La polémica sobre el verdadero grado de atraso cambiario está a la orden del día. El indicador compara el valor que tiene ese producto en distintos países respecto a lo que cuesta en Estados Unidos. En el plano local, el precio está bastante corrido de su nivel de equilibrio. Ranking
iProfesional
La escalada del blue en los últimos días a más de 15 pesos reinstaló un tema clásico del debate económico argentino: si existe o no un retraso cambiario y cuál es su magnitud.
El Gobierno está determinado a negar que deba hacer cualquier corrección. Tanto que el ministro Axel Kicillof le respondió a industriales diciendo que "no hablen de atraso porque joden a la gente".
Los empresarios habían cometido la imprudencia de cuantificar en 35% el nivel de ajuste que debería hacerse en la cotización del billete verde oficial.
En medio de esta discusión, llega un aporte al debate: acaba de darse a conocer el ranking internacional del célebre índice Big Mac, publicado por The Economist.
La tabla, ya tomada como referencia en todo el mundo para determinar qué monedas están sobrevaluadas y cuáles subvaluadas, compara el precio, en dólares, de la famosa hamburguesa en cada país.
La Argentina tiene el triste e insólito récord de que The Economist la haya dejado fuera de ese ranking, porque en tiempos de Guillermo Moreno el Gobierno estableció una especie de "Indec de la hamburguesa" para abaratar al Big Mac y que, de esa forma, no se reflejara el real nivel del atraso cambiario.
Sin embargo, los economistas argentinos encontraron la forma de esquivar esta distorsión: se percataron de que ese afán intervencionista no alcanzaba a la hamburguesa Cuarto de Libra, cuyo precio coincide prácticamente con el del Big Mac.
Así, un cálculo del Ieral de la Fundación Mediterránea, que toma el precio de ese producto para el mercado local y lo compara con el ranking de The Economist llega a una inquietante conclusión: el tipo de cambio de equilibrio en este país debería ser de $13,78.
Este dato surge de comparar el valor que tiene el producto en la Argentina ($66) respecto al del mismo sándwich en Estados Unidos (u$s4,79). Dicho en otras palabras, a cuánto debería cotizar el billete verde localmente para que esos $66 de la hamburguesa se equipararan con el de los McDonald's neoyorquinos.
Si se expresa el precio del producto en Buenos Aires, al tipo de cambio oficial de $9,14 (según fija el Banco Central), arroja que se está pagando por este sandwich u$s7,22.
Es decir, comprar un Big Mac (o parecido) en Argentina cuesta 50% más -medido en dólares- que lo que vale en Estados Unidos.
Según el informe del Ieral, esto permite concluir que la sobrevaluación de la moneda local es de un 50%, lo que implica un empeoramiento de la competitividad de 23 puntos porcentuales respecto de un año atrás (cuando el grado de apreciación era del 27,6%).
"Esta tendencia es opuesta al fenómeno que se observa en el resto de los países de la región, que tienden a subvaluar sus monedas", afirma el relevamiento.
El empeoramiento de ese índice es, en definitiva, producto de cómo la inflación corrió a una velocidad mucho mayor que la tasa de devaluación del peso.
El sándwich, utilizado por Ieral para efectuar esta comparación, "refleja nítidamente la diferencia entre la evolución de los precios locales y el tipo de cambio: en los últimos 12 meses, el Cuarto de Libra se encareció un 32%, contra una variación del dólar de apenas 12%".
De hecho, esta hamburguesa valía $50 en julio de 2014 y en el mismo mes del 2015 pasó a $66.
Claro que el análisis cambia si -a la hora de hacer la comparación- se utiliza el dólar blue en vez del tipo de cambio oficial. En ese caso, el precio de la hamburguesa local ya no sería u$s7,22 sino que bajaría a u$s4,42.
En conclusíón, tomando este indicador como parámetro, el tipo de cambio de "equilibrio" es de $13,78 para Argentina.
Es decir, esa es la cotización que permite adquirir el mismo producto aquí y en los Estados Unidos. Por lo pronto:
- Esa cifra ($13,78) es casi 8% más baja que la del billete paralelo ($14,91).
- Es un 9,5% inferior que el llamado "dólar de convertibilidad" ($15,24).
Este último es el que surge de comparar los pesos que circulan en la economía con las reservas en poder del Banco Central.
Los más caros del vecindario
El atraso cambiario argentino queda más en evidencia si se analiza el valor del Big Mac en comparación a otros países de la región, ya que los vecinos tienen ahora precios en dólares inferiores al que se cobra en Nueva York y, obviamente, a los de Buenos Aires.Así, en Uruguay este sándwich cuesta un equivalente a u$s4,13, en Chile vale u$s3,27 y en México u$s3,11, para citar algunos ejemplos (ver cuadro).
"Utilizando este indicador para medir también la situación del tipo de cambio en el resto de los países de la región, se tiene que la Argentina es, en 2015, el único con moneda sobrevaluada y que la brecha es muy significativa, ya que el grado de subvaluación del resto de las divisas varía entre el 10% y el 40%, aproximadamente", finaliza el informe del Ieral.
La teoría detrás del índice Big Mac
Para la teoría económica, una forma de establecer la paridad cambiaria argentina puede ser el precio en el que la cantidad de dólares que ingresan al país iguala a la que sale, lo que en la jerga se llama "equilibrio en la balanza de pagos".Pero no es un criterio que tenga aceptación unánime.
Otro mecanismo muy difundido es el que surge de la comparación entre el peso y las monedas de otros países, una forma de determinar si los costos argentinos están demasiado altos en términos internacionales, al punto de dificultar su capacidad exportadora.
Y junto con estos indicadores aparece el Big Mac Index, uno de los índices más populares del mundo para determinar cuáles son las divisas que están lejos de su nivel de equilibrio.
Creado por la revista The Economist en 1986, a partir de relevar lo que se cobra por la hamburguesa de la cadena McDonald's en diversas ciudades del mundo, fue tomada al comienzo como una curiosidad, pero con el correr de los años empezó a ser más considerado por los economistas.
El fundamento teórico del Big Mac Index es que, al tomar como referente un artículo estandarizado -tanto en sus componentes como en su metodología de producción- y por estar presente en una gran cantidad de países, el valor de la hamburguesa resulta un precio confiable para comparar tipos de cambio y poner de manifiesto las diferencias entre territorios.
La teoría de la "paridad de poder de compra" indica que, salvo que haya distorsiones, en todos los países los artículos deberían tender a un mismo precio.
Y que todas las Big Mac deberían cotizar a valores muy similares que en Estados Unidos, dada la condición del dólar como parámetro de moneda en el mundo.
Sin embargo, esto casi nunca ocurre. Y justamente estas diferencias relativas de precios son las que le permiten a The Economist dar pistas sobre qué tan subvaluadas o sobrevaluadas están las diferentes divisas.
• Hay casos de países en los que el costo del Big Mac (medido en dólares) es más alto que en Estados Unidos. Esto da indicios de una moneda apreciada y de una nación con riesgos de devaluación.
• Por el contrario, si la hamburguesa está más barata, esto estaría marcando la presencia de un territorio con su moneda debilitada y que está consumiendo por debajo de sus posibilidades.
En Argentina, el ex secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, presionó a partir de 2011 sobre la cadena McDonald's para que ésta mantuviera un precio artificialmente bajo, de manera de evitar que -en la difusión de la estadística a nivel mundial- el país apareciera demasiado "caro en moneda dura". Por lo que "congeló" su valor de venta al público.
Lo cierto es que surgieron dudas respecto de los criterios del precio de esta hamburguesa, lo cual llevó a The Economist a suspender la información sobre la Argentina en su ranking.
De todas formas, varios economistas "descubrieron" que el cálculo puede hacerse con valores casi iguales a los del "Big Mac libre" si se sustituye la hamburguesa, que aún presenta un precio "atrasado" a pesar de la salida de Moreno.
Es por esto que se realiza el mismo estudio pero sobre el costo de otra hamburguesa de la cadena americana, por ejemplo, el "Cuarto de Libra", cuyo precio no se encuentra controlado.
Según Fast Food Menu Prices, que efectúa el seguimiento de los precios de los restaurantes de comida rápida en Estados Unidos, en dicho país el Cuarto de Libra es apenas 5,3% más barato que un Big Mac.
Por lo que es una buena referencia para conocer el valor del dólar en Argentina.