martes, 3 de septiembre de 2013

Los 0Km como refugio de valor y sus mitos

Lado "B" del 0km como refugio de valor: seguro, patente, nafta y cochera se "comen" el precio en 2 años
Los 0km suben muy por debajo de la inflación y se abaratan en términos de salarios. Como contrapartida, cada uno de los gastos asociados a un vehículo se ha incrementado a razón de un 25% anual. Esto relativiza "el mito" instalado en la sociedad de que brindan protección ante la suba de precios

Por Patricio Eleisegui - iProfesional


Desde que la inflación ganó protagonismo en la discusión de la economía hogareña, una de las máximas más difundidas en los últimos años es esa que postula que comprarse un auto 0 km resulta conveniente para sacarle ventaja a la escalada de precios.
De hecho, esa opción formó parte de la prédica de numerosos economistas que, en su momento, mencionaron a los vehículos nuevos como una reserva de valor, ante la dificultad que presenta la compra de un inmueble.
El cepo al dólar confirmó la predilección por la adquisición de un auto: sólo en lo que va de 2013, la venta de unidades ya superó en casi un 10% las registradas en el mismo lapso de 2012, lo que hace que este sector -junto con el turístico- sea el que más festeje el actual contexto.
En el acumulado de los siete meses del añose registraron 585.000 vehículos nuevos colocados en el mercado.
Pero, a la par de estos buenos resultados, sigue en alza otra cuestión que cala hondo en el bolsillo de los particulares: la suba de los costos asociados a su tenencia y uso.
Esa lista engloba los gastos de alquiler de una cochera, el mantenimiento del rodado, el incremento casi permanente de los combustibles, entre otras erogaciones, como el seguro.
Asumiendo algunas premisas, tales como que el particular realizará un uso "promedio" del mismo, o que no dispone de un espacio guardacoche, la realidad de hoy día indica que deberá afrontar los siguientes desembolsos mensuales:
• El pago de un garaje, que hoy cotiza a unos $800 ($9.600 anuales).
• El desembolso para unos 100 litros de nafta, $800 ($9.600 anuales).
• Un lavado del vehículo por mes, $80 promedio ($960 anuales).
• Seguro, cobertura promedio, $500 mensual ($6.000 anuales).
 Patente, alrededor de 180 pesos bimestral ($960 anuales).
Al cabo del primer año, la suma de todos estos costos de mantenimiento promedia un total del orden de los $28.000.
Para el segundo año, asumiendo una inflación en torno al 25%, los gastos ascenderán a unos$35.000.

Es decir, que al cabo de los dos primeros años se habrá tenido que desembolsar un total cercano a los $63.000.
Esta suma se acerca al precio de un Volkswagen Gol Power 2013, que en la actualidad tiene un valor de mercado de entre $60.000 y $70.000.
De modo tal que si la idea del particular era comprar el vehículo como reserva de valor, deberá tener en cuenta que al cabo de los primeros veinticuatro meses habrá desembolsado una cifra muy similar para el mantenimiento y uso del vehículo.
En buen romance, se encontrará con la ingrata realidad de que los altos costos que rigen hoy día "le comieron" casi la totalidad de lo que pagó por la unidad.
Por supuesto, esta cifra no incluye costos extras, como puede ser el de un service.
Por lo pronto, efectuar el primer mantenimiento programado -que suele fijarse a los 10.000 o 15.000 kilómetros- cuesta hoy alrededor de $1.500 en un taller oficial y casi $1.000 en uno independiente.
"Lo importante para que el auto dure, más allá del tipo de taller, es que se sigan las indicaciones de mantenimiento del fabricante", expuso a este medio Juan Vicente, empresario de la Unión de Propietarios de Talleres Mecánicos.
El directivo recordó que el sector sigue encontrándose con graves problemas para conseguir repuestos. Y esta escasez derivó en que muchas piezas -incluso de las más comunes- hayan registrado subas de hasta un 45% en muy pocos meses.
Cabe señalar que la relación "precio del 0km-gastos asociados" tiende a reducirse cuanto más caro sea el auto.
Así, por ejemplo, para el caso de un vehículo cuyo valor de mercado sea de $100.000 -como es el caso del nuevo Peugeot 208- el total desembolsado para uso y mantenimiento baja al 60%.
De todos modos, las cifras asociadas al mantenimiento de la unidad -tanto en el caso de un auto barato como de otro más caro- relativizan "el mito" instalado de que adquirir un rodado constituye un "refugio de valor" y que brinda cobertura ante la inflación.
Argentina, paraíso automotor
Desde Abeceb.com acercaron precisiones sobre cómo han evolucionado los valores de los vehículos que -al haber subido menos que otros precios- hace que la relación entre los gastos asociados y el valor del bien tienda a igualarse más rápidamente.
"Los 0km se han venido incrementando muy por debajo de la inflación real y de los costos vinculados con su uso y mantenimiento", señaló a iProfesional Maximiliano Scarlan, economista de Abeceb.com.
"Las automotrices no aumentan todas de manera pareja. Pero ninguna ha elevado sus precioscomo se dio, por ejemplo, en el caso de las naftas o de las cocheras. YPF ajustó sus combustibles más de un 20% sólo en lo que va del año", aseguró.
Para comprobar qué tan fuerte es el abaratamiento relativo de los vehículos, iProfesionalconsideró los precios desde 2010 hasta la actualidad, tomando como referente al Volkswagen Gol, uno de los modelos más vendidos del mercado argentino.
Los resultados impresionan: cuando se lo compara con la evolución del salario -el ingreso neto medido por el Indec para los trabajadores del sector privado- se llega a la conclusión de que mientras hace tres años se necesitaban 12,6 sueldos para adquirir el Gol Power de cinco puertas, ahora solamente se requieren de 8,9 salarios.
Un abaratamiento de 30% en términos de sueldos, en apenas tres años, es algo que ocurre muy pocas veces, por más fuerte que sea el proceso de aumento real de los ingresos.

Pero más claro aún resulta el tema cuando se considera el valor de los autos medidos en dólares al tipo de cambio "blue".
  • En 2010, época pre-cepo, el mismo Gol costaba u$s11.848.
  • En 2012, con brecha cambiaria en ascenso, se redujo a u$s9587.
  • Hoy día, con un blue cercano a los $9,00, la cifra cayó a u$s7.570.
En otras palabras, para quienes disponen de dólares ahorrados, este auto se abarató cerca de un 35% respecto de su precio de hace poco más de dos años y alrededor de un 20% en relación con el período pasado.
Esta situación de autos más accesibles al bolsillo se ha hecho evidente en otro segmento: el de los importados.
Ante los ojos de los particulares, los 0km traídos del exterior aparecen como insólitamente baratos.
Es así que, mientras las ventas generales de autos nuevos han subido un promedio de 8% en lo que va del año, respecto de igual período de 2012, cuando se consideran sólo los números de los vehículos de lujo los números son muy distintos.
Tomando en cuenta sólo marcas como Audi, Mercedes Benz, BMW, Porsche, Smart y otros de alta cotización, los patentamientos en 2013 aumentaron un impresionante 44%.
Más aun. El año pasado el aumento de los autos nuevos fue de un 16% aproximadamente. Esto se dio en un contexto en el que la inflación real llegó al 25%. 
Para 2013 se estima que la suba estará en el orden del 18%. Es decir, unos seis o siete puntos por debajo del índice inflacionario. 
Cocheras, nafta y seguros aceleran más rápido
Por otro lado, los gastos asociados a un vehículo se mueven al alza de una manera mucho más rápida.
En el caso de las naftas, hay que destacar que en lo que va del año prácticamente no ha pasado un mes sin que alguna de las principales petroleras haya decidido "retocar" las tarifas de los surtidores.
El último ajuste tuvo lugar hace pocos días y se "derramó" a todas las estaciones de servicio. 
Fue del orden del 4%. Así, el nuevo valor de la súper quedó en torno a los $7,50 en los puntos de expendio de la Ciudad. Aunque en otros lugares esa cifra ya ronda los $8.
Según precisaron a iProfesional desde la consultora Abeceb.com, YPF ya elevó sus combustibles en el primer semestre más de un 22%.
En tanto, durante la primera mitad del año las cocheras de Capital Federal incrementaron sus tarifas entre un 25% y un 30%, con lo cual en barrios como Recoleta, Palermo o Belgrano el precio merodea los $1.000 mensuales.
Ya en puntos como Caballito, Congreso, Balvanera, Flores o Villa Urquiza, esta cifra se acerca a los $800 por mes.
¿Qué sucede con los seguros? "En compañías de primera línea, una cobertura de terceros completo -para un auto de $70.000- ronda los $450", señaló el representante de una compañía.
Afirmó que, en el caso de los 0Km, la mayoría de los particulares tiende a inclinarse por contratar uno contra todo riesgo, en cuyo caso las cuotas se ubican en la franja que va de los $500 a los $600.
En total, según el especialista consultado, el costo de los seguros aumentó un 30% en promedio en los últimos 12 meses, por la inflación, el robo y la siniestralidad, habiendo grandes diferencias entre una compañía y otra.
Así las cosas, mientras los autos vayan subiendo menos que otros precios, los gastos asociados irán "comiéndose" más rápido el valor que se pagó por un vehículo.

Econometría financiera


Externalidades de consumo en la vida urbana


Vivir incómodo: el infierno de dormir entre ruidos, temblores y carteles luminosos

Historias de personas asediadas por un vecino invasor e insufrible; las estrategias para sobrevivir mientras la Justicia mira para otro lado

Vivir pegado a una autopista, sentir el temblor de la casa por el paso del tren, escuchar los llantos de la sala velatoria de al lado, convivir con un taller de motos. La lista de lugares incómodos para vivir podría seguir en una parrafada interminable.
Gloria, Camila y Mariana traen como ejemplos sus pequeños infiernos cotidianos. A Gloria le instalaron frente a su casa un cartel luminoso que funciona como un televisor gigante que no se apaga nunca. Camila vive entre una estación de bomberos y una central de policía; las sirenas, que se encienden hasta cinco veces por día, la obligan a pausar su vida mientras el terror lo ocupa todo. Mariana, que compró su casa en una zona tranquila de Palermo a fines de los 90, hoy padece la música de multitud de bares, las parvas de basura de restaurantes, los desechos de borrachos y la imprudencia de automovilistas que estacionan frente a su garaje y la dejan presa en su casa durante horas.

EL CARTEL LUMINOSO DE GLORIA





 
Gloria, frente al cartel luminoso que es el "nuevo integrante de su familia". Foto: LA NACION / Matías Aimar

Gloria Slemenson compró la casa donde vive, en la avenida Federico Lacroze 3472, en el barrio de Colegiales, en 2006. Estilo antiguo, tres ventanales alargados, altísimos en el frente. El sol de primera hora de la tarde, justo sobre el sofá donde dormiría su siesta. Así lo hizo durante seis años. Su vida cambió cuando el teatro que había frente a su casa se convirtió en la radio Vorterix y se instaló un cartel luminoso que ocupa todo su frente y se refleja con sus luces de colores hasta en el último rincón de su hogar, hasta entonces, apacible.
"Nos pusieron esta especie de televisor que no se apaga nunca y que pasa las mismas publicidades continuamente y no nos permite decidir cuánta luz queremos tener, si queremos estar a oscuras. Es un constante movimiento, un estímulo que no para de molestarte los ojos", dice Gloria, y su voz es una mezcla de queja y bronca. Ella lo llama impotencia. También dice que es un odio el que le genera a veces. "Quilmes, Pepsi, Movistar, Samsung y Sion. Hace poco agregaron una de Halls", recita de memoria el listado de publicidades. "Después las caras de ellos, los de la radio; tengo ganas de tirarles con dardos", se sincera.
"Para no tener el parpadeo del cartel tendríamos que vivir con las persianas cerradas, herméticas y además colgar frazadas negras para que no se filtre. Y la realidad es que a mí me gusta vivir con las persianas abiertas"
La rutina de la familia, que también integran sus dos hijas adolescentes, cambió con este artefacto inmenso que parpadea incansable. "Si querés ver televisión en el living tenés que cerrar las persianas, si querés leer tranquila o usar la computadora, también. Es todo un preparativo cada vez", dice Milena, una de las hijas, instalada en la sala de estar, el lugar donde "ya no se puede estar". Irrita, estresa estar en ese pseudo boliche bailable.
Es de noche, el momento en que el cartel no tiene nada que envidiarle al que aparece en elcapítulo del negocio de pollos en la serie Seinfeld. Mientras madre e hija hablan de espaldas a los ventanales sus caras se vuelven rojas, blancas, rojas otra vez. En los cuadros también rebota la luz del armatoste. Cuentan que el espacio central de la casa ahora se usa menos. A veces, prefieren comer en la cocina para no recibir de lleno el impacto del "nuevo integrante de la familia", como le dicen. En la cocina no se escapan por completo, sólo se reduce el efecto. En la ventana que da al patio, ya no se ve el jardín: también se dibuja el cartel. Publicidades, recitales, las caras de los locutores tamaño gigante.
"Cuando hice una reunión por mi cumpleaños, las primeras dos horas toda la gente estaba hablando del cartel, porque es el nuevo protagonista de la casa. Es una invasión total", se lamenta Gloria, que es arquitecta y cuenta lo mucho que le costó conseguir una casa que le gustara. Su casa le encanta, a no ser, claro, por el detalle del cartel. "Cuando mi otra hija festejó su cumpleaños los amigos le decían: 'Qué linda tu casa, lástima el cartel', lo dice con pena. Se toma la cabeza. Estar un rato en su casa produce dolor de cabeza.
Video: Vivir frente a un cartel que invade toda la casa
Recuerda que cuando eligió vivir en esta casona dedicó tiempo a la iluminación. Dicroicas en ambos extremos de la biblioteca; lámparas focalizadas sobre los cuadros, la luz principal más potente, una más tenue en la zona del sillón. Todo quedó anulado. Aún cuando todas las luces de la casa de Gloria estén apagadas, parece que el televisor no cesara nunca.
"Para no tener el parpadeo tendríamos que vivir con las persianas cerradas, herméticas y además colgar frazadas negras para que no se filtre. Y la realidad es que a mí me gusta vivir con las persianas abiertas y me gusta ver la calle y me gusta el barrio y el edificio donde está el cartel, que es un edificio antiguo que tenía un frente que estaba bien. Y me molesta esta situación: que de golpe y porrazo estemos destinados a soportar esto porque alguien decidió hacer un negocio y no hace otra cosa que pasar publicidades que genera ingresos a su empresa y no genera nada que valga la pena", protesta, se enoja cada vez más. Hace un año y el enojo no pasa.
Agotó varias instancias de diálogo: intentó que la atendieran en el edificio de enfrente, trató de conversar con vecinos -como no les da de lleno el cartel, dijeron que en sus departamentos viven como si todas las noches hubiera relámpagos-, hizo al menos siete denuncias en el CGP de su barrio, en el gobierno porteño, una presentación en la Defensoría del Pueblo de la Ciudad, participó de una mediación, pero no tuvo suerte. "Ahí está", dice, señala hacia la luz roja, blanca, roja otra vez.
Gloria pensó en mudarse, pero no le parece justo. "Me gusta mucho mi casa. Me da bronca que me la arruinen", dice. "¡Esa propaganda es la peor!", interrumpe Milena. El cartel es la atención de las miradas. "Cartel luminoso, es una trampa, es una publicidad de Sion", lee en voz alta. "Parece una cargada".

CAMILA Y LOS RUIDOS MOLESTOS



Ver Vivir entre sirenas en un mapa ampliado
Cuando Camila alquiló un departamento en un noveno piso de la calle Camargo 673, en el barrio de Villa Crespo, no prestó atención a sus vecinos. De un lado, un cuartel de bomberos, del otro, una sede de la policía federal, en el contrafrente un colegio, con jardín de infantes incluido. Las tres veces que fue a verlo no vio autobombas, ni patrulleros, ni chicos. Ningún sonido extraño que la alertara.
Pero esa primera noche en su nueva casa, cuando todavía tenía la mayoría de sus cosas en cajas, empezó a sonar una sirena que la paralizó. "Estaba cenando tranquila después de un día de ir y venir con cosas cuando arrancó una alarma muy fuerte, muy chillona. Me cuesta describirla", dice. "Me asusté, no sabía qué pasaba. Parecía que sonaba adentro de mi casa", cuenta a LA NACION ahora, casi un año después del episodio imborrable.
Se asomó al balcón de su pequeño departamento y los vio. "Los bomberos se movían rápido, con gracia; cada uno parecía saber qué hacer. Algunos se iban poniendo sus trajes por el camino. Deben haber sido pocos minutos pero para mí, fueron eternos", dice. Ella los miraba. No podía hacer otra cosa más que quedarse ahí esperando que el autobomba se llevara ese agudo total. Esa noche no ocurrió, pero a veces se unen los patrulleros de la comisaría. Camila ahora ya sabe eso y sabe también que la sirena de los bomberos puede sonar hasta cinco veces por día.
"Mientras suena la sirena es una invasión total, olvidate de hacer nada"
"Mientras suena es una invasión total, olvidate de hacer nada", dice. La vida se pone en pausa. Si Camila estaba cocinando, tiene que dejar de hacerlo. Si escuchaba música, debe apagarla. Si hablaba por teléfono, se ve obligada a cortar. Si miraba una película, pone stop. Si dormía, se desvela. Incluso en la pileta de la terraza se paralizan todos.
"A la gente que me conoce no le digo de este problema. A veces tengo visitas y si se lo encuentran, se lo encuentran. ¿Qué pasa?, me dicen. Todos se quedan paralizados, no entienden nada", cuenta. En sus caras revive sus primeras veces. "Se nota que el sonido los altera".
Con la policía es menos grave, admite. Los escucha menos porque están en el contrafrente. "La sirena de la policía se suma cuando hay algo muy importante y entonces sí salen varios patrulleros juntos. Ahí se escuchan". Nada comparable con la sirena de los ágiles hombres de mamelucos y cascos.
"El recreo, quiera o no, es mi despertador"
Su primera mañana en el nuevo hogar también fue memorable. Se despertó cerca de las nueve cuando sonó el primer timbre del recreo. Desde la ventana de su cuarto subían los gritos de los chicos que corrían por el patio, cantaban, jugaban. "A la mañana me despiertan ellos sí o sí; quiera o no son mi despertador", dice. Camila cuenta que hay días en que le resulta alegre mirarlos divertirse y se los queda mirando, aún somnolienta. "Otras veces me dan ganas de que se callen y dejen de gritar. Porque tienen cantitos grupales, también a veces se cargan entre sí a los gritos", explica.
Un universo nuevo de voces agudas. Nada comparable con la sirena de los ágiles hombres de mamelucos y cascos.

MARIANA Y EL CAOS DE VIVIR EN PALERMO HOLLYWOOD





 
Los bares transformados en boliches, el gran fastidio de Mariana. Foto: LA NACION / Sebastián Rodeiro

Esa noche a mitad de semana, cerca de las once, Mariana se pasó un buen rato estacionada frente a la casa de Honduras, en el barrio de Palermo, que luego se decidió a comprar. No se veía un alma por la calle, tanto que pensó que la tranquilidad le daba un poco de miedo. Hace quince años de esto. Ahora el barrio que ella describe está en las antípodas: se convirtió en Palermo Hollywood, una zona de Buenos Aires donde bares, restaurantes y boliches ocuparon los lugares de las casas de familia, los vecinos históricos que, de a poco, se fueron yendo.
Mariana también quiere irse y esa es la razón por la que no quiere dar su apellido, ni permitir fotos en el frente de su casa. "Tengo que vender. Hace años que quiero vender", dice, varias veces en la entrevista con LA NACION. Son las seis de la tarde, el living de su casa aún no recibe la música tipo marcha del bar contiguo, que se transforma en boliche con DJ en vivo.
Cuenta que en estos años ya padecieron los más variados problemas con los nuevos inquilinos: ruidos molestos, humedad, extractores que no funcionan, bolsas de basura frente a su casa, tránsito imposible. "Era un barrio de familias. Durante el día había más o menos movimiento porque estaba el canal América; pero en los últimos años explotó de día y de noche. Abrieron muchas productoras y no tenés nunca lugar para estacionar; además están los restaurantes que funcionan al medio día y a la noche. Después, tenés los bares/boliche que empezaron a brotar", relata Mariana.




 
Los bares transformados en boliches, el gran fastidio de Mariana. Foto: LA NACION / Sebastián Rodeiro

El cambio de entorno empezó a complicar su vida. Con el primer restaurante que se instaló al lado de su casa el grave problema fue un extractor que funcionaba en la terraza vecina, pegada a la suya, y que desparramaba grasa al punto que la familia la clausuró. "No se usó más ni para tender ropa, ni para estar. Porque subía la grasa y en la terraza salía algo que giraba, como un dispersor de grasa, entonces ensuciaba el piso, la ropa, todo", recuerda. Habla de una "pelea a muerte" con los vecinos. Dos años vivieron así hasta que los inquilinos se terminaron yendo porque al parecer no les iba bien.
Luego vino otro restaurante. "Cambió el extractor", aclara, como si fuera un hito en su vida. Mariana pensó que todo iría mejor esta vez. Pero habilitaron la terraza en verano y la alquilaban para fiestas de quince. "Ponían karaoke. Era como tener el karaoke acá adentro", se toma la cabeza de sólo pensar en esas épocas. Hizo tantas denuncias que logró que suspendieran el servicio de fiestas. En esa época, frente a ese restaurante abrió otro, tipo parrilla. Fue un caos de gente. "Se puso de moda, servían bien, barato, no sé. Para nosotros eran un infierno esos dos locales juntos", dice.
Ahora no la pasan mucho mejor. El bar que se instaló hace casi un año varias veces por semana contrata a un DJ y pone música en un local que no tiene aislamiento acústico. "Sigue siendo la misma casa del 1800 con puertas de vidrio, pero lo usan como un boliche. No sólo eso sino que habilitaron la terraza y ponen parlantes, con lo cual es como tener un boliche ahí pegado, al aire libre", relata. Las terrazas están separadas por una medianera. Incluso Mariana construyó su habitación allí para escapar a los ruidos de la calle. Pese a estar preparada con vidrios dobles la música le resulta "enloquecedora".
"He tenido que bajar en pijama a las tres de la mañana un miércoles, pararme en el medio del boliche y, hecha una loca a los gritos pelados, pedir que bajen la música"
A sus hijos adolescentes también les molesta. A veces, en solidaridad con su madre, van a mitad de la noche a pedir si pueden bajar la música. "Por el ruido del boliche de al lado he tenido episodios de bajar en pijama a las tres de la mañana de un miércoles, pararme en el medio del boliche con toda esa gente tomando tragos de no sé qué cuernos y yo, hecha una loca a los gritos pelados, pedir que bajen la música. En el medio, sacada, no era yo. Y salía y revoleaba sillas", dice, la misma mujer que conversa amable desde hace una hora en su living. "Como una cosa de bronca. Porque no podés creer que nadie pueda hacer nada con esto. Yo quiero dormir no estoy pidiendo nada de otro mundo". La respuesta que recibe de los dueños de la noche es que ni sueñe con que bajen la música: la música aumenta el consumo de alcohol y ese es el negocio.
Al ruido lo sufren todos en la casa. "Como la habitación de mi hija Vicky da a la calle ella además padece a los que toman en la vereda. Cuando se levanta su frase es: 'No sabés lo que fue anoche'. Lo que pasa es que salen borrachos a cualquier hora de los boliches de por acá. Estacionaron los autos, ni se acuerdan dónde y gritan, andan de acá para allá, prenden los autos con música y no se van. Se quedan, se quedan, se quedan", repite Mariana. Suena cansada.
No son sólo gritos. Encuentran botellas, también orinan en el frente de la casa. "A veces, hemos encontrado a alguno muy borracho tirado acá. En ese caso no podemos hacer más que llamar a la policía, pero si no hizo ningún destrozo no lo pueden venir a buscar", comenta. Además de personas, también se encuentra con autos frente a su garaje. No respetan ni el cartel de no estacionar, ni la línea amarilla; ni los trapitos los intimidan. "Tenemos trapitos, que todo el mundo los odia pero yo los amo porque evitan que me estacionen en el garaje", dice. Aunque admite que no siempre da resultado. A veces ellos se distraen o directamente no les hacen caso y estacionan frente al garaje.
"Tenemos trapitos, que todo el mundo los odia pero yo los amo porque evitan que me estacionen en el garaje"
Ya sabe que si llama a la policía le hacen la multa pero no llevan el auto. Recuerda, no sin pudor, las miles de veces que se metió al restaurante del lado a buscar al dueño del vehículo. "Entraba, me paraba en la mitad del lugar y empezaba a gritar: ¿Quién estacionó en mi garaje? Entonces por ahí se levantaba uno y decía: ¡Ay, perdón! Otras veces no aparecía nadie, pese a que iba mesa por mesa", cuenta. Ella se paraba indignada frente a su casa esperando al infractor. La mayoría de las veces se cansaba antes y se iba. Cuando volvía, la entrada ya estaba libre.
Casi en la despedida, cuando empieza a cansarse de repasar los temas por los que quiere vender a toda costa, se acuerda: "¡La basura! Es un tema porque hay muchos restaurantes. Ninguno quiere tener su basura en la entrada. Los del frente me ponen el carrito en la puerta del garaje, imposible de mover lleno de basura. Entonces salgo con el auto y lo tiro a la mitad de la calle. Ahí lo dejo", dice. Como no alcanzan los contenedores empiezan a dejar cosas en la calle. "Más de una vez me encontré con bolsas negras llenas de carcasas de pollos puestas debajo de mi árbol", dice.
Todo esto está registrado en una veintena de denuncias. "Estamos con presentaciones judiciales y mediaciones a pleno. Pero cuando te hacen ver que eso se vuelve el centro de tu vida te das cuenta de que no vale la pena. Por eso me quiero ir de acá", dice. Hace el esfuerzo de minimizar su fastidio cotidiano, pero no le resulta fácil. Muestra, como evidencia de su karma, el cuaderno que tiene con denuncias -más de catorce- y sus respectivos días y horarios -miércoles, jueves, viernes; 2, 3, 4 de la madrugada- y el estado en que están -la mayoría no prospera. "Si no las seguís de cerca, te archivan las causas. Mañana tengo que llamar por una a ver qué pasó que nunca vino el inspector a constatar", dice, como para sí.

lunes, 2 de septiembre de 2013

Japón sale de crisis por sus geishas

Las mujeres de Japón al rescate
Por LAURA D'ANDREA TYSON

Entre los economistas (la mayoría de ellos hombres), hay una tendencia a tratar la diversidad y la igualdad de género como temas "blandos" - objetivos sociales dignos tal vez, pero secundaria a los asuntos reales de crecimiento económico, creación de empleo y la productividad.

Pero estos temas suaves han subido a la cima de la agenda de crecimiento a largo plazo en Japón, la tercera economía más grande del mundo, donde el primer ministro Shinzo Abe está trabajando para sacudir a la nación de su crisis deflacionaria de 20 años.


Hasta ahora, la atención mundial se ha centrado en las políticas macroeconómicas audaces del señor Abe para levantar la demanda y el crecimiento en el corto plazo. Estas políticas han sido un éxito sorprendente, lo que confirma la validez de los remedios keynesianos para una economía que sufre de una demanda insuficiente, cuando las tasas de interés están atrapados en su límite inferior cero. Como resultado de un mayor gasto deficitario y un amplio programa de flexibilización cuantitativa por parte del Banco de Japón, la economía japonesa está creciendo a un 4 por ciento, la tasa más alta entre las economías avanzadas, y el mercado de valores se ha disparado en un 80 por ciento en los últimos seis meses.

Ahora, después de su reciente victoria electoral impresionante, el primer ministro Abe ha señalado su intención de seguir adelante con la "tercera flecha" de su aljaba política - las reformas estructurales importantes para incrementar el potencial de crecimiento a largo plazo de Japón. Su lista se lee como la lista de un economista neoclásico de "sospechosos de siempre", incluyendo la desregulación, la reestructuración industrial, la reforma del impuesto de sociedades y la liberalización del comercio - todos los objetivos dignos. Pero en una desviación de la tradición, es también defiende las reformas para ampliar las oportunidades económicas para las mujeres.

Abe cree en metas numéricas, y ha establecido varios de ellos para aumentar la participación y la promoción de la mujer en el lugar de trabajo. Quiere eliminar las listas de espera de atención diurna mediante la creación de 200.000 nuevas aperturas de guarderías en los centros públicos autorizados para el año 2015, con otros 200.000 en 2017. Él quiere que las empresas a duplicar su licencia de cuidado de niños de tres años. Él quiere que el 30 por ciento de las posiciones de liderazgo en el gobierno y las empresas para ser ocupados por mujeres en 2020. Se hace un llamado a las empresas japonesas a designar al menos una mujer a sus juntas. Y él está considerando tanto los cambios en las leyes fiscales que desalientan a las madres de trabajo y las nuevas subvenciones de formación para ayudarles a volver al lugar de trabajo posterior a la licencia de cuidado de niños.

Estas iniciativas no están motivados por la corrección política softhearted sino por la lógica económica de cabeza dura. Japón necesita para ampliar su fuerza de trabajo, que está disminuyendo rápidamente como resultado de una tasa de natalidad flacidez y envejecimiento de la población. Las estimaciones del Fondo Monetario Internacional de que la población en edad de trabajar de Japón caerá en casi un 40 por ciento para 2050. Se espera que la participación de los ciudadanos mayores de 65 años para pasar de 24 por ciento en 2012 a 38 por ciento en 2050, cuando la proporción de la población activa de la población de ancianos será de 1 a 1.

"Japón está envejeciendo más rápido que cualquier otro lugar del mundo", el FMI informes. A menos que la nación puede reforzar su fuerza de trabajo, se enfrenta a una resistencia a largo plazo sobre el crecimiento económico en un contexto de alza de las obligaciones aplicables a los derechos de jubilación.

Japón tiene una de las mayores brechas de género en el mundo. A pesar de que las mujeres japonesas son muy educados - de hecho, la tasa de matrícula universitaria para mujeres mayores de 18 años de edad, ahora supera a la de 18 años de edad los varones - la tasa de empleo femenino es aproximadamente 25 puntos porcentuales más baja que la de los hombres, y ocupa el entre los más bajos en los países desarrollados.

Japón también tiene la mayor brecha salarial de género de cualquier país de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, con la excepción de Corea del Sur. En promedio, las mujeres japonesas ganan alrededor de un 72 por ciento de la remuneración de los hombres para trabajos equivalentes. La brecha salarial de género se eleva durante la maternidad y los años de crianza que indica una "pena de pago maternidad". "Esta pena es mayor en Japón que en cualquier otro de la OCDE país, incluyendo a Corea.

En el Global Gender Gap Report 2012 del Foro Económico Mundial, Japón se ubicó en la parte inferior - 102 de 135 países - en un índice que mide la paridad de género en la participación económica y oportunidades. Japón ha tenido siempre la peor clasificación de cualquier economía desarrollada en este índice desde su lanzamiento en 2006.

Hay varias razones de los malos resultados de Japón. Strong valor normas culturales madres que se quedan en casa. Distorsiones fiscales refuerzan estas normas y penalizar dos trabajadores hogares. Las largas horas de trabajo con los requisitos de horas extras hacen que sea difícil de equilibrar las responsabilidades laborales y familiares. Servicios de cuidado de niños son escasos aguda. Hay largas listas de espera para la atención infantil pública, y un número limitado de proveedores privados debido a las regulaciones onerosas que el señor Abe se ha comprometido a ceder.

Las mujeres son a menudo atrapados en un Catch 22: no pueden conseguir un trabajo hasta que una ranura de cuidado de niños está disponible, y que no son elegibles para tal ranura hasta que tengan un trabajo. Y las leyes de inmigración rígidas hacen que sea imposible que las familias japonesas para patrocinar a los trabajadores extranjeros para proporcionar el servicio doméstico. Una mujer japonesa no puede obtener una visa para una niñera extranjera, pero dueño de un club japonés puede obtener una visa para un artista femenina extranjera.

Alrededor del 70 por ciento de las mujeres japonesas abandonan la fuerza de trabajo después de su primer hijo. Sólo alrededor de un tercio de las madres japonesas con niños pequeños trabajos, en comparación con 50 a 60 por ciento en los Estados Unidos, Gran Bretaña y Alemania, y el 75 por ciento en Suecia. Casi tres cuartas partes de las mujeres que trabajan con educación universitaria en Japón abandonen voluntariamente sus puestos de trabajo durante seis meses o más, más del doble de la incidencia entre sus homólogos de los Estados Unidos (31 por ciento) y Alemania (35 por ciento). La mayoría de las mujeres japonesas que dejan de trabajar por responsabilidades familiares quieren reincorporarse a la fuerza laboral, pero tienen un tiempo difícil haciendo así, y enfrentarse a sanciones graves en los salarios y las promociones futuras.

La brecha de género es costoso. El I.M.F. estima que si la tasa de participación laboral femenina de Japón subió a la media del Grupo de los 7 países industrializados, la producción económica per cápita de Japón sería de 4 puntos porcentuales más. Si las tasas de empleo de las mujeres japonesas tenían que llegar a la paridad con las de hombres japoneses, Goldman Sachs estima que la fuerza laboral de Japón ganaría ocho millones de habitantes y su producto interno bruto sería 14 por ciento más grande.

Dada la magnitud de estos efectos, no es de extrañar que la reciente FMI evaluación de la salud de la economía de Japón dio la bienvenida específicamente iniciativas políticas para aumentar el empleo femenino. Tampoco es sorprendente que un grupo de empresarios japoneses ha creado un grupo de trabajo de alto nivel para trabajar con el gobierno de Japón y el Foro Económico Mundial para fomentar las prácticas y políticas de negocio para aumentar las oportunidades económicas para las mujeres y para mejorar el ranking de Japón sobre la Índice del foro.

Sin duda, la reducción de brecha de género de Japón no va a ser fácil. Está arraigada en una amplia gama de barreras culturales, políticas gubernamentales y prácticas de trabajo corporativos. La resistencia política y la inercia siguen siendo formidable. A pesar del llamado del señor Abe a poner a las mujeres en posiciones de liderazgo, hasta la fecha su propio Partido Liberal Democrático ha sido mediocre en el reclutamiento de candidatas para el Parlamento.

La principal razón para pensar que los cambios estructurales de Japón para fomentar el empleo y el adelanto de la mujer tendrán éxito es que no hay otra alternativa. Retos demográficos de Japón son muy graves y el potencial económico desaprovechado de las mujeres japonesas es demasiado grande para ignorarlo. Como astutamente Sr. Abe señaló en un discurso en la primavera pasada, las mujeres son "el recurso más infrautilizado" de Japón.

¿Por qué los adultos jóvenes siguen viviendo con sus padres?

Un número récord de jóvenes siguen viviendo con sus padres : ¿Por qué?
Una historia acerca de los trabajos , los solteros , los grados de licenciatura - y una definición del gobierno muy raro de "hogar"
Derek Thompson - The Atlantic

Otro mes, otro número récord de jóvenes que viven en casa mucho después de sus años de adolescencia son más.

Esta vez, es el Wall Street Journal que informa, a pesar de la mejora de la economía tirando el desempleo en los últimos tres años, la participación de los adultos jóvenes que viven con sus padres sigue aumentando . ¡Todavía! Más de un tercio de los estadounidenses entre 18 y 31 años viven actualmente con sus padres , según la Encuesta de Población Actual .

En serio. ¿Qué está pasando aquí, si no se trata sólo de la economía?

Podemos comenzar a encontrar las respuestas en el nuevo Informe de Investigación Pew, lanzado apenas este mes, que encontró un registro de 21,6 millones de "Millennials" que viven  en casa. La respuesta se reduce a tres variables, que voy a resumir como: la economía, los grados de licenciatura y los solteros.

Tenemos que empezar con la economía. La participación de los jóvenes que viven en el sótano estuvo básicamente sin cambios durante cuatro décadas antes de la recesión. A continuación, la recesión golpeó, y millones de jóvenes que de otro modo habría tenido puestos de trabajo no lo hizo.



El año pasado, los Millennials sin trabajo eran 55 por ciento más propensos a vivir con su gente que los jóvenes trabajadores .

Pero cuando nos fijamos en el cambio desde el año 2007 en el gráfico siguiente, algo que puede parecer gracioso. Sin duda, las cifras de la recesión son altos, pero las cifras de antes de la recesión son altos, también. Uno de cada dos chicos de 18 y 24 años vivían en la casa antes de la crisis ? Y uno de cada siete que tiene más de veintipico?



¿Por qué estaban tantos adultos jóvenes aparentemente viviendo en su casa cuando el desempleo era del 4 por ciento?

Todo se reduce a una definición muy astuto de "casa". En la Encuesta de Población Actual que proporciona estas cifras "los estudiantes universitarios en los dormitorios cuentan como vivir en casa de sus padres. " ¡Habitaciones compartidas! Esto podría te parece tan absurdo - y ciertamente me golpea como cuestionable - pero es fin de semana del Día del Trabajo , y yo no voy a desperdiciarla peleando con la gente de CPS , por lo que no lo es. Dormitorios = lugar de tus padres, de acuerdo con el gobierno.

Este es un gran negocio para los Millennials - estar- en-hogar cifras, ya que la matrícula universitaria se incrementó significativamente durante la recesión - 39 % de los 18 - a 24 años de edad estaban matriculados en la universidad en 2012 , en comparación con la del 35% en 2007 - y afiliados universitarios tienen muchas más probabilidades de estar viviendo en el hogar ( er, en los dormitorios ) que los estudiantes que se saltan la universidad, abandonan o terminan temprano .



Así que una gran parte de la explicación del auge aparente de los niños se quedan en casa es realmente una buena noticia : más grados de licenciatura .

Por último: Más solteros. Los jóvenes solteros son seis veces más propensos a vivir en casa de sus padres que las parejas casadas (comprensiblemente). En los últimos 50 años , la proporción de veinteañeros que están casadas se derrumbó por completo antes de 2007. La recesión hizo el matrimonio aún menos atractiva para muchos jóvenes.



El aumento del desempleo , más personas van a la universidad, y más personas solteras explicar la mayor parte del cambio. Pero la investigación encontró que incluso hubo un aumento en los tres grupos , así . Tal vez todos se afectan entre sí. O tal vez un cuarto factor - malestar general sobre el futuro? una normalización gradual de veinteañeros que viven con sus padres? - Que está en juego .

Pero la comida para llevar más importante es que , a pesar de la gran recesión no era más que una tragedia , el aumento de los jóvenes que viven en la casa no es tan trágico. Es en parte un reflejo de las personas más jóvenes que van a la escuela y el ahorro de dinero antes de iniciar una familia propia .

Elecciones, precios y aversiones

Más es más: ¿Por qué la paradoja de la elección podría ser un mito?
Está ampliamente asumido que las personas con abrumadoras opciones - ya sea en televisores o deliciosas mermeladas - pueden hacer que sean menos propensos a tomar una decisión. Pero tal vez eso está mal.
DEREK THOMPSON


Podría ser uno de los estudios económicos más memorables de los últimos cincuenta años.

Los investigadores presentaron una gran variedad de sabrosas mermeladas y compradores atraídos a comprar un frasco. En una versión, hay seis variedades que se muestran a los compradores. En otro, había 24 mermeladas. La segunda serie, el arreglo más grande atrajo a más tráfico. Pero el conjunto más pequeño llevó a diez veces más compras.

A veces, llegaron a la conclusión, hay muchas opciones que nos repelen. Los investigadores llamaron "la paradoja de la elección". Podría llamarse "sensación abrumado por las opciones." Sin embargo, algunos economistas llaman de otra manera: "una tontería completa."

Hace unos años, Tim Harford del FT informó que si la paradoja de la elección fuera real, no explicaría por qué Starbucks cuenta con más de 80.000 combinaciones de bebida o por qué los supermercados ofrecen decenas de variedades de queso y yogury los productos lácteos casi idénticos. Es posible, por supuesto, que las tiendas de Starbucks y la tienda de comestibles no fuesen inteligentes acerca de la maximización de sus ganancias. Pero quizás estos fabulosamente ricas corporaciones internacionales habían aprendido una lección diferente acerca de la elección: que menos no siempre es más. Más es más.

La no-paradoja de la elección tiene algo de lastre intelectual cuando un equipo de psicólogos y economistas intentó y no pudo replicar el experimento famoso atasco:

Después de diseñar 10 experimentos diferentes en los que se pedía a los participantes a tomar una decisión, y encontrando muy poca evidencia de que la variedad causado ningún problema, Scheibehenne y sus colegas trataron de reunir todos los estudios publicados y no publicados, del [paradoja de la elección].
El promedio de todos estos estudios sugiere que ofrece un montón de opciones adicionales parece hacer ninguna diferencia importante en ambos sentidos. Al parecer, existen circunstancias donde la elección es contraproducente, pero, a pesar de buscar duro para ellos, todavía no sabemos mucho acerca de lo que son. En general, dice Scheibehenne: "Si lo hiciste a uno de estos estudios de mañana, el resultado más probable sería ningún efecto."

Pero ¿qué pasa con el otro extremo del espectro de elección? ¿Qué pasa con los compradores que no tienen ninguna opción en absoluto? Ese es el tema de un nuevo artículo de Daniel Mochon en "aversión a una sola opción" en el nuevo Journal of Consumer Behavior.

Para entender la aversión de una sola opción, piense en el pan. Hace unos años, Williams-Sonoma tenía un problema. No pudieron encontrar a nadie que comprara su máquina de hacer pan, que se vendía por $ 279. Así que hicieron algo que podría parecerle extraño: Comenzaron vendiendo un modelo de US $ 429, también. Por supuesto, nadie compró la versión cara. Pero las ventas del modelo más barato duplicaron.

¿Por qué?

Usted podría ofrecer algunas razones. Una de ellas es que la regla fundamental de los precios es que los consumidores no saben lo que debe costar ninguna cosa (especialmente los panaderos) así que somos persuadidos por pistas. La máquina de hacer pan cara aquí actuó como una pista - un señuelo que le dijo a otros compradores: Hey, ¡vas a encontrar una oferta increíble en esta máquina de hacer pan!

Sin embargo, otra posible razón es que somos muy reacios a ciertos elementos - especialmente artículos caros - cuando presentan sólo una opción. Si entrabas en una tienda Best Buy, y sólo había quedaba una televisión, ¿lo compraría? ¿Incluso si era más o menos lo que estaba buscando? La investigación de Mochon sugiere que muchos de ustedes no lo harían. Cuando se ofreció reproductores de DVD a los participantes en un estudio, sólo el 9% dijo que compraría un modelo de Sony, cuando era la única opción. Cuando se combina con un reproductor de DVD Philips, el número subió a 32%. La mera presencia de opciones cuadruplicó la voluntad de comprar. Mochon replicó el hallazgo con TV y donaciones.

En una frase, cuando los compradores se les da una toma-it-or-deja opción, hace que se interesen más en la búsqueda de comparaciones. La paradoja de la teoría de la elección asume que demasiadas opciones similares - por ejemplo: múltiples variedades de chocolates oscuros belgas, o muchos tipos de mermelada con fresa como ingrediente principal - confundimos lo que realmente estamos buscando. Pero Mochon sugiere que opciones similares aumentan las diferencias y nos hacen más seguros de nuestra elección final.

"Esta investigación sugiere que las tiendas deben ser conscientes de que ofrece muy pocas opciones", dijo Mochon. "Aunque los consumidores pueden encontrar una opción que les gusta, pueden no estar dispuestos a comprarlo sin tener en cuenta otras opciones similares en primer lugar." Es por eso que Best Buy no ofrece dos televisores y dos cámaras. Ofrece cientos. Es por eso que Starbucks y Whole Foods no son irracionales para dar a sus compradores una abundancia de opciones. A veces, las opciones pueden paralizarnos con la ansiedad y nos escape. Pero a veces, las opciones de reducir la ansiedad por lo que nos sentimos como que hemos buscado exhaustivamente - y ahora estamos listos para comprar.

The Atlantic

domingo, 1 de septiembre de 2013

India subsidiará el alimento ante la desnutrición

India da la batalla a la desnutrición
El Parlamento aprueba subsidios a la alimentación básica de 800 millones de personas a un año de las elecciones


ANA GABRIELA ROJAS Nueva Delhi
El País


Dos indios acarrean sacos de trigo en un almacén de Amritsar. / NARINDER NANU (AFP)

La Cámara baja del Parlamento de India ha aprobado un programa por el cual subsidiará cinco kilos de grano al mes a dos tercios de su población, es decir, a casi 800 millones de personas. "Asegurar el acceso a una cantidad adecuada de comida de calidad a precios asequibles para que la gente viva con dignidad". Este es el objetivo, según el texto del programa, que previsiblemente será aprobado por el Senado.

Sonia Gandhi, presidenta del gobernante Partido del Congreso, calificó la iniciativa como un "paso histórico para erradicar el hambre". El rápido crecimiento económico de India en la pasada década no se ha reflejado a idéntico ritmo en la salud de su gente, con un 22% de la población afectada por la desnutrición, según un informe del comité de expertos del Consejo Económico Asesor del primer ministro, Manmohan Singh, del Partido del Congreso. El jefe del Gobierno ha llamado a esta lacra "vergüenza nacional". Más del 27% de la población mundial afectada por malnutrición vive en India, según la ONU. El nuevo programa alimentario beneficiará al 70% de la población rural y al 50% de la urbana, que podrá comprar el kilo de arroz a un precio equivalente a 0,034 euros, el trigo a 0,023 euros y el mijo a 0,011 euros.

Desde diferentes ámbitos se ha tachado este programa como una medida del Partido del Congreso para captar votos ante las elecciones generales del próximo año. "¿Si no, por qué no lo han hecho antes?", se pregunta la economista Jayati Ghosh, que no obstante se felicita de que finalmente se haya aprobado una iniciativa que, de aplicarse apropiadamente, beneficiará a la población hambrienta más grande del mundo.

Ghosh discrepa de las voces críticas que sostienen que el elevado coste del programa, unos 15.000 millones de euros, dañará la economía india, y precisa que el Gobierno ya gasta actualmente casi 12.000 millones en subsidios a los alimentos. "La diferencia no es muy grande para una economía como la india", asegura. Algunos Estados distribuyen ya de forma muy eficiente comida barata entre su población.

Pero algunos activistas están en desacuerdo con este programa. Colin Gonsalves, fundador de la Red Legal para los Derechos Humanos, considera que la situación de los más pobres empeorará. Desde hace una década, y por decisión del Tribunal Supremo, el 40% de la población recibe 35 kilos de granos por familia a un precio subsidiado, que ahora se reducirán a 25 kilos por familia tipo de cinco miembros. "El Gobierno alega que beneficiará a más personas, pero en realidad no será así. No le creo. La prueba es que hay 800 millones de toneladas de grano pudriéndose en almacenes del país porque se ha preferido eso antes que venderlos a precios subsidiados", asegura.

Menos radical, la activista por el derecho a los alimentos Kiran Shaheen dice que el programa es mejor que nada, pero que hay un error de estrategia: "No se debe dar la comida como caridad, sino que el Estado debe crear las condiciones adecuadas para que todo ciudadano tenga una vida digna y pueda ganar su propio sustento".

Una gráfica nepotista

Un gráfico impresionante que muestra cómo realmente funciona el nepotismo
Joe Wiesenthal

He aquí una manera a los ricos mantener sus riquezas: Mediante la contratación de su prole.

De esta manera, la riqueza y la potencia acumulada permanecer en la familia, en lugar de disipar hacia el resto de la sociedad.

Toby Nangle twitteó un gran trabajo del economista Miles Corak, quien ha hecho muchos trabajos en temas de movilidad de la riqueza.

Se muestra la probabilidad de que un hijo en algún momento de su vida trabaja para la misma empresa que su padre trabajó para a través de diversos niveles de ingresos.

La conclusión no puede ser más clara: Según más rico es el padre, más probable es que su hijo vaya a trabajar en una empresa de la que trabajaban en algún momento de su vida.

Como se llega a la misma elite, el porcentaje de hijos compartiendo un empleador con su padre sólo se eleva.

Los números de la encuesta son los de Canadá o Dinamarca, pero la similitud entre los países indica que se trata de un patrón no solo confirmado por estos dos casos.



Business Insider

Econ 101: Modelo de Ramsey-Cass-Koopmans

Modelo de Ramsey-Cass-Koopmans
Wikipedia

El modelo de Ramsey-Cass-Koopmans o el modelo de crecimiento de Ramsey es un modelo neoclásico de crecimiento económico basado principalmente en el trabajo del economista y matemático Frank P. Ramsey, con extensiones significativas hechas por David Cass y Koopmans Tjalling. El modelo de Ramsey difiere del modelo de Solow ya que modeliza explícitamente la elección de consumo en un punto en el tiempo y así como endogeneiza la tasa de ahorro. Como resultado, al contrario que en el modelo de Solow, la tasa de ahorro puede no ser constante a lo largo de la transición al estado de equilibrio a largo plazo. Otra implicación del modelo es que el resultado es un óptimo de Pareto o Pareto eficiente. Este resultado se debe no sólo a la endogeneidad de la tasa de ahorro, sino también por la naturaleza infinita del horizonte de planificación de los agentes en el modelo, sino que no se sostiene en otros modelos con tasas de ahorro endógenas sino dinámicas intergeneracionales más complejas, por ejemplo, modelos generaciones superpuestas de Samuelson o Diamond.

Originalmente Ramsey establece el modelo como el problema de un planificador central de maximizar los niveles de consumo a lo largo de sucesivas generaciones. Sólo más tarde fue un modelo adoptado por los investigadores posteriores como una descripción de una economía dinámica y descentralizada.


Gráfico de espacio de fase (o diagrama de fases) del modelo de Ramsey. La línea azul representa el ajuste dinámico (o silla) Ruta de la economía en la que todas las limitaciones presentes en el modelo están satisfechos. Es un camino estable del sistema dinámico. Las líneas rojas representan trayectorias dinámicas que se rigen por la condición de transversalidad.


Ecuaciones fundamentales del modelo de Ramsey 

Hay dos ecuaciones fundamentales del modelo de Ramsey. La primera es la ley del movimiento de acumulación de capital:

donde k es el capital por trabajador,  es el cambio en el capital por trabajador en el tiempo, c es el consumo por trabajador, f (k) es la producción por trabajador, y   es la tasa de depreciación del capital. Esta ecuación simplemente establece que la inversión, o el aumento de capital por trabajador es la parte de la producción que no se consume, menos la tasa de depreciación del capital. La inversión es, por lo tanto, el mismo que ahorro.


donde I es el nivel de inversión, Y es el nivel de ingresos y s es la tasa de ahorro, o la proporción de los ingresos que se ahorra.

La segunda ecuación se refiere al comportamiento del ahorro de los hogares y es menos intuitiva. Si los hogares maximizan su consumo intertemporal, en cada punto en el tiempo que igualan el beneficio marginal del consumo actual con el de consumo en el futuro, o lo que es equivalente, el beneficio marginal del consumo en el futuro con su costo marginal. Debido a que este es un problema intertemporal esto significa una igualación de las tasas en lugar de los niveles. Hay dos razones por las que las familias prefieren consumir ahora y no en el futuro. En primer lugar, descontar el consumo futuro. En segundo lugar, debido a que la función de utilidad es cóncava, las familias prefieren una trayectoria de consumo suave. Un aumento o disminución de una trayectoria de consumo reduce la utilidad del consumo en el futuro. Por lo tanto la siguiente relación caracteriza a la relación óptima entre los diversos tipos de:
tasa de rendimiento del ahorro = velocidad a la que se descuenta el consumo - porcentaje de cambio en tiempos de utilidad marginal del crecimiento del consumo.
Matemáticamente:
,
Una clase de funciones de utilidad que son compatibles con un estado constante de este modelo son las funciones de utilidad isoelástica o funciones de aversión relativa al riesgo constante (CRRA), dada por:
,
En este caso tenemos:

A continuación, la solución de la ecuación dinámica por encima del crecimiento del consumo se obtiene:
,
que es la segunda ecuación dinámica fundamental del modelo y por lo general se llama la "ecuación de Euler".
Con una función de producción neoclásica con rendimientos constantes a escala, la tasa de interés, r, será igual al producto marginal del capital por trabajador. Un caso particular es dada por la función de producción Cobb-Douglas
,
lo que implica que la tasa de interés bruto es
,
por lo tanto, la tasa de interés neta r
,
Fijando a  y  igual a cero se encuentra el estado de equilibrio de este modelo.


Leer más

  • Ramsey, Frank P. (1928). "A Mathematical Theory of Saving". Economic Journal 38 (152): 543–559. JSTOR 2224098.
  • Dasgupta, Partha S.; Heal, Geoffrey M. (1980). Economic Theory and Exhaustible Resources. Cambridge, UK: Cambridge University Press. ISBN 0720203120. [1]
  • Romer, David (2011). Advanced Macroeconomics (Fourth ed.). New York: McGraw-Hill. ISBN 9780073511375. (See chapter 2). [2]