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martes, 3 de diciembre de 2013

El efecto Marcó Del Pont


Así es la pérdida mensual de reservas del Central




Pérdida mensual de reservas del BCRA desde enero 2012 hasta noviembre 2013


martes, 9 de julio de 2013

Un colchón de 170 billones de dólares en Argentina

Los argentinos ya guardan bajo el “colchón” US$ 170.635 millones

Están fuera del sistema y, en su mayor parte, sin declarar. Si se añaden inmuebles suman US$ 180.000 millones.


A pesar del cepo cambiario que instrumenta el Gobierno desde fines de 2011, durante 2012 los argentinos sacaron U$S 11.700 millones más del sistema financiero. Y de esta manera, acumulan “en el colchón”, en cajas de seguridad, en cuentas bancarias del exterior, en acciones, bonos u otros activos financieros, un total de U$S 170.635 millones según los datos publicados ayer por el INDEC.
Además, la información oficial indica que hay otros U$S 9.021 millones en inversiones inmobiliarias en el exterior. De manera que todo esto suma un poco más de U$S 180.000 millones.
Se trata de una cifra récord que más que cuadruplica las reservas que tiene el Banco Central, que a fines del año pasado sumaban US$ 43.290 millones. También supera la deuda externa (privada y pública) que totalizaba U$S 141.000 millones. Además, como una consecuencia de esa fuga, el año pasado las reservas bajaron en U$S 3.086 millones.
A fines de 2002, los dólares fuera del sistema rondaban los U$S 90.000 millone s, más U$S 6.300 millones de inversiones inmobiliarias. Así en la “década ganada”, los “activos externos” fugados de los argentinos aumentaron en U$S 84.000 millones. Este drenaje de ahorro nacional, que en su mayor parte no está declarado, se financió con los dólares que ingresaron por los excedentes del comercio exterior y se fueron a través de la tradicional “fuga de capitales”.
A fines de 2011, con el cepo cambiario, el Gobierno pretendió frenar esa fuga. Pero, los números dicen que no lo logró porque, por temor a la pesificación u otras medidas, muchos argentinos retiraron sus dólares declarados de los bancos, y a través de otros mecanismos como la compra de dólares para turismo o a través del mercado paralelo, siguieron mandando plata al exterior.
De las cifras del balance de pagos surge que en los primeros tres meses de 2013 la fuga de divisas continuó porque se fueron otros U$S 3.000 millones.
A pesar de la contundencia de estos números, el informe del INDEC conocido como “Posición de Inversión Internacional” señala que la Argentina es un país acreedor en más de U$S 46.000 millones, y no deudor, porque las reservas del BCRA y los activos de los argentinos en el exterior superan lo que se adeuda.
Se trata de un artilugio estadístico porque la estadística considera las divisas fugadas como parte del “activo nacional”.
Pero ni el gobierno ni el Banco Central pueden acceder a esas divisas fugadas para financiar el pago de la deuda o para cualquier otro destino. Además las reservas del BCRA, si bien son un activo, no respaldan la deuda externa pública o privadasino los pesos en circulación y otras deudas de la entidad monetaria.
Incluso esas reservas internacionales, al tipo de cambio actual, no alcanzan para respaldar los propios pasivos del BCRA porque, entre otras razones, el Gobierno estuvo cancelando deuda pública tomando prestadas reservas, a devolver entre 2016 y 2022.
Haciendo bien las cuentas, la Argentina no es acreedora, sino tiene una deuda pública (interna y externa) de más de U$S 200.000 millones. Y el responsable de ese endeudamiento -el Tesoro Nacional- sigue registrando déficits crecientes, lo que lo obliga a tomar más deuda.

jueves, 27 de junio de 2013

Cuenta corriente argentina a la moda: Color rojo

El rojo en cuenta corriente fue el más alto desde la convertibilidad

El déficit en el primer trimestre fue de 2380 millones de dólares y se explica en gran parte por las mayores importaciones de energía y el desequilibrio en el turismo


"La Argentina es uno de los pocos países que tienen equilibrio o ligero superávit en cuenta corriente, y ésa es la fortaleza de este modelo y eso es lo que garantiza que no falten dólares y que no van a faltar dólares", dijo Mercedes Marcó del Pont semanas atrás, cuando el equipo económico defendía ante el Senado el proyecto de blanqueo de capitales. Según los resultados del balance de pagos que presentó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), a la presidenta del Banco Central (BCRA) le va a resultar difícil mantener ese argumento.
Según el Indec, en el primer trimestre del año la Argentina registró un déficit de 2380 millones de dólares en la cuenta corriente, un rojo casi dos veces mayor que en el mismo período del año pasado (US$ 1213 millones). El aumento del déficit se explica no sólo por el deterioro de la balanza comercial (o de mercancías) -provocado, en buena parte, por las crecientes importaciones de combustibles-, sino también por el resultado negativo en la cuenta de servicios, donde el sector turístico tiene un peso importante.
"El déficit en la cuenta corriente en el primer trimestre del año fue el mayor desde la salida de la convertibilidad", dijo el economista jefe de la consultora Ecolatina, Lorenzo Sigaut Gravina. Y añadió que también en la cuenta de servicios (uno de los principales componentes de la cuenta corriente, junto con la cuenta de mercancías y la de rentas de la inversión) el déficit alcanzó niveles récord.
De hecho, el deterioro de la cuenta corriente responde a diversos motivos. Uno de ellos es la fuerte caída en el superávit de mercancías, que pasó de US$ 3143 millones en el primer trimestre de 2012 a 2006 millones en igual período de este año. Esta baja es resultado, principalmente, del aumento en las importaciones de combustibles (57% interanual en el acumulado hasta marzo), pero también, como explicó Sigaut Gravina, de la baja en algunas exportaciones, como las de trigo.
En el segundo trimestre se liquida la mayor parte de las exportaciones de la cosecha gruesa del agro y eso permitiría que la cuenta corriente muestre mejores resultados en el próximo informe (de hecho, en mayo la baja en el superávit comercial fue mucho menor que en los meses previos). Sin embargo, para Soledad Pérez Duhalde, coordinadora de Análisis Económico de abeceb.com, se trataría de una recuperación "estacional".
La analista también destacó el deterioro en la cuenta de servicios, cuyo déficit pasó de US$ 1084 millones a US$ 1575 millones. En esa cuenta, según Pérez Duhalde, tiene un fuerte impacto el desempeño del sector turístico. Es decir, esa cuenta refleja la mayor salida de dólares por los viajes de los argentinos al exterior (donde gastan dinero o extraen dólares en cajeros automáticos) y la menor entrada de divisas por la caída en el turismo receptivo, según muestra el propio Indec.
El cepo cambiario y la consecuente brecha entre la cotización del dólar en el mercado oficial y en el paralelo también juegan en contra de las cuentas externas de la Argentina, ya que, como mencionó Sigaut Gravina, las divisas que los turistas extranjeros cambian en el mercado informal no ingresan en el sistema financiero y, por tanto, no se contabilizan en el balance de pagos.
Los analistas también resaltaron un dato de la cuenta de capital y financiera (cuyo superávit pasó de US$ 1075 millones a 1263 millones): en el primer trimestre del año el endeudamiento externo neto de los gobiernos locales (es decir, la diferencia entre nuevos desembolsos y amortizaciones) fue de apenas US$ 28 millones, 94% menos que en el mismo período del año anterior.
"Eso muestra que los gobiernos locales tienen dificultades para endeudarse en el exterior", dijo Sigaut Gravina. Pérez Duhalde, en tanto, señaló que el cepo cambiario consiguió detener la fuga de capitales y limitar el giro de utilidades al exterior, pero, a la vez, paró la entrada de divisas por otras vías, como endeudamiento externo o turismo.
Los malos resultados de los distintos componentes del balance de pagos se reflejaron en la evolución de las reservas del BCRA, que en el primer trimestre del año cayeron en 2844 millones de dólares.



sábado, 29 de septiembre de 2012

Fuga de capitales en España


España: en el año se fugaron 235.375 millones de euros

Es la cifra más alta de toda la serie. Sin embargo, en julio hubo una desaceleración de la salida de capitales.


De acuerdo. Los jefes de gobierno de España y de Alemania, ayer. /efe


Un total 235.375,7 millones de euros salieron de España en los siete primeros meses del año como consecuencia de la huida de inversiones, préstamos y depósitos. En el mismo periodo de 2011, el saldo era positivo y se acumulaba una entrada neta de capital de 17.689,3 millones, de acuerdo con los datos de la balanza de pagos publicados hoy por el Banco de España. La salida de capitales del país hasta el mes de julio supone la cifra más alta de toda la serie histórica.
No obstante, en julio sólo salieron 15.030,3 millones, muy por debajo de la cifra registrada el mes anterior, más de 56.000 millones de euros.
Con los datos difundidos hoy por el Banco de España se acumulan ya trece meses de salidas netas, aunque la mayor parte del saldo negativo se corresponde con operaciones interbancarias (entre entidades financieras), mientras que la parte de depósitos de empresas y familias que se van de España es pequeña en comparación (9.784 millones entre enero y julio).
En total, las inversiones en el mercado financiero -préstamos, depósitos y otros instrumentos- acumularon salidas netas por valor de 164.882,4 millones, frente a las entradas netas de 27.624,8 millones en el mismo período de 2011.
En lo que respecta a las inversiones de cartera -acciones, fondos de inversión, bonos y obligaciones, e instrumentos del mercado monetario-, se produjeron salidas netas por valor de 83.353,4 millones, mientras que un año antes sólo salían 151,1 millones. En este caso fue mayor la huida de capital extranjero (95.728,5 millones), en tanto que se repatriaron a España fondos por importe 12.375,1 millones.
Frente a las fugas de capital, las inversiones directas originaron en los siete primeros meses del año entradas netas de 1.311,6 millones frente a los 763,4 millones de 2011.

iECO