2017

Paritaria y reclamo político en Argentina

Algunos datos relevantes en la paritaria docente bonaerense

FEDERICO MUÑOZ, Titular de Federico Muñoz & asociados
El Cronista


 Algunos datos relevantes en la paritaria docente bonaerense

Por múltiples razones económicas y políticas, la importancia de la negociación salarial de los docentes de la provincia de Buenos Aires excede la de cualquier otra paritaria sectorial. Sin embargo, la información rigurosa disponible sobre este tema tan trascendente es realmente escasa. Por caso, no se sabe cómo ha evolucionado en los últimos años el salario real de los docentes de la Provincia y cuánto representan concretamente el reclamo docente y la propuesta oficial. A continuación, intentaremos aportar algunos datos para cubrir este vacío informativo.

En primera instancia, nos propusimos reconstruir la evolución de los salarios reales de los docentes bonaerenses desde 2011 hasta hoy. A tal efecto, recurrimos al muy buen sitio salariosdocentes.com.ar para armar la serie histórica de los salarios nominales (la veracidad de la información fue chequeada con planillas reportadas por CTERA). Tomamos como parámetro de referencia para el análisis a un maestro de grado de jornada simple con diez años de antigüedad. Para construir la serie histórica de salarios reales debíamos elegir un deflactor. Nos inclinamos por el uso del IPC Congreso entre 2011 y abril de 2016 y el empalme con el nuevo IPC INDEC desde mayo de 2016.

Presentamos entonces la serie del salario real del docente de referencia, medida en pesos constantes de diciembre de 2016. Al cierre del año pasado, el maestro jornada simple con diez años de antigüedad percibía un salario de bolsillo levemente inferior a $ 11.000. La serie histórica nos devuelve una primera constatación. El salario real previo a la negociación paritaria prácticamente equipara al salario real promedio de los últimos seis años.

Pasemos ahora a analizar el reclamo sindical. Roberto Baradel exige un aumento del 35% (recomposición de 10% por la supuesta pérdida de salario real de 2016 + 25% de inflación proyectada en 2017); además requiere que el aumento se concrete de inmediato, en una sola cuota. Puesto en otros términos, los docentes están reclamando que su remuneración se eleve inmediatamente un 20% por encima del máximo salario real que percibieron en los últimos seis años (el de marzo de 2012).

En contrapartida, María Eugenia Vidal ofrece para 2017 un aumento de 18%, desdoblado en cuatro aumentos de 4,5%: enero, abril, julio y septiembre. La propuesta incluye además la denominada ‘cláusula gatillo’: si la inflación INDEC del trimestre previo fuera superior al aumento dispuesto de 4,5%, en la liquidación posterior se ajustaría esa diferencia.

Para analizar la posible trayectoria del salario real con esta oferta debemos establecer supuestos sobre la evolución futura de la inflación. A tal efecto, trabajaremos con el escenario base que surge del REM del BCRA: una proyección de inflación anual de 20,8% en 2017. Si se concretara el escenario imaginado por el consenso de los economistas, es muy probable que la inflación de cada uno de los trimestres (salvo quizás en el 4T17) supere el 4,5% de mejora salarial, por lo que los respectivos ajustes salariales terminarían equiparando la inflación, por cortesía de la ‘cláusula gatillo’.

Algunos comentarios finales: Admitimos que $ 11.000 mensuales no constituye un sueldo muy seductor para quedar a cargo de un grupo de alumnos en el conurbano bonaerense. De todos modos, también es cierto que la Provincia tiene muy serias dificultades para ofrecer una recomposición sustancial de los salarios docentes. Aquí entra a jugar la histórica discriminación que padece Buenos Aires en el reparto de fondos federales: recibe menos del 19% del total de las transferencias a provincias, cuando -por cualquier parámetro objetivo de reparto-debiera recibir al menos 36%. Esta inequidad manifiesta condena a María Eugenia Vidal a padecer una escasez de fondos crónica y estructural que acota drásticamente su margen de maniobra en esta negociación salarial. En este contexto, la propuesta oficial luce razonable, aunque quizás la gobernación debería buscar la manera (quizás con el auxilio nacional) de mejorarla marginalmente; en el ejercicio planteado, el salario real promedio de 2017 terminaría siendo 1,6% inferior al de 2016.

La evaluación del reclamo elevado por Baradel, claramente desmesurado en perspectiva histórica, nos obliga a ingresar en terreno de especulaciones. Entra en juego aquí la crítica elección de senadores bonaerenses de octubre, en la que se plebiscita el actual esquema económico y acaso esté en juego la propia supervivencia del gobierno macrista. En este escenario, nos cuesta asimilar la intransigencia de Baradel con la de un dirigente sindical preocupado únicamente por el bienestar de sus representados. En la decisión del paro docente ¿no existirá también cierto ánimo desestabilizador y el deseo de afectar las chances electorales de Cambiemos?

jueves, 9 de febrero de 2017

Enseñar filosofía a los niños los hace mejores en matemática y lengua

La enseñanza de la filosofía de los niños les hace más inteligentes en matemáticas e inglés
Por Jenny Anderson - Quartz


El poder de reflexionar. (Reuters / Kim Kyung)


Las escuelas se enfrentan a una presión incesante para aumentar sus ofertas en los campos STEM-ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. Pocas personas están defendiendo la filosofía.
Tal vez deberían.
Los niños de nueve y 10 años en Inglaterra que participaron en una clase de filosofía una vez a la semana a lo largo de un año, aumentaron significativamente sus habilidades matemáticas y de alfabetización, y los estudiantes desfavorecidos mostraron los logros más significativos, Estudio diseñado (pdf).
Más de 3.000 niños en 48 escuelas de toda Inglaterra participaron en discusiones semanales sobre conceptos tales como la verdad, la justicia, la amistad y el conocimiento, con el tiempo esculpido para la reflexión silenciosa, el cuestionamiento, la interrogación y la construcción de pensamientos e ideas.
Los niños que tomaron el curso aumentaron las calificaciones de matemáticas y lectura por el equivalente a dos meses adicionales de enseñanza, a pesar de que el curso no fue diseñado para mejorar la alfabetización o la aritmética. Los niños de los entornos desfavorecidos vieron un salto aún más grande en el rendimiento: las habilidades de lectura aumentaron en cuatro meses, las matemáticas en tres meses y la escritura en dos meses. Los maestros también reportaron un impacto beneficioso en la confianza y habilidad de los estudiantes para escuchar a otros.
El estudio fue realizado por la Fundación de Dotación Educativa (EEF), un grupo sin fines de lucro que quiere cerrar la brecha entre el ingreso familiar y el logro educativo. El EEF probó la efectividad de la intervención de filosofía a través de un ensayo controlado aleatorio, similar a la forma en que se prueban muchos fármacos.
Veintidós escuelas actuaron como un grupo de control, mientras que los estudiantes en los otros 26 tomaron la clase de filosofía (que se reunió una vez por semana durante 40 minutos). Los investigadores trataron de controlar la calidad de la escuela: en cada uno de ellos, por lo menos una cuarta parte de los estudiantes recibieron almuerzo gratis y muchos tenían poblaciones significativas que se desempeñaban por debajo del nivel del grado.
Los efectos beneficiosos de la filosofía duraron dos años, y el grupo de intervención siguió superando al grupo de control mucho tiempo después de que las clases hubieran terminado. "Se les había dado nuevas formas de pensar y expresarse", dijo Kevan Collins, director ejecutivo de EEF. "Habían estado pensando con más lógica y más ideas conectadas".
Inglaterra no es el primer país en experimentar con la enseñanza de la filosofía infantil. El programa que usó el EEF, llamado P4C (filosofía para niños), fue diseñado por el profesor Matthew Lippman en Nueva Jersey en los años 70 para enseñar habilidades de pensamiento a través del diálogo filosófico. En 1992, la Sociedad para el Avance de la Investigación Filosófica y la Reflexión en la Educación (SAPERE) se estableció en el Reino Unido para emular ese trabajo. P4C ha sido adoptado por escuelas de 60 países.
El programa de SAPERE no se centra en leer los textos de Platón y Kant, sino más bien en historias, poemas o clips de películas que impulsan discusiones sobre temas filosóficos. El objetivo es ayudar a los niños a razonar, formular y hacer preguntas, entablar conversaciones constructivas y desarrollar argumentos.
Collins espera que las últimas pruebas convencerán a los jefes de las escuelas, que tienen mucho más poder en el Reino Unido que en los Estados Unidos, para dejar espacio a la filosofía en sus presupuestos. El programa cuesta a las escuelas £ 16 ($ 23) por estudiante para correr.
Programas como este "te empujan hacia la enseñanza, no hacia abajo, a los niños desfavorecidos", dijo Collins Cuarzo. "No se trata de un currículo reducido y estrecho, sino de un amplio currículo expansionista".
Según el EEF, el 63% de los británicos de 15 años de edad lograr buenos resultados en los exámenes, en comparación con el 37% de los estudiantes desfavorecidos. El grupo espera que mediante el uso de la investigación basada en la evidencia y los ensayos controlados aleatorios, las escuelas adoptarán las políticas más eficaces para hacer frente a la disparidad.
Sócrates dijo que "el verdadero conocimiento existe sabiendo que no sabes nada". Pero para cerrar la brecha en los resultados de la educación, algunos profesores parecen creer que la filosofía tiene un papel importante que desempeñar.

sábado, 21 de enero de 2017

Brasil congela el gasto público por 20 años

En Brasil ya comenzó el fin del mundo
Por VANESSA BARBARA - New York Times




Credit Sarah Mazzetti


Al menos eso es lo que la gente anda diciendo. Los opositores llaman así —la Reforma del Fin del Mundo— a la propuesta de enmienda constitucional que aprobó el senado el mes pasado. ¿Por qué? Debido a que las consecuencias de la reforma parecen desastrosas. Y duraderas. Congelarán todo el gasto federal durante 20 años, incluyendo la educación y los servicios de salud.

El gobierno justificó la medida basándose en que Brasil enfrenta importantes déficits presupuestarios. Sin embargo, la gente no está convencida. Una encuesta de diciembre de 2016 reveló que solo el 24 por ciento de la población está a favor de la reforma. Los brasileños tomaron las calles para expresar su descontento. Se encontraron, como es habitual, con gas lacrimógeno y oficiales de la policía montada. Los estudiantes de secundaria tomaron mil escuelas en protesta, la mayoría en el estado de Paraná, al sur del país.

El gobierno no dará marcha atrás. La Reforma del Fin del Mundo es solo una de las muchas medidas neoliberales impulsadas por Michel Temer, el presidente de Brasil. Debería ser motivo de preocupación que Temer pueda llevar a cabo tantas reformas de tal envergadura, en especial considerando que la mayoría de ellas, incluyendo la de los límites al presupuesto, van en contra de la agenda de la persona que, a diferencia de él, sí fue electa presidenta.


En agosto del año pasado, la presidenta Dilma Rousseff, del Partido de los Trabajadores, fue destituida del cargo al ser acusada de haber manipulado el presupuesto estatal. Tan pronto como Temer, quien era vicepresidente de Rousseff, asumió el cargo, anunció una serie de políticas neoliberales. Todavía sigue en ello, con el argumento de que está sacando provecho de su impopularidad para implementar medidas impopulares.



El presidente Michel Temer de Brasil. Su reforma al presupuesto dañará a los ciudadanos más pobres y vulnerables del país durante las próximas décadas.  Credit Evaristo Sa/Agence France-Presse — Getty Images

La reforma al presupuesto, al igual que muchas de las políticas de Temer, dañará a los ciudadanos más pobres y vulnerables del país durante las próximas décadas. No solo los opositores de izquierda del presidente opinan así. Philip Alston, relator especial de las Naciones Unidas para la pobreza extrema y los derechos humanos, declaró recientemente que la medida “congelará gastos en niveles inadecuados y rápidamente decrecientes en salud, educación y seguridad social, dejando, por tanto, a toda una generación futura en riesgo de recibir una protección social muy por debajo de los niveles actuales”.

Alston agregó que la ley situará a Brasil en una “categoría socialmente retrógrada”. Que parece exactamente adonde Temer y sus secuaces quieren llevarnos.

Además de congelar el gasto, Temer presentó una propuesta para renovar el sistema de pensiones de Brasil. Su propuesta establecerá la edad mínima para el retiro a los 65 años, en un país en el que una persona promedio se retira a los 54. La ley también exige al menos 25 años de aportaciones al sistema de seguridad social para hombres y mujeres.

Hay buenas razones por las que Brasil no había aprobado leyes como esta en el pasado. Aunque el promedio de la esperanza de vida en Brasil es de 74 años, se trata de uno de los países con mayor desigualdad en el mundo. Por ejemplo: en el 37 por ciento de los barrios de la ciudad de São Paulo, la gente tiene una esperanza de vida de menos de 65 años. En el caso de la población rural pobre es aún menor.

Algunos de los planes económicos de Temer ni siquiera tienen que ver con un déficit presupuestal. Además, el mes pasado, poco después de aprobar el techo del presupuesto, el gobierno propuso un plan laboral que permitiría convenios entre los empleados y los sindicatos que se impondrían sobre las leyes laborales. La nueva propuesta también aumenta el máximo de horas laborales permitidas a 12 al día y reduce la reglamentación en materia de empleo de trabajadores provisionales. La comunidad empresarial ha alabado el plan, pero desató indignación entre los sindicatos.

Otra prioridad para el presidente Temer es lo que se conoce como el plan de outsourcing. Se propuso por primera vez en 2004, pero nunca se aprobó debido a la fuerte resistencia de los sindicatos. En abril de 2015 fue ratificado por la Cámara Baja del congreso y ahora aguarda la aprobación del senado. El proyecto de ley dará libertad a las empresas para contratar cualquier trabajo a terceros, incluso en sus actividades principales. Según las reglas actuales, las empresas solo pueden contratar externamente los empleos “no esenciales” como los de limpieza, en tanto que los trabajadores “esenciales” tenían que estar contratados directamente por la empresa, lo cual quiere decir que tienen derecho a todas las prestaciones y derechos que establece la ley, como vacaciones pagadas, permiso de maternidad y bonos de fin de año.

Teniendo en cuenta todo esto, no sorprende que la administración de Temer tenga una aprobación tan baja: una encuesta de diciembre reveló que el 51 por ciento de los brasileños lo califican como “malo” o “pésimo” (solo el diez por ciento de los participantes dijo aprobar al gobierno; el 34 por ciento lo calificó de “regular”). Temer también fue encontrado culpable de violar los topes de financiamiento de campaña y su nombre ha formado parte de uno de los muchos escándalos de corrupción que se desarrollan en el país.

No obstante, el nuevo gobierno ya ha recibido todo el apoyo de las siguientes organizaciones: la Federación Brasileña de Bancos, el Frente Parlamentario Agrícola, la Confederación Nacional de Industria, la Organización Mundial del Comercio, la Federación de Industrias del Estado de São Paulo, la Federación de Industrias del Estado de Río de Janeiro, la Cámara Brasileña de la Industria de la Construcción, la Federación Nacional de Distribuidores de Vehículos Automotores y varios altos ejecutivos.

Para algunos brasileños, al menos, el fin del mundo es el comienzo de una oportunidad de oro.

martes, 3 de mayo de 2016

La educación, Francia y el chantaje intelectual psicopedagógico

"Un militantismo pseudo-progresista está des-educando a nuestros hijos"

Por: Claudia Peiró - Infobae
El educador y ensayista francés Marc Le Bris dijo a Infobae que una igualdad mal entendida lleva a negar la selección por el mérito e "impide a los niños correr hacia lo mejor, como los futbolistas hacia el arco"




Marc Le Bris fue formado como maestro en los tiempos rebeldes de Mayo del 68, cuando la consigna por excelencia era "prohibido prohibir" y "abajo la selección". La primera enseñanza que le dieron fue: "Los alumnos tienen más para enseñarnos a nosotros (los maestros) que nosotros a ellos".

Unos pocos años de práctica en el aula le bastaron para darse cuenta del error. Desde entonces, en paralelo a su larga carrera docente –está retirado del cargo de Director de Escuela primaria desde hace dos años- se dedicó a cuestionar todos los derivados de aquella concepción: los métodos de enseñanza de lectura llamados globales o naturales, la idea de que "el alumno construye su propio saber", la negación de la autoridad docente, la autonomía del niño y una obsesión por los métodos que lleva a desmerecer los contenidos, es decir ni más ni menos el conocimiento.


También denuncia los eufemismos con los que hoy se busca justificar y ocultar el fracaso de estas concepciones: la prohibición de la repitencia, la eliminación de las notas porque discriminan, el remplazo de los grados por "ciclos" (para disimular que los niños ya no aprenden a leer y escribir en un año como en la escuela tradicional), la creación de diplomas nuevos de baja calidad para quienes fracasan en la universidad, etcétera.

Salvando las diferencias entre ambos países, Francia y Argentina viven una situación similar: tenían una escuela pública de excelencia que estas concepciones educativas están llevando a una continua degradación. Según la última encuesta PISA (2013), en Francia, 22% de los alumnos de lo que equivaldría a nuestro 1er año de secundaria (es decir de 12 ó 13 años) están en "situación de fracaso grave" y son "incapaces de participar de manera activa y eficaz en la vida social". Y una encuesta del propio gobierno francés constató que 20 por ciento –uno de cada cinco- de los alumnos de 3er año del secundario son "incapaces de darle sentido a una información y de interpretar un texto simple".

Dos de los teóricos responsables de estas concepciones, señalados por Le Bris, son consumidos también entre nosotros: el sociólogo Pierre Bourdieu, ya fallecido, pero siempre leído en nuestras universidades, y el pedagogo Philippe Meirieu quien, pese a los malos resultados de su gestión al frente de los institutos de formación docente de su país, fue recibido en Argentina como portador de una verdad revelada, cuando vino en diciembre de 2013 invitado por Flacso.

Es especialmente interesante escuchar a Le Bris explicar la incidencia de estas visiones en los malos resultados de los alumnos franceses, en momentos en que las autoridades educativas argentinas se disponen a dar un paso más hacia la destrucción de los últimos reductos de excelencia de nuestra educación pública, disminuyendo la exigencia en los colegios secundarios que dependen de la Universidad de Buenos Aires (Nacional, Pellegrini, ILSE), en los que ahora se podrá pasar de año con dos materias sin aprobar, cuando hasta ahora se aceptaba una sola previa. No sólo eso: en el nuevo colegio de la UBA (la recién creada Escuela Técnica Universitaria de Lugano), se sustituyó el examen de ingreso tradicional en estos establecimientos por un sorteo. "El objetivo es lograr inclusión con calidad académica. El acceso no será meritocrático", afirman sin sonrojarse.

Última aclaración, antes de leer lo que sigue: Marc Le Bris, autor entre otros títulos de "Y vuestros hijos no sabrán leer ni sumar", no es de derecha; hijo de militantes comunistas, sus simpatías políticas van más bien hacia la izquierda, lo que no le impide reconocer que ésta suele ser mucho más destructiva –o desconstructiva, para usa la jerga académica de moda- en materia de Educación.

  • -Usted ubica un punto de inflexión en la educación en Francia hacia fines de los 60, cuando se van gestando estas teorías pedagógicas a las que hoy responsabiliza de la decadencia educativa en su país...


Yo estaba entonces en el instituto de formación de maestros y creí en eso: creí que estábamos salvando a los niños de la zoncera en la cual los mantenía la clase dominante, pero luego la realidad de la práctica.... Mis padres eran maestros, de izquierda, comunistas, y con el b-a = ba, el método Boscher (1), sacaron a los hijos de los campesinos del analfabetismo y los llevaron a integrar las elites.

¿Qué pasó luego?
Esa eficacia de la educación francesa hasta los años 60 fue derribada ideológicamente por gente que era aún más progresista, en el sentido político, eran militantes, algunos sindicatos de izquierda –los partidos de izquierda están muy representados en el ámbito docente- que inventaron o trajeron estos métodos, entre comillas revolucionarios, que iban a salvar a los hijos del proletariado de las garras de la patronal.

¿Qué lo llevó a usted a revisar todo eso?
Tuve que sumergirme en la realidad para ver que eso era totalmente falso, esa descripción era una descripción militante, partidaria, no era una descripción de la realidad. A partir de los años 70 dejamos hacer cosas mucho más peligrosas para la sociedad que aquellas contra las cuales decíamos enfrentarnos; dejamos instalarse la des-culturación. El oficio de maestro era notable en la Francia de aquellos años, pero permitimos que fuese destruida toda la práctica material de la enseñanza que en los tiempos de mis padres estaba en manos de los docentes; todo eso fue descartado, despreciado, dejado de lado, y se perdió un oficio. A los grandes maestros que tenía Francia, grandes profesionales, se los pasó a retiro con tremendo desprecio. La escuela de los años 60 era excelente. El problema que tenemos hoy en Francia es que ya nadie sabe cómo hacer y la escuela francesa, después del paso del señor Philippe Meirieu y de Jean Foucambert, defensor del método global de enseñanza de lectura (2), la escuela francesa está en caída libre, luego de haber sido una de las mejores del mundo.

"BOURDIEU DICE QUE LA ESCUELA ESTÁ AL SERVICIO DEL CAPITALISMO, DE LA CLASE DOMINANTE. NO ES CIERTO"

Al revés de lo que sostuvieron muchos teóricos, usted afirma que la escuela francesa tradicional era igualadora...

La escuela pública francesa iba consciente y voluntariamente hacia una finalidad, ejercía su autoridad, era un santuario en el cual los niños podían evolucionar, aparte de sus padres, aparte de la educación familiar. El gran progreso de la escuela se dio a partir de 1880 y 1920. Y en 1950, el hijo de campesino se convierte en subdirector de (la empresa estatal) Electricidad de Francia, y los hijos de obreros se convierten en profesionales, no todos, por supuesto, pero hubo una renovación de las elites, gracias a la escuela pública, es decir, gracias a la elevación de los mejores en base al mérito escolar.

Esa renovación tuvo lugar, contrariamente a lo que fue escrito por sociólogos como Pierre Bourdieu, que dice lo contrario de lo real. Bourdieu dice que la escuela reproduce la estructura social y que está para eso. Que está al servicio del capitalismo, de la clase dominante. Es mentira. Yo tuve compañeros que eran hijos de campesinos bretones y que se convirtieron en grandes ingenieros, en gerentes de grandes empresas francesas. Pero la cosa va más lejos aún. Como el fenómeno en Francia tiene 30 años, ya vemos el resultado: las familias burguesas de izquierda -en Francia la izquierda es muy burguesa-, que son familias letradas, familias de grandes lectores, que creyeron en todas estas teorías y se alegraron por la libertad que se les daba a sus niños, generan hijos iletrados. Es decir, se da el fenómeno contrario a lo hecho por la Tercera República (1870-1940) y en especial después de la Primera Guerra cuando, mediante un gran esfuerzo de la escuela primaria, se alfabetizó, se ilustró a un país entero. Ahora estamos des-ilustrando, mediocrizando a estos hijos de burgueses con los que ahora no sabemos qué hacer.

"QUE UN PAÍS CREE UNA LICENCIATURA DE CLOWN ES EL SÍNTOMA DE UNA GRAVE DECADENCIA"

¿Y qué se hace con ellos?

Bueno, como las verdaderas clases dominantes hoy en Francia son estos burgueses de izquierda, han creado una gran cantidad de diplomas de poco valor para poder diplomar a todos estos malos alumnos. Francia es una productora en gran cantidad de estos pequeños diplomas. Francia resolvió este problema de los hijos de la clase dominante real, es decir, de izquierda, inventando diplomas. Tenemos incluso una Licenciatura en Clown (payaso). Le aseguro que es verdad. Para mí, que un país cree una Licenciatura de Clown es el síntoma de una grave decadencia.

La influencia de algunos de esos autores que usted menciona sigue vigente, incluso fuera de Francia...

Considero que Meirieu, Bourdieu y Foucambert son destructores de sociedad. La escuela del señor Meirieu no hizo un trabajo de exigencia, de rigor, de civilidad, hacia los niños, especialmente los más desfavorecidos, al punto que tenemos en Francia hoy zonas sin ley, zonas de iletrismo. La escuela de Meirieu no hizo su trabajo y es responsable de esta destrucción muy profunda del tejido social que hace que Francia sea un país en decadencia, no sólo escolar, sino moral.

¿De donde viene esta concepción de que el niño construye su propio saber, que el maestro aprende más del niño que viceversa?

¿Cómo hemos llegado a esta negación de lo real?, me pregunto yo. A ser capaces de decir lo contario de la realidad. En la escuela normal de maestros, yo tenía un profesor que nos dijo y nos hizo escribir en nuestra carpeta: "Los alumnos tienen más para enseñarnos a nosotros que nosotros a ellos". Puedo aceptar que, en algún momento, ante un chico que no entendía algo, yo haya aprendido a explicárselo mejor, pero aparte de eso, que dos y dos son cuatro soy yo el que se lo tengo que enseñar a él. Esta forma de hablar al revés, este estilo de poner lo secundario en el lugar de lo principal, se ha convertido en un funcionamiento intelectual: en vez de describir la realidad, hacemos comunicación, comunicamos, decimos cosas lindas.


La otra explicación que encuentro es el trauma de la Segunda Guerra Mundial. Pese a la ilustración, a la ciencia, al progreso, pese a todo eso, fuimos a la barbarie en esos años. Y la peor expresión de esa barbarie fue la selección, por criterios raciales y religiosos. Esa selección es la herida de Occidente.

Entonces, a partir de los años 60, se amalgamó eso con el hecho de poner una buena nota a los buenos alumnos y una mala nota a los malos alumnos. Una de las consignas de Mayo del 68 era "¡Abajo la selección!" La selección fue vista por un lado como la expresión de la barbarie y, por el otro, siguiendo a Bourdieu, como obra de las clases dominantes, más o menos oculta. Para mí es la conjunción de estas dos cosas, las teorías de Bourdieu sobre que la selección es una obra de las clases dominantes que se preservan embruteciendo al pueblo, lo que por otra parte es falso, y el hecho de que queremos ser todos exactamente iguales y así hemos llegado a negar la realidad, a no decir las cosas como son.

"LA ESCUELA DE HOY ES COMO UN EQUIPO DE FÚTBOL QUE TIENE PROHIBIDOS LOS GOLES"

¿Cómo se refleja esta negativa a la selección?


Por ejemplo, si una clase determinada de escuela tiene buenos resultados, o muy buenos resultados, se lo oculta, al punto de que el maestro que trabajó bien no tiene "retorno" para saber cómo va su trabajo. Trabajamos a ciegas los maestros, pero también los niños. Antes le poníamos 10 al alumno que respondía bien a 10 preguntas. Hoy NO le ponemos un 2 al que no sabe nada. No le decimos nada porque no hay que seleccionar. Al chico que no aprendió las tablas de multiplicar no podemos decirle que eso está mal, que es malo para él, malo para su carrera, para su apertura mental; no se le dice nada porque no queremos seleccionar y eso impide a los niños correr hacia lo mejor, como los jugadores de fútbol hacia el arco. La escuela que surge de esto es como un equipo de fútbol que tiene prohibidos los goles. Es un caos. Nos peleamos en la cancha, hacemos otra cosa, ya no sabemos actuar individual ni colectivamente.

En Argentina se ha prohibido recientemente la repitencia entre 1º y 2º grado con el argumento de que los niños necesitan más de un año para aprender a leer y escribir. Pero en la escuela tradicional se aprendía a leer, escribir, sumar y restar en el primer grado, ¿no es cierto?

Sí, es lo normal, incluso muchos aprenden a leer en preescolar. No es difícil aprender a leer. Por poco que al niño se le enseñen unas letras y sílabas, aprenderá a leer. Lo que es difícil es aprender a leer con métodos que no están hechos para eso. Con el método global, entre 4 y 5 niños de cada 10 no saben leer a fin de año. Y con el método alfabético, apenas 2 de cada 100. Me he cansado de pedirle al Ministerio que haga una medición de los resultados al término del primer grado en función del método de lectura utilizado. Basta un año para hacerlo. Pero nunca lo he logrado.

"HAY QUE PARAR CON LAS IDEOLOGÍAS, COMPARAR RESULTADOS, Y LISTO"

Lo que sí hemos logrado en este combate iniciado hace unos quince años, desde que yo empecé a publicar mis críticas, es la libertad pedagógica para que los maestros puedan usar el método que consideren más eficaz, y cada vez son más los que vuelven al alfabético. Las cosas están cambiando, pero no todo lo rápidamente que yo desearía. Ahora bien, cuando la izquierda vuelve al poder, todos los progresos sobre cuestiones de lectura y de eficacia de la enseñanza retroceden. No digo que la derecha haya hecho demasiado en materia educativa, pero la izquierda siempre es catastróficamente desorganizadora en esto, se la pasa reescribiendo los programas, prohibiendo la repitencia, hablan de suprimir las notas, tuvimos 3 ministros en 4 años, no saben para qué lado van...

Hay un momento en que hay que parar las ideologías, porque estos son temas técnicos, hay que hacer lo que funciona, se comparan dos métodos y se ven los resultados, y listo.

Y tengo que seguir reflexionando sobre su pregunta, porque no respondí del todo. ¿Por qué se instaló con tanta fuerza esta negación del rol docente y de la transmisión del saber como función central de la escuela?

domingo, 6 de marzo de 2016

Cuestiones de educación y capital humano en la competitividad argentina

Los cambios que necesita la educación para que la Argentina gane competitividad
El régimen laboral y salarial docente, la especialización y el uso de tecnologías en las aulas están entre los temas que deberían ponerse sobre una mesa de discusión de estrategias
Andrés Hatum
LA NACION

El autor es profesor PhD de la escuela de negocios de la Universidad Torcuato Di Tella


Ingenieros en petróleo, entre los requeridos. Foto:Shutterstock

Las pruebas PISA suelen ignorarse desde el poder pero muestran una trágica realidad: la Argentina pierde terreno regional e internacional en el sistema educativo, un sistema que supo ser de los mejores del mundo. No sólo el sistema público ha caído, el privado también. Todos, ricos y pobres están en el mismo círculo de degradación. En las pruebas PISA 2012, a las escuelas de nivel socioeconómico más alto del país les fue igual que a las de nivel socioeconómico más bajo de Italia, Estados Unidos y el país promedio de la OCDE.

Por supuesto que hay argumentos para todos los gustos y muchas veces desde el poder se alega que ha habido un crecimiento en los últimos años en la matrícula, ergo convirtiendo a la escuela en un lugar más inclusivo. ¿Inclusivo para qué? Pero esto también es una falacia. El crecimiento de la matrícula post 2003 se explica por lo ocurrido en la escuela privada.

No sólo la Argentina no matricula más alumnos que en el resto de la región, sino que tiene graves problemas de retención. De hecho, nuestro país retiene a muchos menos alumnos que el resto de los países latinoamericanos. Según la OCDE, la tasa de graduación secundaria en la Argentina es 41%, mientras que en Chile es de 84 por ciento.

A nivel universitario también hay problemas. Los alumnos que llegan de la secundaria tienen serios problemas formativos. El análisis de texto les es esquivo y el matemático, imposible. Con motivo de los 30 años del Ciclo Básico Común (CBC) están analizando cursos optativos de lectoescritura. Sumemos a esto las dificultades que tienen las empresas y organizaciones en contratar carreras técnicas como ingenieros, licenciados en sistemas, geólogos o geofísicos, por citar algunos ejemplos.

En la región, sin embargo, se está trabajando para cambiar este paradigma de retraso educativo. Brasil, por ejemplo, ha definido invertir 1650 millones de dólares para enviar a más de 100.000 estudiantes a instituciones del exterior, para que se especialicen en temas como biotecnología, ciencias del océano e ingeniería en petróleo, todas especialidades consideradas esenciales para el futuro del país. Chile ha seguido una política similar para estudiantes de ciencias económicas y finanzas, a los que ha enviado en la última década a realizar doctorados a las mejores universidades.

Ya no se trata del color partidario del próximo gobierno, sino de poder contar con una política educativa de largo plazo que tenga una estrategia clara, que esté consensuada entre los principales partidos políticos y que sea respetada en el tiempo.

Una estrategia y política educativa en este sentido tendría que debatir y tener en cuenta estos temas:

PRECARIZACIÓN LABORAL

El sistema inglés, valorado por muchos argentinos que envían a sus hijos a escuelas bilingües, se caracterizó por permitir que el docente esté afectado a un sólo lugar de trabajo. Este tema en la Argentina no sería tan grave en la escuela primaria, donde los docentes están un turno completo con los chicos. Pero en la escuela secundaria está el síntoma de la catástrofe. Docentes que saltan de una escuela a otra con muchos cursos, cientos de alumnos, horas de viaje. Imposible pedirles a esos docentes que estudien más (muchos los hacen), renueven material, se focalicen en una enseñanza personalizada.

El sistema de trabajo debe cambiar, así como también el sistema salarial que no sólo no motiva, sino que no atrae el mejor talento a la profesión. Repensar el sistema de trabajo y salarial, es una de las aristas, que debe estar acompañado por un sistema de evaluación que empiece a apostar por la meritocracia y creatividad docente, y un sistema nacional de evaluación que adhiera a alguno de los sistemas internacionales existentes para comenzar a tener cifras objetivas y transparentes de la realidad educativa del país. Esto permitirá generar implementaciones específicas por región y escuela.


LA ESCUELA TÉCNICA

La década de 1990 vio desaparecer o desvalorizar la enseñanza técnica en el nivel medio y superior. En 1995 a un geólogo le costaba conseguir trabajo; hoy se da el lujo de rechazar varios. La llamada escuela industrial que era generadora de técnicos debe ser prioridad nuevamente. En esta dimensión entran también las escuelas agrarias. A nivel universitario, no alcanza con subsidiar las carreras como las ingenierías. Se requiere de una reforma del modelo de escuela media que fortalezca la enseñanza de disciplinas básicas como ciencias y matemáticas.

USO DE TECNOLOGÍAS

¿Reemplaza la tecnología a los docentes? No, en mi opinión. Pero el debate debe considerar que se eviten medidas efectistas por entender la profundidad del cambio tecnológico en la computación. Dar computadoras a los alumnos no mejora necesariamente el aprendizaje. Hay que pensar un plan para ciudadanos digitales. Y esto hace que no alcance con capacitar a los docentes. No se trata de agregar un curso; se trata de modificar las estructuras y contenidos para adaptarlos y adecuarlos a las nuevas tecnologías. Muchas aulas son anticuadas y están llenas de sillas que miran a un pizarrón o a una pizarra en la que un profesor (que, con suerte, no es demasiado aburrido) escribe sin parar. Mientras tanto, los estudiantes están aburridísimos. Escuelas y aulas pensadas para la revolución industrial en un mundo de revolución tecnológica y digital.

UNIVERSIDAD DEL FUTURO

Hay una necesidad de lograr que todas las instituciones de educación superior en el país generen un conocimiento básico de tres años orientado hacia una disciplina y luego permitan, en una instancia superior, ahondar en una especialización que el alumno pueda ir eligiendo en la universidad que prefiera, sin burocracia para concretar el traslado. Muchas veces, el cambio de universidad en el país es más complejo que ir a estudiar al exterior. Hay que lograr una mayor integración entre la universidad privada y pública a partir de reconocimientos mucho más amplios de materias cursadas y acceso más claro, fácil y flexible entre ambos tipo de instituciones.

Con foco en el futuro, los intelectuales convergen en la necesidad de desarrollar profesionales a partir de un sistema universitario que tienda hacia la especialización flexible y casi personalizada. Esto permitiría la diferenciación en un mercado laboral que así lo demanda. Se plantea una apertura de los planes de estudios para que los estudiantes realicen sus carreras según sus intereses, dejando atrás el modelo de currículum académico cerrado que impone un único camino para graduarse. El mercado laboral pide a gritos gente especializada, por lo que un rediseño universitario necesita un trabajo conjunto entre las instituciones para que las mismas se complementen ofreciendo, cada una, una especialización. Desde la década del 90 se han creado muchas universidades privadas y públicas con perfiles muy diferentes que hoy podrían comenzar a dialogar y a planificar en pos de alcanzar un acuerdo para establecer un sistema educativo de especializaciones, aprovechando la ventaja competitiva de cada una.

El debate es profundo, difícil y espinoso. Cuando son de fondo, las modificaciones afectan a los distintos actores del sistema, y no han de esperarse cambios revolucionarios. Sin embargo, sí se necesitan cambios con visos de largo plazo para garantizar una educación sólida, competitiva y con generación de posibilidades de desarrollo profesional para los estudiantes, y también para solventar la competitividad del país.


viernes, 20 de noviembre de 2015

En Argentina esto sería considerado estigmatizante...

¿Por qué los estudiantes en Japón tienen que limpiar los baños de sus escuelas?
Parece algo impensable en la mayoría de las escuelas de América Latina, pero es una práctica educativa que llena de orgullo a los japoneses.

La Nación


Ayudar con la limpieza ayuda a crear consciencia cívica y cuidado por el patrimonio público. Foto: BBC Mundo.

En la mayoría de los colegios de Japón los estudiantes de primaria y secundaria no solo tienen que barrer, trapear y servir la merienda como parte de su rutina escolar, también tienen que lavar los baños, una práctica se llama o-soji.

"En la escuela, un alumno no sólo estudia las materias, también aprende a cuidar lo que es público y a ser un ciudadano más consciente", explica el profesor Toshinori Saito.

"Y nadie reclama porque siempre ha sido así", le dijo al periodista de BBC Brasil Ewerthon Tobace. Además, cuenta Tobace, en las escuelas japonesas tampoco existen cafeterías o comedores. Los estudiantes comen en la misma aula y son ellos mismos los que organizan todo y sirven a sus colegas.

Y, después de la merienda, es hora de limpiar la escuela. Los alumnos se dividen en grupos, cada uno de los cuales es responsable de lavar lo que se utilizó durante la comida y de la limpieza del salón, los corredores, las escaleras y los baños en un sistema rotativo coordinado por los profesores.

Tradición

No es que en Japón no haya personal profesional encargado del aseo en las escuelas. Los hay y se conocen como yomushuji. Sin embargo, el o-soji es una tradición en las instituciones educativas.



Los niños se dividen en grupos que asumen diferentes tareas de limpieza. Foto: BBC Mundo

"Yo también ayudé a cuidar la escuela, así como lo hicieron mis padres y abuelos, y nos sentimos felices de recibir la tarea porque adquirimos una responsabilidad", dice el profesor Saito.

Michie Afuso, presidente de ABC Japan, una organización sin ánimo de lucro que asiste a la integración de extranjeros y japoneses, dice que la obligación también hace que los niños entiendan la importancia de limpiar lo que está sucio.

Un reflejo de eso se pudo ver en la Copa Mundial de Brasil, cuando los hinchas japoneses llamaron la atención al limpiar las gradas durante los juegos, así como las calles de las ciudades japonesas, que son mundialmente conocidas por su limpieza casi impecable.

"Eso demuestra el nivel de organización del pueblo japonés, que aprende desde pequeño a cuidar del patrimonio público que va a ser utilizado por las próximas generaciones", señaló.

Extranjeros

Para que los extranjeros y sus hijos entiendan cómo funcionan las tradiciones en las escuelas japonesas, muchas provincias han contratado auxiliares bilingües.

La brasileña Emilia Mie Tamada trabaja en la provincia de Nara, que colinda con Kioto, hace más de 15 años como voluntaria.

"En todo este tiempo, no me acuerdo de ningún padre que haya cuestionado la participación de su hijo en la limpieza de la escuela", le contó Mie a BBC Brasil. Y si bien Michie Afuso reconoce que a los ojos de los extranjeros el sistema educacional de Japón puede parecer rígido, también destaca que "la educación es considerado un asunto muy serio por los japoneses".


Para los extranjeros el sistema japonés parecería rígido pero todo lo que tenga que ver con la educación es tomado muy serio en ese país asiático. Foto: BBC Mundo

Es una situación que Emilia Mie Tamada contrasta con algunos incidentes recientes en Brasil, un país que tiene una relación muy estrecha con Japón. Recientemente, en el país sudamericano se generó una polémica porque algunas escuelas "obligaban" a sus alumnos a limpiar los salones de clase, lo que fue denunciado por algunos como un abuso.

Y un video en el que una estudiante agredió a la directora de una escuela brasileña porque le confiscó el teléfono celular se volvió viral en internet y abrió una serie de debates sobre la violencia en esas instituciones; debate que bien podría tener lugar en otros países de la región.

Mientras, en Japón este tipo de abuso en la escuela es raro. "Desde tiempos antiguos, las escuela y los maestros son respetados. Los alumnos aprenden a cultivar un sentimiento de amor y agradecimiento hacia la escuela", dice Emilia Mie.

Lo que sugiere que hay muchas cosas que podríamos aprender de las escuelas de su país.

lunes, 26 de octubre de 2015

Cambios en la educación... ¿nos hace más cultos?

¿Somos más cultos ahora?
La progresiva disminución de asignaturas de humanidades en la educación primaria y secundaria es un ataque frontal al conocimiento. No dejemos de lado el estudio de lo que es substancial para vivir de manera decente, no aburrirse y ser feliz
FRANCESC DE CARRERAS - El País

RAQUEL MARIN

¿Somos hoy más cultos que ayer? Esta pregunta me resulta inquietante. Me refiero a la concepción clásica de cultura, a la idea de cultura que engloba al mundo del pensamiento, a los conocimientos filosóficos, literarios y artísticos. Pues bien, la pregunta me inquieta porque no tengo clara la respuesta.

Hay indicios contradictorios. La universidad pasó, alrededor de los años 70, de ser un centro de aprendizaje de las clases altas y medias, a incluir entre su alumnado a hijos de las clases trabajadoras que nunca hasta entonces habían podido acceder a ella: en principio, por lo menos, la cultura se ha extendido Aunque uno tiene la sensación de que nadie dispone de tiempo para leer libros de literatura o de pensamiento, y ni siquiera tiene afición a leer, si entras en una librería de una cierta calidad compruebas enseguida que la oferta de libros es impresionante, sin comparación mejor que nunca: alguien los compra. El cine, a mi modo de ver, ha empeorado bastante, cada vez las películas se parecen más unas a otras, cortadas todas por el mismo patrón de telefilm televisivo, pero esta es una opinión muy subjetiva que no comparten la mayoría de mis amigos cinéfilos, no me atrevería a hacerla pública, menos a escribirla en El País, denla pues por no leída.

Ciertos indicios son, pues, aparentemente positivos. Pero otros no lo son tanto o, para decirlo claro, son francamente negativos. Una cierta pasión por el fútbol, aunque no la comparta, la puedo entender, así es la condición humana. Pero tantas y tan desaforadas discusiones sobre los detalles más nimios de cualquier partido, la intolerancia que el fútbol fomenta y que suele trasladarse a disputas en otros ámbitos, entre ellos el de la política; los desenfrenados gastos en fichajes y los fabulosos sueldos de los jugadores, sin que nadie se escandalice por ello cuando en otros casos se pone el grito en el cielo por remuneraciones infinitamente menores a ciertos profesionales - o cargos públicos – de mucha mayor responsabilidad y trascendencia social. ¿Cultura futbolística? ¡Por favor! Fanatismo y mercado.

Otro tanto sucede con la gastronomía. ¿Es la gastronomía una forma de cultura? Entendida la palabra cultura en sentido amplio muy probablemente lo es, hoy este término lo abarca casi todo. Pero la sobrestimación de la gastronomía entre ciertas capas intelectuales me parece una manera de sustituir su vacío en ideas y conocimientos, cuando no su coartada moral para una conciencia culpable. A veces pienso que una cierta izquierda entró en decadencia al empezar a pensar que eran compatibles sus posiciones políticas y una desmesurada afición a la gastronomía y al fútbol. Quizás entre la obsesión sartreana por el compromiso - el engagèment, ¿recuerdan? - y la frivolidad de instalarse en la “nada” creyendo que se trataba del “ser”, hubieran podido encontrar sensatas actitudes intermedias que no les indujeran a su cómodo y adormecedor engaño.

Así podría seguir divagando sin llegar a conclusión alguna, sólo apuntando dudas. Pero estas dudas decididamente me abandonan en algunos asuntos concretos sobre los que tengo certezas, quizás equivocadas, pero que me atrevería a defender con argumentos a mi parecer convincentes. Se trata de ciertas cuestiones concretas relacionadas con la enseñanza, la televisión y las llamadas redes sociales. De la televisión me preocupa no ya su calidad general, que por supuesto, sino, especialmente, sus repercusiones que en la cultura política tienen los programas de debate, cada vez más parecidos a un match de boxeo que a una argumentada deliberación. De las redes sociales, admitiendo por supuesto sus inmensas ventajas, me preocupan el anonimato y los tuits, ese mensaje asertivo sin espacio para razonamiento alguno. Pero dejaremos sólo apuntados estos problemas y nos centraremos sólo en un aspecto puntual de la enseñanza.

La sobrestimación de la gastronomía entre ciertas capas intelectuales expresa un vacío de ideas

La progresiva disminución de asignaturas de humanidades –literatura, filosofía, historia, geografía – en la educación primaria y secundaria, pérdida que hoy ya contagia a la universidad, es un ataque frontal a la cultura. En la última reforma de la ley de Educación, la historia de la filosofía pasa a ser optativa y las horas de literatura disminuyen. Sólo con este mero hecho, a los estudiantes – y a la sociedad en general – se les trasmite la idea que estas materias no son importantes porque no sirven para abrirse paso en el mercado de trabajo.

Este giro no es nuevo. Desde los años ochenta ya había desaparecido la vieja asignatura sobre literatura universal, sólo permanecieron literatura española y, en su caso, de la comunidad autónoma con lengua distinta al castellano. En definitiva, la literatura considerada como simple lenguaje, no como hecho cultural substantivo del que el lenguaje es mero trasmisor. Goethe, Voltaire, Dostoyevsky, Tolstoi, Stendhal, Baudelaire, Mann, Kafka, Proust, Faulkner, Camus y tantos otros, son por lo visto prescindibles. Hoy los menores de cincuenta años no saben ni siquiera en qué época situarlos.

Los debates televisivos se parecen más a un match de boxeo que a una argumentada deliberación

Esto sucederá ahora con la filosofía, el núcleo del pensamiento, al pasar a optativa la asignatura sobre su historia. ¿Se puede comprender lo que hoy nos pasa sin estudiar a aquellos que reflexionaron sobre lo que pasaba en su tiempo? ¿Pueden entenderse cabalmente las cuestiones de método en cualquier ciencia, es más, pueden entenderse los fundamentos de la cultura occidental, sin estudiar el decisivo paso que dieron los filósofos presocráticos?

El formidable éxito de la excelente colección de libros sobre los grandes filósofos, dirigida por el profesor Manuel Cruz, que se reparte semanalmente con El País, es reconfortante e indica la sed de conocimiento de unos ciudadanos que, además de ser competentes en su trabajo, quieren saber más, están preocupados por las eternas cuestiones que el hombre se ha ido planteando a lo largo de la historia. ¿Podrán unos estudiantes que no tienen ni idea de estos hitos del pensamiento recurrir a ellos si no sabrán ni siquiera en qué siglo han vivido?

Están bien la informática, el inglés y otras asignaturas instrumentales, pero no dejemos de lado el estudio de aquello que quizás no sirve como medio para ganarse la vida pero que es substancial para vivirla de manera decente, incluso para no aburrirse y ser feliz. Quizás el mercado soluciona mejor que nadie la producción de bienes pero, como dijo Octavio Paz, “no es una respuesta a las necesidades más profundas del hombre. En nuestros espíritus y en nuestros corazones hay un hueco, una sed que no pueden satisfacer las democracias capitalistas ni la técnica”.

Francesc de Carreras es profesor de Derecho Constitucional.

domingo, 25 de octubre de 2015

Finlandia enseñará sin materias

Expertos plantean cómo enseñar sin materias



Líder en educación, Finlandia pondrá en práctica un aprendizaje dividido en tópicos que incluyen varias asignaturas. ¿Podría aplicarse en Argentina? Polémica por la cursiva.


Por Josefina Hagelstrom - Perfil

A partir del año que viene, los alumnos de las escuelas de Finlandia dirán adiós a las materias tal como las conocemos. La iniciativa busca que el aprendizaje ya no se concentre en contenidos específicos, sino que vaya hacia “tópicos” o “fenómenos”. Así, en vez de estudiar por separado Lengua, Matemática o Historia, trabajarán con temas como el cambio climático o la Unión Europea, mediante los cuales estudiarán en conjunto varias asignaturas. Y en vez de tener evaluaciones tal como las conocemos, podrían tener que crear una página de Facebook de divulgación científica, por ejemplo.

En diálogo con PERFIL, Pasi Silander, administrador de Desarrollo de la Educación Digital de Helsinki, y uno de sus impulsores, explica que estos cambios buscan poner la atención sobre temas “más reales”, que les permitan aprender habilidades que les sirvan en su vida laboral. “Con la digitalización de las industrias, las habilidades que se necesitan ahora y en el futuro difieren de las que necesitábamos antes”, agrega.

En ese contexto, la pregunta es si este tipo de experiencia sería aplicable en el país. Consultados por PERFIL, especialistas en educación analizan el tema. Para Gustavo Iaies, director del Centro de Estudios de Políticas Públicas (CEPP), “como idea es interesante: menos materias, más profundas; es un camino a recorrer, pero primero hay que hacer un trabajo de redistribución entre los contenidos básicos y los temas de profundización”, dice. Y agrega que “eso aquí tiene un problema primario, porque hay que transmitir conocimientos ordenados antes, y nosotros no llegamos a eso”.

Para Axel Rivas, investigador de Cippec, si bien el cambio hacia los “fenómenos” es aplicable, “requiere mucha capacidad de articulación entre los temas, capacitación docente y trabajo con las escuelas”. Sin embargo, advierte que debería ser “un camino intermedio, donde las escuelas tengan grandes temas por mes que unifiquen parte del trabajo de varias o todas las materias”.

Por su parte, Irene Kit, de Asociación Civil Educación para Todos y Fundación DAR, opina que la iniciativa responde a que “cambió el acceso al conocimiento en general”, por lo que sería recomendable “modificar el enfoque: ir de las condiciones a los resultados”. Y agrega que “en el mundo son cada vez más los países que abandonan una didáctica centrada en el orden de los contenidos atomizados, en memorizar, para poner énfasis en desarrollar el aprender haciendo”.

Para Kit, “tenemos que plantearnos cómo enriquecemos un enfoque contenidista, para que en la escuela se instalen prácticas concretas orientadas a un enfoque de desarrollo de capacidades, habilidades, que cubran todo lo intelectual, emocional y social”. Y ejemplifica con el caso de Formosa, donde trabajaron tres años con un modelo educativo más ligado al desarrollo, que apuntó a fomentar la comprensión de lectura, el pensamiento crítico y la resolución de problemas, aunque sin cambiar las asignaturas

Cursiva: ¿sí o no?

Finlandia también eliminará la enseñanza de la cursiva. Para Sara Melgar, especialista en Didáctica de la Lengua, el tema es polémico, ya que aprender a escribir tanto en imprenta como en cursiva aporta al desarrollo cognitivo de los alumnos.

Respecto de los valores de la cursiva, sostiene que “la letra manuscrita establece un circuito que fija los contenidos”. Es decir que, cuando escribimos en cursiva, estamos fijando el concepto de “palabra”. “Cuando se aprende a escribir, se aprende a separar las palabras; la cursiva, en las sociedades que la tienen, tiene esa ventaja”, agrega.

En tanto, la imprenta “permite a los chicos descubrir que las palabras están compuestas por letras, y que éstas constituyen las palabras, que pueden intercambiarlas y generar todas las palabras que se les ocurran”

martes, 6 de octubre de 2015

Japón insta a cerrar sus departamentos de "ciencias blandas"

Universidades japonesas están cerrando sus departamentos de Ciencias Sociales y Humanidades 
¿Qué tan valioso es ese grado en la literatura?



Salón de Actos vacío. (Daniel Mirer / Daniel Mirer / Corbis)


Por Erin Blakemore - The Smithsonian

La mayoría de las instituciones de educación superior ofrecen una amplia gama de temas, desde la ingeniería y la ciencia a la literatura, la historia y la sociología han sido durante mucho tiempo una espina dorsal. Pero, como informa Alex Dean para The Guardian, que está cambiando en Japón como más de 50 universidades reducen o eliminan sus departamentos de Humanidades y de Ciencias Sociales en su totalidad.

El cambio se produce después de Hakuban Shimomura, ministro de Educación de Japón, instó a las universidades e institutos de educación superior nacionales "a tomar medidas activas para abolir [departamentos de ciencias sociales y humanidades] o convertirlos a servir en áreas que satisfagan mejor las necesidades de la sociedad", escribe ICEF monitor .

Es un movimiento que está enviando "escalofríos a académicos" en todo el mundo, dice Dean. La crítica de Shimomura de la educación de humanidades se alinea con las prioridades "utilitaristas" de primer ministro japonés, Shinzo Abe, escribe Nash Jenkins del TIME: En un intento de reconstruir la talla de Japón, Abe ha instado a su gobierno a centrarse en la formación profesional.

Dentro de Japón, el anuncio de que docenas de universidades tienen la intención de dejar atrás las humanidades ha horrorizado algunos académicos - incluso los de las ciencias. "La universidad es tanto una educación y una institución de investigación", escribió el Comité Ejecutivo del Consejo de Ciencias de Japón en un comunicado. "Cualquier devaluación de las [humanidades y las ciencias sociales] en la educación superior podría resultar en la reducción de la oportunidad para que los académicos para ejercer plenamente su experiencia académica. Esto a su vez, desalentar a los que aspiran a ser académicos y por la presente obstaculizar el progreso equilibrado de conocimientos académicos ".

Las "ciencias blandas" y las artes siempre han sido estigmatizados como inútil, frívolo y poco práctico. Pero este punto de vista podría estar cambiando, al menos fuera del gobierno de Japón: La investigación reciente muestra que las grandes artes liberales pueden cerrar gran parte de la brecha salarial con los que se especializan en STEM con el tiempo y humanidades grados ahora están en alta demanda entre los arranques de alto perfil .

viernes, 25 de septiembre de 2015

Libro: Desigualdad por esfuerzo diferencial

¿Por qué los niños de la clase trabajadora tienen menos probabilidades de conseguir trabajo de élite? Estudian demasiado duro en la universidad.

Por Henry Farrell - Washington Post


Portada del libro de Lauren Rivera, Pedigree
Cortesía, Princeton University Press

Lauren Rivera es profesora asociada de gestión y organizaciones en la Kellogg School of Management de la Universidad Northwestern. Su reciente libro, "Pedigree: Cómo Elite estudiantes obtienen trabajos de élite", examina cómo la desigualdad se produce por los patrones sociales sutiles de habilidades de educación e informales, así como las grandes fuerzas políticas y económicas. Le pregunté a sus cuatro preguntas sobre el libro.

Cuando los científicos sociales piensan acerca de la desigualdad económica y las formas en que las elites son capaces de dictar ventajas a sus hijos, suelen argumentar que es impulsado por diferencias materiales evidentes, como el acceso a buenas escuelas. Su libro sostiene que el privilegio de élite puede implicar beneficios sutiles que ayudan a algunas estudiantes - y no a otros - conseguir puestos de trabajo en alta clasificación bufetes de abogados, bancos y consultorías de gestión. ¿Cuáles son estas ventajas?

LR - Ya sea intencionadamente o no, los padres de élite exponer a sus hijos a diferentes experiencias y estilos de interactuar que son útiles para salir adelante en la sociedad. Muchos de ellos se da por sentado en los círculos de la clase alta y media-alta, por ejemplo, cómo preparar una solicitud de la universidad (y haber cultivado el tipo correcto de logros para impresionar a los oficiales de admisión), la forma de la red en un entorno de negocios de una manera que parece natural, y cómo desarrollar una buena relación con los profesores, los entrevistadores y otros guardianes de hacer las cosas que usted quiere de aquellos en el poder. Básicamente, si pensamos en la desigualdad económica como una competición deportiva, los padres de élite dan a sus hijos una ventaja, no sólo por ser capaz de permitirse el equipo necesario para jugar, sino también enseñándoles las reglas del juego y darles consejos de expertos en Cómo ganar.

Uno de sus más argumentos contra-intuitiva es que los estudiantes de la clase trabajadora y orígenes de clase media-baja tienen menos probabilidades de obtener puestos de trabajo de élite, ya que se concentran en el estudio en vez de su vida social en la universidad. Eso es todo lo contrario de lo que la sabiduría convencional sugiere. ¿De qué manera la devoción de estos estudiantes a la seriedad académica herido sus perspectivas laborales?

LR - Trabajo y los niños de clase media baja tienen menos probabilidades de participar en actividades extracurriculares estructurados que sus pares más privilegiados mientras crecía (y cuando lo hacen, tienden a participar en menos de ellos). Esto perjudica a sus perspectivas de trabajo de dos maneras. En primer lugar, afecta a los tipos de escuelas los estudiantes asisten. Universidades de élite pesan actividades extracurriculares fuertemente en las decisiones de admisión. Dado que estos empresarios-que ofrecen algunos de los puestos de trabajo de nivel de entrada que más paga en el recluta país casi exclusivamente en las mejores escuelas, muchos estudiantes que se centran exclusivamente en sus estudios estarán fuera de juego mucho antes de que se aplican a las empresas. En segundo lugar, los empleadores también utilizan las actividades extracurriculares, especialmente aquellos que son impulsados ​​por la "pasión" en lugar de interés académico o profesional y requieren grandes inversiones de tiempo y dinero durante muchos años, a currículos de pantalla. Pero la participación en estas actividades, mientras que en la universidad o la escuela de posgrado no es un lujo que todos pueden permitirse, especialmente si alguien tiene que trabajar largas horas para pagar las cuentas o hacerse cargo de miembros de la familia. Esencialmente, extracurriculares terminan siendo un doble filtro de la clase social que perjudica a los solicitantes de empleo de medios más modestos, tanto en entrar en la tubería de reclutamiento y tener éxito en ella.


Su libro encuentra una enorme diferencia en el número de reclutadores en las firmas de élite tratan a los graduados de un pequeño número de universidades prestigiosas, y cómo tratan a todos los demás. Los candidatos que "eligieron" para ir a una escuela de menor puntuación son vistos por algunos reclutadores como haber demostrado el fracaso moral. ¿Qué impulsa a esta cultura de la selectividad y la perpetúa?

LR - En pocas palabras, nos gusta la gente que es similar a nosotros mismos. Pregunte a cualquier persona lo que constituye un buen conductor, líder, o padre, y lo más probable es que van a describir a alguien como ellos. Lo mismo es cierto para la forma en que la gente piensa de los méritos en el mundo laboral. La mayoría de los empleados de estas empresas son graduados de los programas de pregrado o postgrado altamente élite y creen que es donde reside el talento de verdad. Además, teniendo en cuenta lo segregado nuestra sociedad se ha convertido en socio-económicamente, las personas que crecen en comunidades media alta o de clase alta donde la asistencia a la universidad es la norma puede no darse cuenta de los factores estructurales que influyen en itinerarios educativos y erróneamente ven prestigio universitario como un reflejo de la capacidad solo. Por último, las clasificaciones nacionales importan. Clasificaciones proporcionan una presumiblemente manera fácilmente cuantificables, "científica" de dar sentido a la gran cantidad de instituciones educativas que hay. Ambos refuerzan las creencias que el prestigio de la escuela es igual a la calidad de los estudiantes (a pesar de factor cosas que no tienen nada que ver con habilidades de los estudiantes en el rango de una universidad) y sirven como justificación conveniente para limitar la contratación de un pequeño número de escuelas de élite con antiguos alumnos fuertes lazos con empresas .

Una de las formas en que se ha recibido su libro es como una manera para que la gente encontrar la manera de mejorar sus posibilidades de conseguir un trabajo en una empresa de élite. Una opinión prominente trata su libro como más o menos un "cómo" guía para unirse al 1 por ciento. Esto, probablemente, no era su motivación para escribir el libro. ¿Cuál es su reacción a los lectores que están leyendo el libro en formas que pueden potencialmente reforzar el sistema problemática que está describiendo?

LR - El propósito del libro era revelar cómo las ideas acerca de lo que el mérito es y la mejor manera de medirlo contribuyen a las desigualdades de clase en la parte superior de la escala económica de Estados Unidos para-concedió tomada. Desde luego, no era mi intención para el libro que se interpreta como un manual práctico. Sin embargo, dado el aumento de los niveles de ansiedad acerca de la posición de clase entre los relativamente aventajados y los altos riesgos de conseguir puestos de trabajo en estas empresas, no me sorprende del todo que algunas personas lo utilizan como una herramienta para tratar de jugar con el sistema. Tengo sentimientos encontrados acerca de esto. Por un lado, se puede ayudar a los grupos actualmente desfavorecidos en el proceso de contratación, como los estudiantes de la clase obrera y las minorías raciales, entrar en estos puestos de trabajo. Por otro lado, se puede beneficiar a la ya favorecidos y reforzar los tipos de desigualdades documentados en el libro. Mi esperanza, sin embargo, es que la investigación se abrirá los ojos de los empleados acerca de las inequidades e ineficiencias en la forma de contratación se lleva a cabo actualmente en estas empresas y motivar el cambio en una dirección positiva.

miércoles, 16 de septiembre de 2015

La forma de dar clases en la universidad ¿discrimina?

¿Son las clases universitarias injustas?


Por Annie Murphy Paul - New York Times

¿Discrimina las clases de la universidad? ¿Es sesgada en contra de los estudiantes de pregrado que no son blancos, hombres y prósperos?

La idea puede parecer absurda a primera vista. La clase magistral es una antigua y bien establecida tradición en la educación. Para la mayoría de nosotros, simplemente es la forma que toman los cursos universitarios a los que se asiste. Incluso los cursos en línea son en gran parte las clases convencionales subidos a la web.

Sin embargo, un creciente cuerpo de evidencia sugiere que la clase no es genérica o neutral, sino una forma cultural específica que favorece a algunas personas, mientras que discriminar a los demás, incluidas las mujeres, las minorías y de bajos ingresos y estudiantes universitarios de primera generación. Esto no es una cuestión de sesgo instructor; es el formato de las clases en sí - cuando se utiliza por sí solo sin otros apoyos didácticos - que ofrece ventajas injustas a una población ya privilegiados.

La parcialidad del formato de las clases magistrales se ha hecho visible por los estudios que comparan con un estilo diferente de instrucción, llamada aprendizaje activo. Este enfoque proporciona una mayor estructura, la retroalimentación y la interacción, lo que llevó a los estudiantes a convertirse en participantes en la construcción de su propio conocimiento en lugar de receptores pasivos.

La investigación compara los dos métodos ha encontrado consistentemente que los estudiantes mayores de todo un mejor desempeño en los cursos de aprendizaje activo que en cursos de clases tradicionales. Sin embargo, los estudiantes de las mujeres, las minorías y de bajos ingresos y de primera generación se benefician más, en promedio, que los hombres blancos de familias educadas, más ricos.

Hay varias razones posibles. Una de ellas es que los estudiantes pobres y de minorías son desproporcionadamente probable que hayan asistido a escuelas de bajo rendimiento y de haber perdido en las ricas ofertas académicas y extracurriculares familiares a sus compañeros blancos ricos, llegando así en el campus con menos conocimiento de fondo. Este es un problema, ya que la investigación ha demostrado que aprendemos nuevo material de anclaje a los conocimientos que ya poseemos. La misma clase, impartida por el mismo profesor en la misma sala de clases, en realidad no es el mismo para cada escucha de los estudiantes; estudiantes con más conocimiento de fondo estarán en mejores condiciones para absorber y retener lo que oyen.

Los cursos de aprendizaje activo estructuran deliberadamente en su clase y tareas fuera de clase para asegurar que los estudiantes se involucran en varias ocasiones con el material. Los instructores pueden plantear preguntas sobre la lectura de la semana, por ejemplo, y exigir a los estudiantes a responder a las preguntas en línea, para un grado, antes de venir a clase. Este fue el caso de un curso de introducción a la biología enseñada por Kelly A. Hogan en la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill. En un estudio realizado con Sarah L. Eddy de la Universidad de Washington, los investigadores compararon este curso "estructura moderada" (que incluía preguntas de lectura guiada sin grados y ejercicios de aprendizaje activo en su clase, además de las asignaciones en línea graduadas) a la mismo curso impartido en un formato de clases "bajo la estructura".

En el curso estructurado, todos los grupos demográficos informaron completar las lecturas con mayor frecuencia y pasar más tiempo estudiando; todos los grupos también alcanzan altas calificaciones finales que hizo los estudiantes en el curso de clases. Al mismo tiempo, el enfoque de aprendizaje activo trabajó de manera desproporcionada bien para los estudiantes negros - reducir a la mitad la brecha de logros en blanco y negro de manifiesto en el curso de clases - y para los estudiantes universitarios de primera generación, cerrando la brecha entre ellos y los estudiantes de familias con antecedentes de asistencia a la universidad.

Otros cursos de aprendizaje activo administran pruebas frecuentes que obligan a los estudiantes a obtener el conocimiento de la memoria en lugar de pasivamente leerlo otra vez en un libro de texto. Tales pruebas se han demostrado para mejorar la retención de los elementos de hecho entre todos los tipos de estudiantes.

En la Universidad de Texas en Austin, los profesores de psicología James W. Pennebaker y Samuel D. Gosling instituyeron un concurso de apuestas bajas al comienzo de cada reunión de su curso de introducción a la psicología. En comparación con los estudiantes que tomaron el mismo curso en un formato más tradicional, los estudiantes asistieron a clase interrogado más a menudo y lograron resultados en los exámenes; la intervención también redujo en un 50 por ciento la brecha de logros entre los estudiantes más ricos y los menos ricos.

Minoritarios, de bajos ingresos y de primera generación de estudiantes se enfrentan a otra barrera en cursos de clases tradicionales: un ambiente de alta presión que pueden disuadirlos de voluntariado para responder a las preguntas, o poner en peligro su rendimiento si se les llama en. Investigación en psicología ha encontrado que el rendimiento académico se ve reforzada por un sentido de pertenencia - la sensación de que los estudiantes de estos grupos a menudo carecen de forma aguda.

Dichos obstáculos también enfrentan las estudiantes matriculados en los cursos de matemáticas y ciencias; un estudio de 2014 encontró que aunque las mujeres representaban el 60 por ciento de los grandes cursos de introducción a la biología, que representaban menos del 40 por ciento de los que respondieron a las preguntas de los instructores.

El acto de poner los propios pensamientos en palabras y comunicarlos a los demás, la investigación ha demostrado, es un poderoso contribuyente al aprendizaje. Cursos Active-aprendizaje proporcionan regularmente oportunidades para que los estudiantes hablan y debate con otros en un ambiente de colaboración, de baja presión.

En un estudio que se publicará a finales de este año, los investigadores de la Universidad de Amherst en Massachusetts y la Universidad de Yale comparan un curso de química física enseñada en el estilo de clase tradicional con el mismo curso impartido en un formato "volteado", en el que las clases fueron trasladados en línea y más tiempo se dedicó a su clase las actividades de resolución de problemas. Rendimiento de exámenes en general era casi un 12 por ciento más alto en la clase volteado. Las estudiantes fueron algunos de los que se beneficiaron más, lo que les permite realizar casi al mismo nivel que sus pares masculinos.

Dado que los enfoques de aprendizaje activas benefician a todos los estudiantes, pero especialmente a los que son mujeres, de las minorías, de bajos ingresos y de primera generación, no deberían ser todas las universidades la enseñanza de esta manera?

martes, 26 de mayo de 2015

Sigue la discusión de las notas altas en la universidad

¿Cuál es la puntuación de un profesor?
Por Mark Bauerlein - The New York Times



ATLANTA - En las próximas semanas, dos millones de estadounidenses ganará un título de licenciatura y, o bien unirse a la fuerza de trabajo o ir a la escuela de posgrado. Serán alegre ese día, y que recordarán con cariño las escuelas a las que asistieron. Pero a medida que este capítulo único de la vida se cierra y se reflejan en los eventos del campus, una parte fundamental de la educación superior caerá bajo en la escala de contactos significativos: los profesores.

Eso es lo que dicen los estudiantes. Oh, son bastante contentos con sus maestros; después de todo, la mayoría de los estudiantes reciben seguro de su aprobación. En 1960, sólo el 15 por ciento de los notas estaban en el rango "A", pero ahora la tasa es de 43 por ciento, por lo que "A" es la nota más común con diferencia.

Las actitudes de los académicos son amablemente, también. En una encuesta nacional, el 61 por ciento de los estudiantes dijo que los profesores con frecuencia los trataron "como un colega / pares", mientras que sólo el 8 por ciento escuchó frecuente "retroalimentación negativa sobre su trabajo académico." Más de la mitad abandonan la ceremonia de graduación creyendo que son " bien preparado "en el habla, la escritura, el pensamiento crítico y la toma de decisiones.

Pero mientras están satisfechos con los profesores, los estudiantes no están muy interesados ​​en ellos como pensadores y mentores. Se inscriben en cursos y completar las tareas, pero un mayor compromiso es mínimo.

Una medida de interés en lo que los profesores creen, lo que la sabiduría que poseen además del contenido del curso, es la interacción fuera de la clase. Es a menudo durante las conversaciones incidentales celebradas después de que suene la campana y lejos de las exigencias del programa de estudios que la transferencia de visión comienza y la emulación de un estudiante crece. Estudiantes email maestros todo el tiempo - ¿por qué caminar por el campus cuando se puede disparar una nota de su habitación? - Pero esas consultas son demasiado brusco para una verdadera tutoría. Necesitamos tiempo cara.

Aquí, sin embargo, son los números magros. Para la mayoría de los estudiantes de pregrado, más allá de las dos horas y media por semana en la clase, el contacto va desde insignificante o inexistente. En su primer año, el 33 por ciento de los estudiantes reportan que nunca hablan con los profesores fuera de clase, mientras que el 42 por ciento lo hace sólo a veces. Seniors reducir esa tasa de retirada solamente un poco, con un 25 por ciento nunca hablar con los profesores, y 40 por ciento a veces.

No siempre ha sido así. "Yo reverenciaba muchos de mis maestros", Todd Gitlin dijo cuando nos conocimos en la Biblioteca Pública de Nueva York el mes pasado. Él es un respetado profesor de periodismo y sociología en Columbia, pero en la década de 1960 era un niño de la clase obrera de fuego en Harvard antes de convertirse en presidente de Estudiantes por una Sociedad Democrática.

Le pregunté si la agitación estudiantil en ese entonces incluía desprecio de la facultad. No, en absoluto, dijo. Nadie dirigido profesores. Los militantes atacaron a la administración por traicionar lo que los mejores profesores incorporados, el espacio inquisitivo libre de la Torre de Marfil.

Vi lo mismo en mi tiempo en la Universidad de California en Los Ángeles, a principios de 1980, cuando no se podía caminar por la hilera de oficinas de la facultad sin pasar por encima de las piernas extendidas de los comandantes ingleses haciendo cola para las consultas. Clases de primer año podría ser tan grande como 400, pero por el tercer año que se instaló en un campo y llegó a conocer algunos profesores lo suficientemente bien como para charlar con ellos regularmente, y al final. Sabíamos, y sabíamos que estos momentos son el corazón de la educación liberal.

En nuestra hambre de orientación, estábamos ordinaria. La American Freshman encuesta, que ha seguido los estudiantes desde 1966, lo demuestra. Un símbolo en el cuestionario pide estudiantes de primer año de "objetivos considerados esenciales o muy importante." En 1967, el 86 por ciento de los encuestados marcó "el desarrollo de una filosofía de vida significativa," más del doble del número de los que dijo "estar muy bien financieramente ".

Naturalmente, los estudiantes miraron a los profesores para la comprensión moral y mundano. Desde entonces, sin embargo, la búsqueda de significado y hacer dinero han negociado lugares. La primera ha caído a 45 por ciento; el segundo se ha disparado al 82 por ciento.

Volví a U.C.L.A. en una tarde suave en febrero y ha encontrado los pasillos tranquilo y tenue. Decenas de 20 años de edad paseaban y charlaban en el patio exterior, pero en el departamento de Inglés, sólo uno de cada ocho puertas estaba abierta, y apenas una media docena de los 1.400 mayores del departamento esperaron la oportunidad de hablar.

Cuando la universidad es más acerca de la carrera de las ideas, al cheque de pago es más importante que la sabiduría, el papel de los profesores cambios. Podemos estar de 50 años de edad en la parte delantera de la sala con décadas de lectura, escritura, viajes, archivos o laboratorios bajo el cinturón, con 80 cursos impartidos, pero los estudiantes no mentir en la cama dándole vueltas a lo que dijimos. No tienen necesidad de convertirse en discípulos.

Tristemente, profesores presionados por el tiempo de investigación no quieren ellos, tampoco. Como resultado, la mayoría de los estudiantes no saben que la etapa de desarrollo, cuando una mente aprendido les cautivó y que avanzaban hacia una identidad más completa a través de la admiración de y luchan con un modelo a seguir.

Desde la década de 2000, he hecho los estudiantes visitan mi oficina cada dos semanas con un borrador de un ensayo. Tasamos y revisamos la prosa, frase por frase. Pido una idea más clara o un mejor verbo; I círculo un modificador fuera de lugar y esperar, ya que hacen la revisión.

Mientras espero, me solidarizo: Tantas cosas distraen ellos - el gimnasio, mensajes de texto, semana prisa - y muchas veces la cultura del campus los trata como clientes, no los alumnos. Evaluaciones de los estudiantes y ratemyprofessor.com nos pintan como proveedores de servicios. Hace años en la Universidad de Emory, en la que trabajo, un decano del campus vida abordó los nuevos estudiantes con un terrible mensaje: No vaya demasiado lejos en curso - no hay mucho más que hacer aquí! Y, sin embargo, me parece, mis sesiones de escritura ayudar a disminuir las distracciones, y por la tercera reunión de los estudiantes tener una nueva actitud. Se trata de un profesor que rechaza mis peores y estima mis mejores pensamientos y palabras, dicen a sí mismos.

Usted no puede convertirse en una autoridad moral si rara vez desafían a los estudiantes en la clase y participar más allá de ella. Si los profesores no hacen eso, el curso no es una inducción de mentes inquietas en una visión ampliación. Es un requisito a cumplir. Sólo nuestra ayuda con asuntos asignaciones. Cuando se trata de estudiantes, tendremos una sola autoridad: los grados que damos. Nosotros no hacemos una mente temible o una luz moral, un modelo o inspiración. Nos convertimos en acreditadores.