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domingo, 21 de enero de 2018

10 explicaciones sobre la inflación de 2017

El peor número de inflación del año: la mirada de 10 especialistas sobre el problema que el Gobierno no puede solucionar

En diciembre se registró la suba mensual de precios más alta desde junio del año anterior

Por Carlos Arbia ||  Infobae
carbia@infobae.com




El cierre de 2017 fue la suba mensual de precios más alta desde junio del año anterior. El Índice de Precios al Consumidor Nacional tuvo en diciembre un salto de casi dos puntos porcentuales en comparación con el mes previo (1,4%), y también con el registro de un año atrás (1,2%), a 3,1% con una suba anual del 24,8 por ciento.

Tal como muestra un reciente trabajo del economista Ramiro Castiñeira, desde 1944 la Argentina ha tenido inflación de dos dígitos -como la que ha vuelto a tener desde 2005- durante 44 años; de tres dígitos durante 15 años; y de un solo dígito solo 13 años. Tuvo dos años -1989 y 1990- inflación de cuatro dígitos llegando en julio de 1989 a superar el 5000% anual. Explica además ese trabajo que el 80% de los últimos 74 años Argentina ha tenido una inflación entre 6 y 10 veces la internacional. Pero Castiñeira también señala que no es para nada casual sino causal que, en el mismo período, más del 90% del tiempo el Estado haya tenido déficit fiscal gastando más de lo que recauda. La inflación en Argentina es un fenómeno fiscal y en el 2017 la nación quedó segunda en América Latina detrás de Venezuela, con un récord del 2600 por ciento. El ejemplo de la región este año fue Brasil con una tasa de inflación del 2,95% anual.

Para explicar el futuro de la inflación, sus causas y por qué el número es alto en la Argentina, Infobae convocó a 10 de los principales consultores económicos del país para que den su visión. Los economistas Javier Milei, de Fundación Acordar; José Luis Espert, director de Espert & Asociados; Roberto Cachanosky, economista y columnista de Infobae; José Siaba Serrate, director de Siaba Serrate & Asociados; Diego Giacominni, director de Economía & Regiones; Agustín D'Attellis, director de D'Attellis y Asociados; Lorenzo Sigaut Gravina, economista jefe de Ecolatina; Marcelo Elizondo, director de DNI; Fausto Spotorno, director de Ferreres &  Asociados; y Dante Sica, titular de Abeceb, opinaron para este medio acerca de  uno de los problemas más graves de Argentina.


Javier Milei: "La intromisión de la política representa unos 7 puntos en la inflación de 2017"



Entonado por el triunfo electoral, el día 28 de diciembre el Poder Ejecutivo decidió avanzar sobre la independencia del BCRA, pero en el fondo el mercado apoyó al presidente de la entidad, Federico Sturzenegger, a punto tal de erigirlo como "el Hombre-Ancla", lo cual de cara al futuro debería imponer límites muy fuertes a los avances de la irracionalidad económica del ala política. Lo que se debe entender es que desde hace años hay inflación en Argentina y que se trata de un problema estrictamente monetario consecuencia de la emisión de pesos para financiar el abultado déficit fiscal.

La inflación de diciembre en la Ciudad de Buenos Aires fue del 3,3 por ciento, por lo cual la tasa de variación de precios durante el año 2017 se ubicó en el 26,1 por ciento. Dicha tasa implicó un desvío del 53,5% respecto del techo de la meta del 17%. El desvío en cuestión puede explicarse por una serie de errores: algunos de ellos caen en la órbita del BCRA y otros en la Jefatura de Gabinete. Respecto a los errores del Banco Central, la mutación del sistema de metas de inflación mediante el uso de agregados monetarios hacia la tasa de interés durante el último trimestre de 2016 hizo que la cantidad de dinero se determinara en forma endógena, por lo que frente al aumento de la demanda por (i) recomposición de saldos reales después de la caída de abril, (ii) estacionalidad de Diciembre-Enero y (iii) el blanqueo de capitales, el BCRA expandió la cantidad de dinero leyendo el aumento en cuestión como permanente y al revelarse el mismo como transitorio implicó una convalidación de mayores precios.

Por otra parte, durante los meses de junio y julio, cuando se produce un salto de la demanda de dinero por el pago del medio aguinaldo, el BCRA, en lugar de dejar fija la cantidad de dinero, la aumentó nuevamente y con ello la meta se volvía casi imposible de ser cumplida, especialmente con las subas de tarifas que bajo el esquema monetario del BCRA se vuelven parte de la inflación (la endogeneidad de la cantidad de dinero se torna convalidante).

No todos los errores cayeron del lado del BCRA. El neokeynesianismo de una parte del Gobierno jugó un papel importante también.

En enero de 2017, el Gobierno decidió echar del Banco Nación a Carlos Melconian y nombró a Javier González Fraga. Así, el BNA, que a inicios de 2017 tenía una posición en LEBAC de $150.000 millones, de no haberse embarcado en un jubileo crediticio y con la cantidad de dinero creciendo al 30% debería haber mostrado una posición en el instrumento de $200.000 millones. Sin embargo, fruto de esa especie de populismo crediticio, la posición es de $100.000 millones, lo que implicó una expansión de la cantidad de dinero desde el segundo trimestre del año del 13 por ciento. Por ende, dado que bajo el esquema monetario actual los rezagos de la política monetaria caen a tres meses, ello significa que la intromisión de la política explica cerca de 7 puntos porcentuales de la inflación de 2017. Puesto de otro modo: si la política no hubiera metido la cola, la inflación hubiera sido del 19 por ciento, un número muy cercano al techo de la meta original.


José Luis Espert: "La inflación en Argentina tiene un origen fiscal"



La inflación de 2017 terminó en 25 por ciento, cifra similar a la que Argentina viene teniendo desde hace 11 años, salvo 2009 por lo baja y 2014 y 2016 por lo altas debido a las devaluaciones de principios de esos años (es poco serio comparar la inflación de 2017 contra la de 2016 para forzar la afirmación que "ha bajado fuerte"; 2016 fue el año de la normalización en modo shock del desastre monetario-cambiario de Cristina y el comienzo del ajuste tarifario).

Puesto en forma extrema (como mínimo omitiendo toda dinámica), los ajustes de tarifas, dólar y salarios causan subas en el nivel general de precios. Ésta provoca un aumento en la demanda nominal de dinero que a su vez causaría una caída en el nivel de actividad (hay distintas teorías de ese mecanismo de trasmisión que no discutiré acá) salvo que la mayor demanda de dinero sea satisfecha por mayor oferta (de dinero). Esta mayor oferta de dinero que valida la suba de precios aparece por el financiamiento monetario de los déficits fiscales que hace el BCRA (poco importa si el BCRA emite pesos contra Adelantos Transitorios como en épocas kirchneristas o contra dólares de la deuda externa que el gobierno le entrega a cambio de pesos como ahora; se emiten pesos sin una necesaria contrapartida de demanda).

Pero esto es sólo una cuestión de corto plazo. A la larga, para que haya inflación tiene que haber emisión, que en esencia está causada por el financiamiento monetario de los déficits fiscales. O sea, la inflación en Argentina tiene un origen fiscal. Más que una relación dinero-precios se podría hablar de una relación déficit-precios.

El crecimiento de la cantidad de dinero por encima de la demanda real de dinero no podría traer otra cosa que inflación. Hoy seguimos con una inflación kirchnerista del 25% anual a pesar que, a diferencia del kirchnerismo, la economía y la demanda real de dinero crecen. ¿Qué pasa entonces? Por un lado, la cantidad de dinero crece más (mirar los pasivos monetarios amplios del BCRA con Lebacs y el crédito al sector privado expandiéndose entre 35 y 45% anual) que la demanda debido al financiamiento monetario del déficit fiscal y por otro, hay una validación monetaria de los ajustes de tarifas, de tipo de cambio y de salarios. O sea, hoy, además de la habitual causalidad dinero-precios por el financiamiento monetario del déficit fiscal(y el fuerte crecimiento del crédito bancario), se emite como"consecuencia" de la suba de precios.


Roberto Cachanosky: "La razón de esta fenomenal expansión monetaria está en los dólares que el BCRA le compra al Tesoro por la deuda que este toma para cubrir el déficit fiscal"



La batalla contra la inflación va a ser uno de los grandes desafíos de 2018. Si bien el Gobierno muestra que la inflación bajó del 45% anual que alcanzó como pico en el tercer trimestre de 2016, al 25% actual, lo cierto es que en ese punto hay un truco estadístico. Como dice Mancur Olson en su libro Auge y Decadencia de las Naciones: "Hoy en día los economistas disponemos de tal herramental matemático, estadístico y econométrico que podemos torturar los números hasta que confiesen lo que queremos".

Si uno observa la evolución del IPC de los últimos seis meses puede advertir que la inflación no está bajando, sino que se mantuvo estancada en torno al 24% anual aproximadamente en cinco, pero se aceleró en diciembre a casi 25%, con 3,1% en el mes, en ese caso una vez y media más que un año antes. La inflación de 2 dígitos anuales viene de la era k desde 2007. Basta con ver las tasas de crecimiento del circulante, la expansión primaria del BCRA, y se advierte claramente que está en un piso del 25% anual, llegando a superar el 40% anual y en los últimos 6 meses está por encima del 30% anual. La razón de esta fenomenal expansión monetaria está en los dólares que el BCRA le compra al tesoro por la deuda que este toma para cubrir el déficit fiscal y luego por los adelantos transitorios.

Con semejantes tasas de expansión monetaria, es inevitable que estemos entre los países que más inflación tienen y el segundo en mayor inflación en Sudamérica. La causa es simplemente el déficit fiscal que no permite tener disciplina monetaria ni a fuerza de colocar altas tasa de interés.

Considerando que el nuevo IPC Nacional no tiene suficiente historia para ver la perspectiva anual, se puede tomar el IPC Congreso de los últimos 13 meses y se ve claramente que la inflación quedó estancada en el orden del 23/25 por ciento anual en los últimos seis meses. Y si uno observa la inflación núcleo, es decir, la inflación que no contempla precios regulados, o con alto componente impositivo o volatilidad en sus precios, también se verifica un estancamiento en la tasa de inflación núcleo de los últimos 7 meses, donde queda boyando en un piso del 1,3% mensual, lo cual asegura un piso de inflación anual del 17 por ciento. Ya estaría superando la inflación del 15% pronosticada pocos días atrás si no se quiebra esa tasa núcleo mensual.


Jose Siaba Serrate: "Todo apunta a un banco central dispuesto a correr de atrás a la inflación"



La inflación del 2017 quedó muy por encima del techo del rango meta (17%), aún si se excluye el efecto del cambio de precios relativos pero no muy lejos de los registros de expansión de base y agregados monetarios  de casi un  26 por ciento, y muy inferior si se considera la evolución núcleo. También muy inferior a un elemento singular que tuvo 2017, y al que no se le asigna su rol cabal en relación con la marcha de la inflación, como fue la explosión de crédito bancario (en pesos y dólares) al sector privado superior al 50 por ciento. Y lo mismo vale decir con respecto al incremento del crédito originado vía ANSES, presuntamente con fuerte impacto en el gasto de consumo no durable.

La inflación de diciembre tanto con el IPC Nacional (+3,1%) y IPCBA de la Ciudad de Buenos Aires fueron elevadísimas. Sin embargo, son observaciones "outliers", fuera de rango, debido (principalmente) a la intensidad del shock de ajuste de tarifas, y, por ende, se debe relativizar su evaluación. El problema es que la inflación núcleo se contagió con lecturas muy altas que implican un ascenso brusco con respecto a la tendencia de arrastre, pero que también hay que tomar con pinzas (porque es imposible evitar efectos de segunda vuelta ante aumentos puntuales de tarifas tan fuertes). ¿Qué es lo que cabe esperar en 2018? ¿Qué tan accesible es la nueva meta puntual de 15%? La digestión de un cronograma de significativos ajustes de taras, muy concentrado en el inicio del año, obligará a esperar hasta que se complete el mismo para detectar una desaceleración sensible de la inflación. La política monetaria cambió tras la mudanza de metas, y apunta a una rápida implementación de tasas de interés más bajas, lo que en principio supone una menor capacidad de contención de eventuales presiones alcistas. Ello le confiere a la política de ingresos – en especial, a la negociación de paritarias – un papel más relevante en la determinación de la tasa de inflación de 2018. No está claro, si los aumentos pactados superan en mucho a la meta, cómo va a lograr la política monetaria que la inflación se acerque a la meta, y no que suceda al revés, que sean las paritarias las que definan, de movida, las expectativas de inflación. Todo apunta a un banco central dispuesto a correr de atrás a la inflación, celoso en lograr la convergencia de la tasa de inflación con sus metas, pero con un arsenal sujeto a limitaciones como para que ello ocurra en tiempo y forma, y sin retrasos. Si el equipo económico adoptase un cambio de policy mix (factible en un año no electoral) podría corregir estos desvíos, al menos parcialmente. Una política monetaria más laxa acompañada por una política fiscal más dura aparece como un mejor enfoque para conseguir el cumplimiento de la nueva meta del 15% (y la consecución de otros objetivos que se vislumbran en la trastienda como ser un crecimiento saludable y una moderada depreciación cambiaria).


Diego Giacominni: con esta inflación de diciembre no hay lugar para seguir bajando la tasa de interés de referencia del BCRA.



Mas allá del horrible número de diciembre hay que destacar que la inflación es siempre y en todo lugar un fenómeno estrictamente monetario. De acuerdo con la teoría, la inflación tiende a converger al valor equivalente al aumento de la oferta monetaria por sobre el incremento de la demanda de dinero, que aumenta de la mano del crecimiento de la economía. Ergo, hay inflación cuando el Banco Central emite "de más". En Argentina, los números confirman fuertemente la Teoría. Entre diciembre 2017 y diciembre 2011 se acumula una inflación de +397 por ciento, según IPC Congreso. Paralelamente, la expansión de base monetaria ascendió a +365 por ciento. Entre 1942 y 2015, la inflación ascendió a +148% promedio anual, mientras que la base monetaria creció al +151% promedio anual. En la región, los números son parecidos hasta mediados de los '90s. Entre 1960 y 1995 la inflación promedió +133% anual y la base monetaria creció +135%. Luego, nuestros vecinos aprendieron la lección; y ambos números bajaron a +9% y +15% promedio anual, respectivamente.

Mientras no aprenda esta lección, la Argentina seguirá teniendo alta inflación. En 2017 la base monetaria creció a un ritmo de +27,6% anual y la inflación acumuló +24,9%. La dominancia fiscal hace que el BCRA emita "de más" y haya un sobrante de dinero que se traduzca en elevada inflación. En los últimos 18 meses el BCRA emitió el equivalente del 57% (+$506.395 MM) de la base monetaria para asistir directamente al Tesoro (+$128.580 MM) o para comprar los dólares de la deuda ($394.757 MM) del sector público. El BCRA intenta limpiar este sobrante de dinero colocando LEBACs. El problema es que la tasa de interés real está constante y cada vez se crean menos LEBACs, aumentando la cantidad (no deseada) de dinero; y así se generá más inflación y suba del dólar que, convalidación monetaria mediante, se traslada a precios. En este marco, hay que estarle "encima" a cada una de las licitaciones de LEBACs y prestar atención a qué sucede con la cantidad de dinero. Si en cada una de los vencimientos de LEBACs hay significativos aumentos de la cantidad de dinero, la inflación no se desacelerará o (inclusive) se acelerará; y el dólar subirá más. Eso indicaría que no hay nada de lugar para bajar la tasa. Por el contrario, mostraría que la política debería ser mucho más contractiva y endurecerse; caso contrario el exceso de dinero se limpiará con mucho más inflación.


Agustin D'Attellis: "Este aumento de la inflación muestra el rotundo fracaso de la política monetarista y especulativa de este Gobierno"



El dato de inflación de diciembre (3,1% mensual), que cerró el año en 24,8% es la evidencia del rotundo fracaso de la política implementada los últimos dos años por el BCRA. La concepción monetarista de la inflación, encarnada en el gobierno por Federico Sturzenegger, acumula ya dos años de muy altas tasas de interés, que fomentan la especulación financiera a la vez que actúan en detrimento de cualquier tipo de inversión productiva, y condiciona el crecimiento económico, al debilitar también el consumo interno. Asimismo, esta misma política incrementó a niveles muy preocupantes la vulnerabilidad de la economía frente a los volátiles flujos de capitales especulativos internacionales. Al igual que en los '90, un resfrío en el sudeste asiático puede producir una neumonía en las pampas. El stock de Lebac, que ha superado cómodamente el billón de pesos, actúa como una amenaza latente para la posibilidad de una devaluación abrupta del peso, dado al atraso cambiario generado por la propia atracción de capitales especulativos. Muchos costos a la vista, para ningún beneficio.

El único objetivo de todo esto era el control de un proceso inflacionario, que cierra el 2017 en el mismo nivel que se registró en 2015. Se adoptó un esquema de metas de inflación, que fijó un tope en 17% para 2017, y resultó superado en un 50 por ciento. Para el 2018 el propio BCRA fijó una meta de 10% de inflación, con tope en 12 por ciento, para modificarla a un 15% antes del inicio del año, minando así su base de sustentación, que es justamente la confianza en la propia meta. La inflación núcleo que sigue de cerca el presidente del BCRA, desligándose del aumento en los precios de bienes o servicios regulados, aumentó desde 1,3% en noviembre hasta 1,7% en diciembre, demostrando que la inflación no es un fenómeno estrictamente monetario, sino algo mucho más complejo, que el gobierno subestimó. Hoy los datos corroboran el fracaso, mientras preocupa la insistencia en profundizar el rumbo.


Lorenzo Sigaut Garfigna: "El peligro es que en diciembre pasado se aceleró el aumento de la inflación núcleo que sigue el BCRA"



Con  el número de diciembre se registró la inflación más alta del 2017 y es ademas la mayor variación mensual de todo el año. En consecuencia, la inflación alcanzó 24,8% el año pasado, 7,8p.p. por encima de la banda superior de la meta del Banco Central (12-17% para 2017). Detrás del salto registrado en diciembre se encuentran los fuertes aumentos tarifarios. Las subas a nivel nacional del 30-40% en las tarifas de gas y electricidad, respectivamente, junto a los incrementos de 6% en los servicios de medicina prepaga y de 5% en los combustibles se combinaron para que los precios Regulados crezcan 9,1% en el mes, aportando casi 2 p.p. a la inflación de diciembre.

La elevada inflación registrada en diciembre (3,1%) muestra que el proceso de desinflación aún no está consolidado: en los meses que hay ajuste de tarifas de servicios públicos (para bajar los subsidios económicos) la suba de precios se acelera. Lo notable del caso es que en el últimos mes del año sufrimos más inflación (3,1%) que Brasil a lo largo de todo el 2017 (+2,95%). En la próxima sección analizaremos de forma general los principales drivers de la inflación observada durante el año pasado.
Determinantes de la inflación en 2017 Como se mencionó, la inflación del año pasado cerró en 24,8% a nivel nacional. Dado que el IPC Nacional elaborado por el BCRA (con datos provinciales y del GBA a partir de abril de 2016) alcanzó 36,6% en 2016, esto implica que la inflación se redujo casi 12 p.p. el año pasado. Sin embargo, la suba de precios se ubicó en el promedio de los últimos diez años. La inflación núcleo (variable clave para el BCRA a la hora de definir su política de tasa de interés), se aceleró respecto del promedio de los cuatro meses previos (+1,4%), lo que podría demostrar una reacción de los formadores de precios ante el corrimiento del dólar (+8,0% promedio mensual).

Por último, los precios de bienes y servicios Estacionales prácticamente no se movieron: registraron un alza de apenas 0,3% en el último mes del año evitando una mayor inflación. Por otro lado, la desagregación del IPC Nacional en seis regiones permite observar que la inflación en diciembre fue aún mayor en el Gran Buenos Aires: el Nivel General creció 3,4%la mayor variación desde junio de 2016. Sin embargo, a pesar de que la mayoría de los usuarios sufrieron incrementos promedio de 45% en la tarifa de gas y de 38% en la tarifa de electricidad, por encima de las subas en el resto del país, los precios regulados crecieron 8,9% (-0,2 p.p. que a nivel nacional). Esto demuestra que el factor detrás de la aceleración en este ámbito geográfico fue la aceleración del IPC Núcleo, que creció 2,0% en el mes, exhibiendo también un incremento superior al promedio de los últimos tres meses (+1,4%). Pese a que 2017 fue un año electoral, el Ejecutivo prosiguió con la gradual corrección del atraso tarifario heredado: los precios de bienes y servicios Regulados registraron a nivel nacional, un incremento de 38,7%. Dicha alza es sensiblemente menor a la registrada en 2016, pero claramente superior al resto de las variables nominales de la economía, ya que el año pasado el tipo de cambio oficial trepó menos de 20% y el alza salarial no superó el 30 por ciento.

Marcelo Elizondo: "La rebeldía a bajar de la inflación argentina es persistente y tiene orígenes estructurales"



La inflación de diciembre (3,1%) es alta. Es más que lo esperado y consolida a Argentina como uno de los 5 países con más inflación del planeta. La rebeldía de la inflación local es persistente. Sus causas son varias: en primer lugar, los ajustes necesarios de precios relativos (los ajustes de tarifas garantizan un piso alto -este rubro subió 55% y los de transporte y comunicaciones 34% en el año-).

Además subsisten las dificultades políticas para moderar la política fiscal (especialmente con impacto en el déficit financiero) y la monetaria. El gasto público y el déficit de presupuesto siguen siendo los grandes enemigos argentinos. Por otro lado en 2017 hemos tenido, una vez más, una economía con escasa competencia, lo que es herencia de baja tasa de inversión durante muchos años y, pese a que crecen las importaciones, aun un nivel de apertura muy menor a la media regional.

También aún existen excesivas regulaciones y persistente influencia de factores de poder económicos disfuncionales. Este elevado índice supone expectativas más altas para el inicio de 2018, Y también la necesidad de avanzar en reformas estructurales. Estabilidad, simplicidad y baja aleatoriedad son requisitos del desarrollo. Y una menor inflación será un auxilio para la mejora en la competitividad sistémica.

La inflación es un problema sistémico y el problema también es que no lleguen inversiones para aumentar la oferta de bienes y servicios. Hay una lluvia que viene que son de dólares financieros. Muchos empresarios se han quejado por el atraso cambiario que en parte se da por el ingreso de dólares financieros, sobre todo para financiar el sector público y a empresas privadas. Pero donde no hay lluvia es en la economía real. Allí no hay lluvia de dólares. El año pasado sólo llegaron USD 6.000 millones en inversión directa extranjera. Es un número más bajo que el de Chile que recibió USD 11.000 millones, o Brasil que recibió USD 50.000 millones. Esto es porque Argentina tiene una historia. Entonces los inversores buscan sólidos argumentos de que la historia no se va a repetir. Buscan un buen motivo para venir a invertir. Ademas, Argentina es el país de la región con más alta presión tributaria, con una tasa de interés alta, con regulaciones complejas; todavía es una economía muy cerrada comparada con la región.

Fausto Spotorno: "El dato de diciembre refleja una política monetaria que resultó ser más expansiva de lo necesario para cumplir la meta del 17%"




El dato de inflación de diciembre tiene muchos condimentos. Por un lado, es el reflejo de haber pospuesto algunos aumentos para después de las elecciones. Eso explica la diferencia de 1 punto entre la inflación núcleo y la inflación total. Es cierto que la núcleo se aceleró un poco, pero eso se explica en parte por el servicio doméstico y otros servicios que no están dentro de regulados, así como aumentos propios de las fiestas.

Pero también el dato de diciembre refleja una política monetaria que resultó ser más expansiva de lo necesario para cumplir la meta del 17 por ciento. De hecho, la inflación termino siendo de 24,8% a nivel Nacional y eso está explicado por el crecimiento de los agregados monetarios. De hecho la Base Monetaria creció entre los promedio de diciembre 24,2% y el M2 que mide el dinero en circulación más otros medio de pago como las cajas de ahorro o cuentas corrientes se expandió al 29% anual en el mismo período.

En este contexto, el Presidente del BCRA hace bien en ser cauteloso en materia monetaria de cara al 2018. En especial teniendo en cuenta que el contexto para bajar la inflación es algo hostil, en primer lugar por la inercia inflacionaria y por la recomposición tarifaria. Estos resultados dejaron en claro que la inflación es un bicho mal al que no hay que dar por muerto.


Dante Sica: "Con estos números de diciembre se anticipa un trimestre muy caliente en materia de inflación y será complejo cumplir la meta del 2018"



El número de diciembre muestra que el 2017 cerró con una inflación cercana al 25 por ciento, una muy mala noticia para el Gobierno luego de reducir la tasa de interés de referencia del BCRA. Se esperaba una aceleración de la inflación por los ajustes de tarifas. Pero no sólo cobraron fuerza los precios regulados, sino que incidió la estacionalidad del mes y que la inflación núcleo no cedió. A la suba de tarifas, se sumaron los aumentos de combustibles, la medicina prepaga y los salarios del servicio doméstico. Es cierto que la moderada baja de la tasa de interés de referencia dispuestas recientemente (pese a las expectativas del mercado) adelantaba este resultado de una inflación que mantiene la tendencia descendente, pero a un ritmo más lento. Hacia adelante habrá que seguir de cerca las expectativas y el ajuste de precios relativos, con un primer trimestre que se anticipa caliente y con un largo camino por recorrer en este proceso arduo de desinflación.

De todos modos creo que es bueno que el Gobierno haya puesto en blanco sobre negro un problema que venía arrastrando desde todo 2017 que era la descoordinación entre las metas de política fiscal y de política monetaria. Era como si un avión volara con dos turbinas que funcionan a distinta velocidad, y por tanto avanzaba de manera torcido. Eso generaba una fortísima presión en el corto plazo sobre dos variables claves: tasa de interés real y tipo de cambio. ¿Cuál era el riesgo? Que lo veía para más entrado 2018 porque claramente las metas inflacionarias para 2018 de años anteriores eran incumplibles, el consenso del mercado la ubicaba muy por arriba, y que el Banco Central en lugar de bajar las tasas de interés las volviera a subir, que era lo que tenía que haber hecho, con lo que hubiera generado mayor apreciación del tipo de cambio, con el riesgo de que fuera absorbiendo la ganancia de competitividad que venía consiguiendo el Gobierno con las reformas tributaria, fiscal y, previsional, que tanto le costó.

domingo, 12 de noviembre de 2017

¿Por qué oponerse a los salarios mínimos?

Por qué algunos economistas se oponen a los salarios mínimos





The Economist explica

Los TRABAJADORES de todo el mundo rico han sufrido salarios estancados durante buena parte de la última década, en tiempos buenos y malos. Los gobiernos están respondiendo proponiendo aumentos en las tasas de salario mínimo en Estados Unidos, Gran Bretaña y Alemania. Un piso salarial más alto parece una manera simple y sensata de mejorar las fortunas de los trabajadores. Sin embargo, muchos economistas se oponen: los principales institutos económicos de Alemania, por ejemplo, han empujado a Angela Merkel a resistir los llamados a un piso salarial. ¿Por qué los economistas a menudo se oponen a los salarios mínimos?
Históricamente, el escepticismo de los economistas estaba enraizado en la preocupación de que los pisos salariales redujeran el empleo. Las firmas contratarán a todos los trabajadores, tiene sentido contratar a salarios prevalecientes, según se piensa, de modo que cualquier salario mínimo que obligue a las empresas a pagar más a los trabajadores existentes hará que esos trabajos no sean económicos y provoquen despidos. Sin embargo, los economistas se vieron obligados a replantearse sus puntos de vista a principios de la década de 1990, cuando David Card y Alan Krueger de la Oficina Nacional de Investigación Económica de EE. UU. Presentaron pruebas de que los aumentos del salario mínimo en el pasado no habían tenido el efecto esperado sobre el empleo. Un aumento en el salario mínimo de Nueva Jersey no pareció frenar la contratación en restaurantes de comida rápida en Nueva Jersey en comparación con los de la vecina Pennsylvania, encontraron. Una explicación, especulaban algunos economistas, era que las empresas anteriormente se habían salido con la suya pagando a los trabajadores menos de lo que podían, porque a los trabajadores se les impedía buscar un trabajo mejor remunerado por los costos involucrados en el cambio de trabajo. Eso significaría que cuando los salarios se forzaron, las empresas pudieron absorber los costos sin despedir a nadie.
Los académicos continúan intercambiando estudios sobre si los salarios mínimos cuestan empleos. Una encuesta de 2013 de economistas realizada por la Universidad de Chicago mostró que una estrecha mayoría de los encuestados cree que un aumento en el salario mínimo de los EE. UU. A $ 9 por hora lo haría "notablemente más difícil" para que los trabajadores pobres encuentren trabajo. Sin embargo, una estrecha mayoría también pensó que un aumento sería, sin embargo, valioso, dados los beneficios para quienes podrían encontrar trabajo. La oposición de los economistas a alzas específicas en el salario mínimo a veces se debe a la preocupación de que los políticos impongan niveles salariales imprudentemente altos, que las empresas pueden encontrar difíciles de absorber sin despedir a la gente. Algunos economistas argumentan que existe una mejor alternativa en forma de subsidios salariales, que le cuestan dinero a los gobiernos, pero no desalientan la contratación.

Los recientes debates sobre salarios mínimos se han complicado por las inusuales circunstancias macroeconómicas del momento. Cuando las economías están plagadas de una demanda débil, como gran parte del mundo rico ha sido desde la crisis financiera de 2007-08, las empresas pueden ser más sensibles a los pisos mínimos. (Otros argumentan que las ganancias corporativas saludables muestran que las empresas tienen suficiente espacio para acomodar aumentos de sueldo). Las nuevas tecnologías también podrían amplificar el efecto de empleo de un aumento salarial. Dadas las crecientes oportunidades para la automatización, las empresas pueden aprovechar los pisos con salarios más altos como una excusa para reorganizar la producción y perder puestos de trabajo. Pero la opinión entre los economistas sigue dividida (y los estudios son contradictorios), porque los aumentos más recientes en el salario mínimo han sido comparativamente modestos. El argumento sobre los salarios mínimos parece estar listo para ejecutarse.

jueves, 22 de septiembre de 2016

La trampa (del ingreso medio) del desarrollo argentino

La trampa del desarrollo argentino
Si queremos crecer sin afectar las metas de inclusión, empleo de calidad y federalismo, tenemos que encontrar algo para venderle al mundo más allá de granos y autos a Brasil

Eduardo Levy Yeyati
PARA LA NACION


Crecimiento inclusivo y federal, aumento de productividad, empleo de calidad bien remunerado son todas buenas consignas. Pero al bajar esa estrategia a la práctica notamos que estos objetivos no siempre van de la mano.

Aumentar la productividad implica producir más con menos recursos, incluyendo menos empleo. Federalizar implica mejorar la conectividad y favorecer actividades diseminadas, priorizando la geografía por sobre las ventajas competitivas.


Por otro lado, crecimiento no siempre implica inclusión: la Argentina es un país rico en recursos naturales donde varios de los sectores con mayor potencial de crecimiento, desde el campo a las energías renovables, generan poco empleo. Y la inclusión exige aceptar y trabajar con la fuerza laboral que tenemos.


Foto: Huadi
Si la meta a futuro es crear empleo de calidad con salarios altos (¿quién se opondría a esto?), hoy nuestros trabajadores son mayoritariamente de calificación media y baja (sólo como referencia, apenas el 16% tiene terciario completo) y la calidad educativa de los últimos años sugiere que los nuevos trabajadores no elevarán mucho el promedio actual. Es natural entonces que tengamos un déficit de ingenieros y un superávit de albañiles.


Por eso, si bien la demanda de trabajo calificado es crucial para agregar valor e incentivar la educación, difícilmente resuelva en lo inmediato el problema del empleo y del ingreso, porque la mayor parte del desempleo en la Argentina es trabajo no calificado.

Muchas veces tenemos la tentación de reconciliar estas tensiones entre el futuro deseado y el presente heredado recurriendo a modelos externos. Este "desarrollo por analogía" presume que lo que falló fueron nuestras políticas: si otros partieron de condiciones similares y tuvieron éxito, basta con imitarlos.



Pero la Argentina es el caso paradigmático de la "trampa del ingreso medio" -un trastorno definido, un poco circularmente, como el estancamiento de los países de ingresos medios en su camino al desarrollo. El dato a tener en cuenta es que, al menos por el momento, no hay precedentes de países medianos que hayan sorteado esta trampa sin ayuda externa.

Un trabajo reciente del Banco Mundial lista las economías que pasaron de ingresos medios, en 1960, a ingresos altos en 2010: tres islas industriales (Taiwán, Hong Kong y Singapur), una isla turística (Mauricio), un país desarrollado transitoriamente empobrecido por la guerra (Japón), las economías de la crisis europea (España, Grecia, Irlanda, Portugal) y Corea.

El caso de Corea, en apariencia el más cercano, muestra los límites del desarrollo por analogía: su industrialización temprana comienza en la posguerra bajo una dictadura, con bajos niveles de ingreso y condiciones laborales que en la Argentina ya eran inaceptables a fines de los años 40. Corea eludió la trampa del ingreso medio con el envión de un crecimiento acelerado desde muy abajo, que precedió a las demandas sociales de un país de clase media. Pero cuando estas demandas preceden al desarrollo, el atajo coreano deja de ser viable y los países se quedan "a medio camino" (como resumen Alejandro Foxley y Fernando Henrique Cardoso los casos de Brasil y Chile, que hoy enfrentan el mismo problema).

Pensar nuestro déficit de desarrollo de este modo también pone en duda el popular atajo australiano: invirtiendo el argumento, podríamos decir que Australia eludió la trampa del ingreso medio porque partió de ingresos altos. (Por si esto no fuera suficiente, en sus trabajos Pablo Gerchunoff aporta otros aspectos diferenciadores: recursos naturales por habitante más generosos que los nuestros, un nivel de educación históricamente más elevado, cercanía a los grandes mercados asiáticos en crecimiento y un financiamiento externo "garantizado" por el Commonwealth y la Guerra Fría que explica décadas de déficit externo sin crisis.)

Pensar nuestro desarrollo frustrado en estos términos modifica diametralmente el diagnóstico y la terapia. No fueron (sólo) las malas políticas ni fuimos (sólo) nosotros: las políticas, malas o no, reflejan las demandas de los votantes. Acá y en el resto de los muchos países atrapados en esta escala intermedia.

Y, dado que no hay precedentes exitosos, no hay modelos a imitar.

El objetivo modesto de crecer entre 3% y 4% en los próximos 15 años es un desafío si partimos de que la Argentina creció en promedio 2,7% en los últimos 15 años y 2,3% desde 1983. Si queremos crecer de manera sostenida sin contraponer las metas de inclusión, aumento de productividad, empleo de calidad y federalismo, tenemos que encontrar algo para vender al mundo más allá de granos y autos a Brasil. En este frente, dos ejemplos de encadenamientos productivos señalan el camino.

Foxley, en su libro de 2012 sobre la trampa de ingresos medios, rescata a Finlandia como ejemplo de fuga hacia adelante. Finlandia es también el ejemplo preferido de Ricardo Hausmann para ilustrar el proceso de encadenamiento de materias primas a industrias de alto valor: Finlandia pasó de talar bosques a diseñar cortadoras; de ahí, a diseñar maquinarias de precisión, y de ahí, a diseñar Nokia. Un encadenamiento lateral no muy distinto del que, más cerca de casa, fue de la soja a la maquinaria agrícola.

A este "modelo Nokia" podríamos sumarle un "modelo Malbec" siguiendo el ejemplo de nuestros vinos (que a su vez siguieron el ejemplo del Cabernet de Napa Valley o el Syrah australiano). De la uva a granel al vino, del vino al varietal local, del varietal local a la marca global. En la misma línea, tanto la certificación de alimentos orgánicos como la comercialización de las bondades bioeconómicas de la siembra directa (en granos y en máquinas) son modos inteligentes de "industrializar" nuestros recursos naturales y contribuir al supermercado premium del mundo desarrollado.

Lo mismo aplica a nuestras industrias culturales o educativas. O al turismo receptivo, esa mina de oro que, aún inexplotada, ya exporta US$ 5 mil millones. LGBT, medicinal, de adultos mayores, ecológico y de aventura, el turismo es la industria ideal para resolver el descalce entre oferta y demanda de empleo, porque satisface tres condiciones clave para la inclusión: demanda mano de obra de poca calificación, baja especificidad y, si abaratamos el transporte, regionalmente equilibrada.

Venderles Malbec a los chinos, alimentos orgánicos, a los norteamericanos o turismo aventura, a los alemanes es un buen comienzo para encontrarle la vuelta a la trampa de ingresos medios en la que estamos varadas hace casi un siglo. Una cosa es segura: si logramos salir, no será con un modelo genérico sino con una receta propia.

viernes, 4 de marzo de 2016

Big Data y la interacción entre empresas y gobierno

Atención gobiernos: Big Data es un elemento de cambio para las empresas




Por Alla Morrison
The data blog - World Bank 


Cuando hablo de grandes volúmenes de datos con los líderes del gobierno en nuestros países clientes de todo el mundo, a menudo encontrará que muchos de ellos tienen un cierto conocimiento de los datos grandes, pero para muchos, que es donde termina la historia. La mayoría no están seguros de cómo va a afectar a ellos o lo que debe hacer. La mayoría de los líderes no tienen mucho conocimiento de que el impacto de grandes volúmenes de datos es probable que sea amplio y profundo. Lo que los gobiernos no (o no hacerlo) probablemente dará forma a la competitividad de las empresas de sus países para la próxima generación.

En los países más a lo largo de su curva de adopción, grandes volúmenes de datos ya ha comenzado a transformar no sólo el sector de tecnología de la información, pero casi todos los negocios en todas las industrias. Incorporación de hoy en día grandes volúmenes de datos es análogo en muchos aspectos a los efectos de transformación de energía eléctrica en las industrias en el siglo 19. Mientras que la producción y distribución de electricidad se convirtió en una industria en sí misma, sino que también llevó a las empresas en todos los sectores de rediseñar sus procesos para tomar ventaja de este nuevo recurso, dando lugar a aumentos de productividad sin precedentes de la segunda revolución industrial. No es de extrañar, pues, que en el reciente Foro Económico Mundial en Davos, se ha hablado mucho sobre la economía global estar en un borde de una cuarta revolución industrial, impulsada por los datos grandes innovaciones habilitadas. Los gobiernos de las economías emergentes no pueden permitirse el lujo de quedar fuera de esta conversación.

En este blog espero mostrar cómo los datos grandes, como un nuevo recurso - una que es abundante y de rápido crecimiento - está transformando el entorno empresarial y cambiar la forma en que las empresas compiten entre sí. También ofreceré sugerencias de medidas y políticas que los gobiernos pueden iniciar posicionar sus economías para el advenimiento de la llamada Revolución de grandes volúmenes de datos, y mostrar que si no lo hacen, corren el riesgo de perder cuota de mercado a los competidores de datos con conocimientos más digitales . Por último, voy a compartir una nueva herramienta: Open Data for Business (OD4B) Assessment and Engagement Tool, que el Banco Mundial ha puesto en marcha para ayudar a los gobiernos sentar las bases para el uso de un tipo de datos grande - los datos de un gobierno abierto - por el privado sector.


Cómo está afectando a grandes volúmenes de datos y la competitividad de las empresas

Big data es una industria multimillonaria en sí mismo, con tres áreas principales de la cadena de valor de los componentes:

  • Generación y recolección,
  • Almacenamiento, la transmisión y la seguridad, así como
  • Análisis.

Pero los grandes datos es mucho más que esto. También es una fuente de innovación que genera nuevos bienes y servicios. Y quizás lo más crítico, los grandes datos está cambiando radicalmente la forma de hacer negocios mediante la transformación de las funciones centrales del negocio y la naturaleza misma de la competencia.

Si usted ha estudiado negocio hace algunos años como yo, que ha aprendido finanzas, contabilidad, marketing y estrategia. Hoy en día todas estas disciplinas están siendo transformadas por los datos digitales. Contadores ponderan maneras de reflejar los datos como una nueva clase de activos en los balances. Cuentas abrazan análisis de datos grandes para detectar el fraude. gurús de marketing están utilizando nuevos datos digitales para entender a los clientes de una manera sin precedentes, negocio transformadora. Y estrategas buscan formas de aprovechar las ventajas competitivas con capacidad de datos, como los negocios es cada vez menos acerca de las transacciones y más acerca de compromiso, menos sobre la fabricación y venta de cosas y más sobre el diseño de experiencias.

Michael Porter describe la función de cambio de paradigma de los datos para las empresas muy sucintamente: "Los datos ahora se encuentra a la altura de las personas, la tecnología y el capital como un activo núcleo de la corporación y en muchas empresas es tal vez convertirse en el activo decisivo." Productos habilitados, cada vez con sensores, se convierten en un medio para la entrega continua de valor a los consumidores más que un fin en sí mismo. Considere la posibilidad de una raqueta de tenis realizado por Babolat, un fabricante de 140 años de raquetas de tenis y equipo relacionado. Su "Juega Sistema Pure Drive" pone sensores y conectividad en el mango de la raqueta, y ahora la compañía ofrece un servicio para ayudar a los jugadores a mejorar su juego a través del seguimiento y análisis de la velocidad de la pelota, girar y localización del impacto, entregado a través de una aplicación para teléfonos inteligentes. Tradicionalmente las empresas no tecnológicas, como el gigante financiero Capital One, incluso han ido tan lejos como la redefinición de su identidad misma como una compañía de tecnología digital y su producto principal, no como los préstamos de tarjetas de crédito, sino como datos y el software. Jeff Immelt, CEO de General Electric, dijo recientemente "si se fue a la cama anoche como una empresa industrial, vas a despertar esta mañana como una compañía de software y análisis. '"

A nivel de empresa, los datos digitales-impulsado la innovación puede aumentar los niveles de productividad, rentabilidad y competitividad. 63% de quienes respondieron a una encuesta realizada por IBM y la Universidad de Oxford informó que el uso de la tecnología de la información, incluidos los grandes volúmenes de datos y análisis, es la creación de una ventaja competitiva para sus organizaciones. La misma encuesta mostró que el análisis de grandes volúmenes de datos fue un 15% más eficaz que el análisis de negocio tradicionales. Las empresas que averiguar cómo aprovechar principios de grandes volúmenes de datos para incrementar el valor para los clientes es probable que ganar cuota de mercado a sus rivales menos datos competente. Un estudio del MIT encontró que las empresas que adoptan la toma de decisiones basada en datos tienen producción y la productividad que es de 5% a 6% superior a lo que cabría esperar dadas sus otras inversiones y uso de tecnologías de la información.

En otra señal de su creciente importancia, los datos se ha convertido en una disciplina por derecho propio. programas Top MBA de Stanford, como son la introducción de cursos tales como Business Intelligence de grandes volúmenes de datos, toma de decisiones y Competencia Digital en la plataforma de Mercados para preparar a los graduados para competir en una nueva economía digital basada en datos. En la economía digital, las empresas necesitan que toman las decisiones con habilidades múltiples capas: experiencia en el tema, el dominio de datos, diseño y capacidad de gestionar la entrega digital. Sin los datos, las decisiones son conjeturas. El dominio de los datos es fundamentalmente una capacidad para desentrañar las señales de zetabytes de nuevos datos, para entender completamente la historia detrás de los números y de tomar decisiones basadas en datos. La firma de investigación Gartner predice que para el año próximo hasta el 25% de las grandes empresas tendrán unidades de datos dedicadas para obtener el máximo rendimiento de los recursos de datos digitales. científicos de datos, que pueden utilizar algoritmos complejos y programas de ordenador para encontrar correlaciones y tendencias de los datos, están en alta demanda; McKinsey encontró una escasez de entre 140.000 y 190.000 en los EE.UU. por sí solo. También escasean son los gerentes que tienen una plena comprensión del contexto empresarial y que pueda interpretar los datos en bruto y transformarla en información procesable. La actual escasez de este tipo de gestores y analistas en los empleos tradicionales se estima en 1,5 millones.


Lo que los gobiernos tienen que hacer

El valor de cualquier recurso depende en gran medida del ecosistema política, jurídica y económica a su alrededor. Esto se aplica a los datos digitales. Es necesario que haya un sistema cuidadosamente diseñado de las políticas para asegurar que los recursos de datos de un país se utilizan de forma productiva, con un mínimo de desperdicio o uso indebido, y que se pongan a disposición de las empresas y los empresarios en un entorno justo y competitivo. Un desafío clave es implementar cuidadosamente las políticas que permiten la innovación y el crecimiento, así como para evitar las prácticas que son perjudiciales para las personas (especialmente los miembros más vulnerables de la sociedad).

Algunos países emergentes como Mauricio, por ejemplo, ya han comenzado a explorar formas de incorporar grandes volúmenes de datos en sus estrategias de innovación para que las empresas a crecer y crear puestos de trabajo. grandes volúmenes de datos representa una gran oportunidad para los países de bajos y medianos ingresos, que pueden permitir la transición de sistemas informáticos y de comunicaciones legado caros y construir nuevas redes digitales y las empresas a un costo significativamente menor. Sin embargo, sus esfuerzos tendrán que hacer frente los retos adicionales de la naturaleza humana y la capacidad económica en comparación con los países de altos ingresos.

El Informe de Desarrollo Mundial 2016: Los dividendos digitales insta a los países a trabajar en lo que se refiere como los "complementos analógicas" por "los reglamentos de refuerzo que aseguren la competencia entre las empresas, mediante la adaptación de las habilidades de los trabajadores a las exigencias de la nueva economía, y garantizando que instituciones son responsables ", por lo que están en condiciones de beneficiarse de la revolución digital. En vista de lo nuevo de la gran industria de datos es, mejores políticas y prácticas todavía son objeto de debate por los expertos en países que están liderando el camino. Las siguientes sugerencias para iniciativas y políticas que los gobiernos pueden querer considerar se basan en las experiencias y proponen enfoques de los países más adelante en la curva de adopción digital y de la investigación llevada a cabo como parte del trabajo en la herramienta OD4B:


  • Compromiso: Los gobiernos puede resultar beneficioso para dialogar nacional con las empresas y los ciudadanos con un enfoque en los aspectos productivos y los beneficios de la innovación con capacidad de datos (y por consecuencia el crecimiento económico), por ejemplo, prevención y mitigación de las amenazas para la salud pública, mejorar la prestación de servicios públicos - los sistemas de educación, la seguridad, así como la reducción del fraude y el abuso - en lugar de en la ansiedad provocando posibles ramificaciones personales a los consumidores. Para permitir el desarrollo de modelos de negocio basados ​​en datos innovadores y sostenibles, los gobiernos deben participar asociaciones de la industria, en colaboración con los consumidores, para desarrollar prácticas éticas y responsables de uso de datos. La idea de tutela puede ser utilizado como un principio rector para la prevención de la llamada "databuse". En esencia tutela se refiere a la obligación por parte de las empresas para manejar datos de los consumidores con honestidad, con seguridad, de una manera sencilla, de manera que no perjudique a los consumidores y les da información razonable, el control, y posiblemente "copropiedad" de la los datos que proporcionan. También hay modelos interesantes para las asociaciones público-privadas entre el gobierno y el sector privado, por ejemplo, la Sociedad de Datos de Big por Enterprise Ireland.
  • Acceso a datos y Calidad: El valor de los datos aumenta rápidamente cuando los datos se comparten, sin embargo, los costes del uso compartido son marginales. Por lo tanto las políticas deben favorecer el movimiento de datos entre las organizaciones y funciones. libre y fácil acceso a ciertos tipos de datos recogidos por el gobierno es de gran valor para las empresas de todo el mundo. datos de un gobierno abierto son datos públicos, no personales, digitales que se autoriza explícitamente por el gobierno de forma gratuita (o de bajo costo) para utilizarlos en cualquier fin, incluso comercial, y hechos fácilmente disponibles en un formato legible por máquina. Es una de las principales fuentes de datos grandes. Haciendo que esté disponible, los gobiernos pueden mejorar significativamente el rendimiento de las empresas. Un estudio reciente realizado por el portal de datos europea confirmó que los datos abierta fomenta la transformación digital de las organizaciones, especialmente en las áreas de gestión del rendimiento, nuevos puntos de negocios y de contacto con el cliente digitales. Basándose en sus investigaciones, así como en la propia experiencia del Banco Mundial para ayudar a más de 25 países a abrir sus datos del gobierno, para catalizar los gobiernos de crecimiento económico debe publicar los datos digitales en formatos legibles por máquina, después de "abiertos en principio por defecto", y bajo una "licencia abierta". La búsqueda activa de compromiso con los usuarios de los datos abiertos es de suma importancia para dar prioridad a aquellos conjuntos de datos que tienen un alto valor reutilización. Se aconseja a los gobiernos a priorizar en base a la demanda local y la evidencia del valor de otros países. De lo contrario, se arriesgan a que los portales de datos abiertos de inactividad y la pérdida de oportunidades para la obtención de beneficios económicos para las empresas y los ciudadanos.
    Desafortunadamente, la calidad de los datos abiertos crea a menudo un desafío. Cuando inspeccionamos las empresas basadas en datos en los países de bajos y medianos ingresos, su principal problema era la calidad de datos. Esto se traduce en altos costos económicos para las empresas para limpiar los datos para que sea utilizable. Los gobiernos deben promover las normas y procedimientos comunes, incluyendo el mejor uso de los metadatos, para mejorar la calidad de datos. Algunas industrias como el transporte o la construcción han estado desarrollando estándares de datos específicos del sector, y los gobiernos pueden ayudar a promover estos esfuerzos.
  • Alfabetización de datos: La alfabetización digital se ha convertido en una nueva habilidad fundamental en la nueva economía, una habilidad los niños deben aprender a partir de una edad temprana. Los legisladores y los reguladores deben tener fluidez en beneficios y riesgos de grandes volúmenes de datos, de modo que puedan tomar decisiones prudentes y bien informadas y obtener las reglas de derecho. Las empresas se beneficiarán de la educación en las oportunidades, los riesgos y el uso ético de los datos digitales. Y por último pero no menos importante, los consumidores deben tener un nivel razonable de alfabetización de datos, similar a una comprensión de calificación de crédito personal o el uso de la banca en línea. Tendrán que entender lo que se está recogiendo tipo de datos y cómo y por qué está siendo analizada y utilizada. Ahora bien, estas prácticas siguen siendo opaca y mal entendido, incluso por los médicos. Poner en práctica políticas conocidas, clara y sin complicaciones se está convirtiendo en la mejor práctica.
  • Política: Para fomentar la innovación y el crecimiento impulsado por los datos, mientras que al mismo tiempo protejan contra las prácticas que son perjudiciales para las personas, las políticas deberán hacer frente a la propiedad de los datos, la seguridad, la custodia, la responsabilidad por el mal uso, datos abiertos, la alfabetización de datos, investigación y desarrollo, la adquisición , así como los flujos de datos a través de fronteras (análogas a las políticas que guían el flujo de mercancías). El desarrollo de un plan estratégico nacional puede ayudar a alinear las políticas públicas, los recursos y las prioridades para el avance de los datos digitales como un bien común para el bienestar nacional. Un buen ejemplo de esto es la estrategia para la capacidad de Datos del Reino Unido que se introdujo en 2013.
  • Infraestructura: Para aprovechar todos los beneficios de una economía basada en datos, de banda ancha asequible es una necesidad. He conocido a los empresarios en África con habilidades e ideas para construir productos basados ​​en datos que no son factibles dadas las velocidades de Internet actuales y los precios en sus países. Además de banda ancha, almacenamiento en la nube y las instalaciones de computación de alto poder será una parte importante de la infraestructura de la economía digital, aunque éstos pueden ser secundarias como las empresas en las economías de mercados emergentes pueden comprar estos servicios virtuales de proveedores internacionales.

Open Data for Business (OD4B)


Esta semana, el Banco Mundial, con el apoyo del Centro para Open Enterprise Data, dado a conocer los datos de Open for Business (OD4B) Herramienta de Evaluación y de compromiso. ¿Cómo puede esta herramienta ayudará a nuestros clientes? El objetivo de la herramienta es ayudar a los gobiernos catalizan la utilización de datos de gobierno abierto por el sector privado. El año pasado vimos un número creciente de estudios que relacionan los datos de gobierno abierto a los beneficios económicos en términos de alto rendimiento de la inversión y la contribución al crecimiento del PIB. Sin embargo, también hemos visto que el acto de apertura de los datos por sí sola no necesariamente se traduce en el uso del sector privado, la innovación y el impacto económico deseado. Varios países construida portales de datos abiertos, abrió cientos de conjuntos de datos, e implementó la política de datos abiertos, lo que resultó en un uso mínimo de los datos publicados. Nos encontramos con que las raíces de la baja utilización varían de país a país, con temas comunes son la escasa conciencia entre los usuarios potenciales, falta de correspondencia entre los tipos y niveles de los datos ofrecidos abiertas con las necesidades del usuario, calidad de datos y la puntualidad, la percepción de fiabilidad y la sostenibilidad, la mala visibilidad y los metadatos, la falta de habilidades. En un reciente artículo titulado "fuera de la caja", The Economist también se refirió a algunas de estas cuestiones exigen secundarios como causa fundamental del lento progreso de la revolución de datos abierta. Estos problemas es probable que persistan en el futuro cercano.

La herramienta OD4B puede ayudar a los gobiernos a identificar y abordar estos y otros impedimentos, específicos para el uso del sector privado en su contexto local, y les ayudará con la creación de una ruta de acceso sostenible al uso cada vez mayor del sector privado de los datos abiertos. La herramienta consta de una sesión de información en los datos abierto para los negocios, un cuestionario para las empresas, una guía de ajuste de la mesa redonda, así como una hoja de puntuación para anotar algunas de las respuestas al cuestionario. El cuestionario consta de tres secciones - de información de negocios en general, el uso de los datos del gobierno, y los canales de participación. Las preguntas se centran en cómo las empresas utilizan los datos del gobierno, su importancia para sus modelos de negocio, ¿cuáles son los obstáculos y cómo interactúan con el gobierno para obtener los datos que necesitan y compartir comentarios.

El OD4B fue diseñado con los países de bajos y medianos ingresos en mente, basado en la experiencia de los países que se encuentran más adelante en el proceso de apertura de sus datos. Damos la bienvenida a los intereses de los países que deseen poner a prueba la herramienta.

martes, 20 de enero de 2015

¿Fin de la utopía para el estado del bienestar de Escandinavia?



Lo sentimos, izquierdistas, los países escandinavos no son utopías
Por Kyle Smith - New York Post

Quiere una prueba de que la sociedad socialdemócrata liberal funciona?
Mira a Dinamarca, el país que lidera el mundo de forma rutinaria en las encuestas de felicidad. Es también destaca por tener los impuestos más altos en la Tierra, además de una red de seguridad social cómoda: cuidado de niños es sobre todo libre, como es la escuela pública e incluso una escuela privada, y usted puede permanecer en prestaciones por desempleo por un largo tiempo. Todo el mundo está en igualdad de condiciones, tanto de renta prudente y socialmente: ir a una fiesta y no se sorprenderá al ver una estrella de televisión hablando con un techador.
La combinación de impuestos masivas y beneficios para el éxito significa principio y al final conseguir afeitado apagado: Casi todo el mundo está orgulloso de la clase media. Daneses pertenecen a más asociaciones cívicas y clubes que cualquier otra persona; les encanta actuar en grupos grandes. En Navidad que hacen cosas locas como tomarse de las manos y correr por la casa juntos, cantar canciones festivas. Son un Whoville de la vida real.
En la brújula liberal estadounidense, la aguja siempre apunta a lugares como Dinamarca. Todo lo que más esperan fervientemente por aquí ya ha ocurrido allí.
Así que: ¿Por qué nadie parecía especialmente interesado en visitar Dinamarca? ("Mi amor, en nuestro viaje por Europa, quiero ver la Toscana, París, Berlín y... Jutlandia!") Los visitantes dicen daneses son sin alegría estar alrededor. Dinamarca sufre de altos índices de alcoholismo. En su uso de antidepresivos que ocupa el cuarto lugar en el mundo. (Su compañero nórdicos los islandeses están en frente por un amplio margen.) Un 5 por ciento de los hombres daneses han tenido relaciones sexuales con un animal. La productividad de Dinamarca está en declive, sus trabajadores pusieron en sólo 28 horas a la semana, y todo el mundo te encuentras parece tener un trabajo en el gobierno. Ah, y como The Telegraph dijo, es "la capital del cáncer del mundo."
Entonces, ¿cómo pueden estas feliz, burócratas, borrachos, deprimido, perezoso tumorales plagada de cerdo-bonking realmente?

La Ley de Jante



Foto: Shutterstock

Veamos un poco más cerca, sugiere Michael Booth, un británico que ha vivido en Dinamarca desde hace muchos años, en su nuevo libro, "El Pueblo Casi casi perfecto: Detrás del Mito de la escandinava Utopía" (Picador).
"El Pueblo Casi casi perfecto: Detrás del
Mito de la Utopía de Escandinava",
de Michael Booth (Picador)

Esas encuestas felicidad por las nubes, resulta que son en su mayoría litera. Pedir a la gente "¿Estás feliz?" Significa diferentes cosas en diferentes culturas. En Japón, por ejemplo, contestar "Sí" parece como jactancia, Booth señala. Mientras que en Dinamarca, ha considerado "vergonzoso ser infeliz", editor de un periódico Anne Knudsen dice en el libro.
Por otra parte, hay un grupo de personas que cree que los daneses están mintiendo cuando dicen que son las personas más felices del planeta. Este grupo es conocido como "daneses".
"Con los años me he preguntado muchas daneses sobre estas encuestas felicidad - si realmente creen que ellos son los campeones mundiales felicidad - y me he encontrado con uno solo de ellos que cree en serio que es verdad", escribe Booth. "Tienden a abordar el tema de su felicidad tan cacareado como las víctimas de una broma pesada a la espera de descubrir que el autor es".
Daneses son muy conscientes de su reputación en todo el mundo por ser los más felices pequeños Legos en la caja. Responder a "No" sería tan impensable como tocar la bocina en el tráfico en Copenhague. Cuando el autor intentó esto (una vez), que fue regañado por su desconcertado pasajero danés: "¿Qué pasa si te conocen?" Se preguntó Booth.
Eso fue una gran pista: En una fiesta, el autor bromeó, por lo general toma alrededor de ocho minutos para que la gente descubra algún conocido en común. Dinamarca es un país de 5,3 millones de personas homogéneos. Todo el mundo habla la misma, todo el mundo tiene el mismo aspecto, todo el mundo piensa lo mismo.
Esta es considerada universalmente una característica - una fuente gloriosa de orgullo nacional en la tierra de humblebrag. Se harán Cualquier rebeldes conformes; amapolas altas serán talados al promedio.
Los líderes empresariales del país se sospechan automáticamente debido a la obsesión nacional con la medianía: Envío magnate Maersk McKinney Moller, el hombre más rico del país antes de su muerte en 2012, evitó la vergüenza nacional de ser un multimillonario por ser plebe casi absurdamente. Subió las escaleras a su oficina todos los días, asistió a reuniones hasta bien entrados los años 90 y marrón embolsado su almuerzo.
Una mujer estadounidense dijo stand cómo, cuándo ella exaltada mencionó en una cena que su chico era el primero de su clase en la escuela, ella fue recibida con un silencio glacial.
Una de las peculiaridades más conocidas de la mayoría de los países es hacer a mano de un escritor satírico de lo que todavía se conoce como la Ley de Jante - los Diez Mandamientos de Buzzkill. "No crees que eres alguien," va uno. "No crees que eres tan bueno como estamos", es otra. Otros incluyen "No creo que usted va a llegar a nada", "No cree que usted es más importante de lo que somos" y "No se reirá de nosotros".
Richard Wilkinson, autor y profesor que publicó un libro defendiendo la superioridad de las culturas igualitarias, dijo Booth, "Las sociedades de cazadores-recolectores - que son similares a las sociedades prehistóricas - son altamente igualitaria. Y si alguien empieza a asumir una posición más dominante, consiguen ridiculizados o molestan o condenados al ostracismo. Estos son lo que se llama las estrategias contra la dominación, y mantienen la mayor igualdad ".
Así daneses operan en los principios de las cavernas - si usted encuentra, compartirla, o ser rechazados. Una vez que su fecha con la margarita de la oveja es más, es mejor asegurarse de que sus amigos se una vez. (La bestialidad ha sido tradicionalmente legal en Dinamarca, aunque un movimiento para prohibir que está en marcha. Hasta hace poco, varios "burdeles bestialidad" anuncian sus servicios en los periódicos, los clientes por lo general cobra $ 85 a $ 170 por lo que sólo puede llamarse un rollo en el heno .)

Necesitan una copa


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La otra cara de la famosa "cohesión social" es que los forasteros no son bienvenidos. Los comentarios xenófobos son comunes. En las reuniones, el espíritu de "hygge" - traducido libremente como acogedor - prevalece. Es considerado grosero tratar de desviar la conversación hacia un tema sobre el que cualquiera podría concebiblemente estar en desacuerdo. Esto es por qué incluso los daneses describen daneses como aburridos.
Además de pagar enormes impuestos - la factura total es del 58 por ciento a 72 por ciento de los ingresos - daneses tienen que pagar más por casi todo. Los libros son un artículo de lujo. Su equivalente del George Washington Bridge cuesta $ 45 para cruzar. La atención médica es gratuita - lo que significa que usted paga con tiempo en lugar de dinero. Los servicios se distribuyen sólo después de interminables estancias en las salas de espera. (El autor llevó a su hijo a una queja ER de una sustancia extraña que le había cegado temporalmente en un ojo y lo mandaron de vuelta, diciendo que tenía que hacer una cita.) Las farmacias son un monopolio estatal, lo que significa que conseguir una aspirina es como un viaje a la DMV.
Otros países escandinavos (Stand define el término amplio, que incluya hermanos nórdicos de Islandia y Finlandia, además de Dinamarca, Suecia y Noruega) plantean otras preguntas sobre cómo es perfecto el pueblo casi perfectos realmente son. El famoso boom económico de Islandia resultó ser uno de los más notorios burbujas inmobiliarias de la historia. Un dicho común en Dinamarca sobre los islandeses: Ellos usan zapatos que son demasiado grandes para ellos, y se la pasan tropezando con los cordones de sus zapatos.
El éxito de los noruegos - los nuevos ricos de Europa - no puede ser imitado. Anteriormente una nación campesina, el país cuenta ahora con más riqueza de la que puede disfrutar: depósitos colosales petrolíferas engendraron un fondo de riqueza soberana que paga por todo.
Finlandia, que encabeza las listas en muchas encuestas (que son las personas menos corruptas de la Tierra, su renta per cápita es la más alta de Europa occidental y Helsinki menudo encabeza las encuestas de las mejores ciudades), es también un líder en categorías como el alcoholismo, de asesinatos (tasa más alta de Europa occidental), suicidios y de uso de antidepresivos.
Su realizador líder, Aki Kaurismaki, hace las funciones de modo "sin descanso taciturno que hicieron [Ingmar] Bergman parece a Mr. Bean", informa Booth.
Etiqueta finlandesa exige poco en el camino de la conversación (los hombres, sobre todo, hablan como si de ser acusado por la sílaba), pero mucho en la forma de abuso de alcohol. Se considera la falta de forma para dejar el partido cuando hay algo que queda en la botella. Aunque su consumo total de alcohol es cerca de la media europea, que va de borrachera-beben más que casi cualquier otro país del continente. Enfermedad relacionada Booze es la causa principal de muerte en los hombres finlandeses, y en segundo lugar para las mujeres.
La tasa de suicidio es 50 por ciento mayor que en los EE.UU. y más del doble de la tasa del Reino Unido. Invitados a la fiesta, incluso en reuniones de alto nivel, informan que, en torno a las 11:30 de la noche, las cosas a menudo toman un giro Fighty.
Resulta que el "Gen de Guerrero" - en realidad la enzima monoamino oxidasa A, que está vinculada a la conducta impulsiva, la violencia y el alcoholismo - es especialmente frecuente en Finlandia. "Dark" no se limita a describir el invierno en los suburbios del Ártico, se aplica al carácter finlandés.

Gran plato de avena


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Macho no es un problema en Suecia. Bautizado como el país menos masculina en la Tierra, por el antropólogo Geert Hofstede, que es el lugar donde los soldados varones se emiten redecillas para el cabello en lugar de estar hechas a cortarse el pelo.
Pero la cohesión escandinavo puede no funcionar en conjunto con la inmigración masiva: Casi un tercio de la población sueca nació en otro lugar. La inmigración está asociada en la mente de Suecia con el bienestar (proyectos de viviendas llenas de gente en el paro) y con altos índices de criminalidad (estos recién llegados son más de cuatro veces más propensos a cometer un asesinato). Bandas islamistas controlan algunos de los proyectos de vivienda. La fricción entre "suecos étnicos" y los inmigrantes está creciendo.
Los estados de bienestar funcionan mejor entre un pueblo homogéneo, y el tipo de la diversidad y la desconfianza que tenemos entre los grupos en los Estados Unidos significa que nunca podríamos llegar a un amplio consenso sobre los niveles de gasto social nórdicos.
De todos modos, Suecia pensó mejor economía liberal demasiado: Cuando su estado de bienestar se hizo insostenible (algo daneses inteligentes están empezando a decir), que fue en una juerga de privatización y cortar el gasto público desde el 67 por ciento del PIB a menos de la mitad. A raíz de la crisis financiera mundial, eligió la austeridad, la eliminación de su déficit presupuestario (que actualmente funciona en un ligero superávit).
En cuanto a su personalidad nacional supuestamente de carácter dulce, en una encuesta en la que se pidió a los suecos para describirse a sí mismos, los adjetivos que llevaron el paquete eran "envidioso, tieso, trabajador, amante de la naturaleza, tranquilo, honesto, deshonesto y xenófoba". En último lugar fueron estas palabras: "masculino", "sexy" y "artístico".
Escandinavia, como un bromista en The Economist dijo una vez, es un gran lugar para nacer - pero sólo si usted es promedio. La sátira muertos en las costumbres escandinavos "Juntos" es una película de 2000 por el sueco Lukas Moodysson encuentra en una comuna multifamiliar en 1975, cuando el maravilloso ideales Socialdemócrata era absolutamente incuestionable en Suecia.
En la firma escena de la película, un hombre sensible delantal resistente dice a su sobrina y sobrino mientras se preparaba el desayuno, "Se podría decir que somos como gachas. Primero somos como pequeños copos de avena - pequeños, secos, frágiles, solo. Pero luego nos cocinamos con los otros copos de avena y se vuelven blandos. Nos unimos para que una escama no se puede decir aparte de otro. Estamos casi disuelto. Juntos nos convertimos en una gran papilla que es cálido, sabroso y nutritivo y sí, muy hermosa, también. Así que ya no somos pequeños y aislados, pero hemos llegado a ser cálido, suave y unidos entre sí. Una parte de algo más grande que nosotros mismos. A veces la vida se siente como una enorme gachas, ¿no te parece? "
Luego cucharas un gran pegote pegajoso de almidón sin sabor en los platos de los niños pobres. Eso es Escandinavia para usted, amigos: Bland, sana, mush-individuo borrar. Pero, bueno, al menos estamos todos unidos en ser digeridos lentamente por el sistema.

lunes, 1 de diciembre de 2014

Un análisis del cambio estructural en el Mundo

Un economista explica qué diablos está pasando con la economía global


Es el fin del mundo tal como lo conocíamos. (AP Photo / Andy Wong)

 
Por Manuel Hinds - El ex ministro de Hacienda de El Salvador
Quartz

Los albores del siglo XXI ha resultado inquietante. No era lo que esperábamos. Hace sólo unos años, el mundo estaba lleno de optimismo aparentemente justificada. El nuevo siglo estaría libre de las luchas ideológicas que plagaron el XX. Hubo consenso en que los mercados y la democracia fueron la base para sociedades saludables; la perspectiva de una guerra entre las superpotencias se desvaneció en el pasado; una "nueva economía" que nace de la combinación de las computadoras y las telecomunicaciones estaba emergiendo y la globalización estaba uniendo al mundo en una aldea global feliz. Países de todo el mundo liberalizaron sus economías y se unieron a las filas de la democracia.
A medida que el nuevo siglo se instaló en, sin embargo, hechos preocupantes son desinflandose todas estas expectativas optimistas. Todos y cada uno de los motivos para el optimismo no ha cumplido lo que prometió y muchos problemas que pensábamos que habíamos dejado bien atrás hemos regresado para perseguirnos. Giros negativos en la distribución del ingreso y la riqueza, las crisis financieras, el terrorismo, los estados terroristas fundamentalistas que tratan de saltar de Oriente Medio y África, una visible alejamiento de la democracia en muchos países que acababan de llegar a ser capitalista o democrática, Rusia expandir su territorio al igual que las potencias agresivas de antaño ... Todas estas cosas apuntan hacia una sola impresión: la vida se ha convertido de repente caótico como el orden político que existía en el siglo XX se derrumbó alrededor de nosotros, dejando al mundo en el capricho de grupos islámicos fanáticos y estados canallas , las grandes potencias autoritarias y pequeños tiranos de América Latina. Parece que un pasado lejano va a volver.
Lo que está sucediendo? ¿Qué tenemos en común con el cambio de siglo pasado para traer de vuelta a una serie de problemas que pensamos que se había convertido en parte del pasado?

Las interrupciones

Lo que tenemos en común con la gente de hace cien años es que nosotros, como lo hicieron, vamos bajo el dominio de una revolución tecnológica que cambiará nuestras vidas tan profundamente como la Revolución Industrial cambió el suyo.
Avances tecnológicos profundos, al abrir el camino para un futuro mejor en el largo plazo, son terriblemente perjudicial en el corto plazo. Ellos hacen obsoleto el capital acumulado en activos físicos, en el conocimiento y las habilidades humanas, y, lo que es más importante, en la forma de las instituciones que articulan juntos el tejido de la sociedad. Las personas que pensaban que tenían su futuro asegurado repente encuentran que sus habilidades se han vuelto obsoletos por las nuevas tecnologías o los nuevos estilos de vida derivados de ellos. Las actividades que habían sido durante décadas el pilar de una economía de repente de ser rentable, ya sea porque su producto desaparecieron o porque, para ser rentables, tienen que ser reubicados en otra parte del mundo.
Esto trae consigo todo tipo de perturbaciones económicas y sociales, incluido el desempleo, giros negativos en la distribución del ingreso, las quiebras, las frecuentes crisis financieras, y la depresión. La vida se vuelve inestable, el futuro insoportablemente incierto.
Esto es lo que ocurría hace cien años bajo la influencia de la última etapa de la Revolución Industrial, el que ha establecido la electricidad, el teléfono, el motor de combustión interna, el coche y el avión.
Esto es lo que está empezando a ocurrir en nuestra época, así bajo la influencia de la nueva revolución que fue puesto en marcha por la conectividad, el poder de administrar las tareas complejas de lejos en tiempo real, una habilidad que la combinación de las computadoras, las telecomunicaciones, y medio rápido de transporte ha hecho posible. Por mucho que la Revolución Industrial multiplica el poder del músculo, la nueva revolución está multiplicando el poder de la mente. Promete mejorar dramáticamente la forma en que vivimos.
En el corto plazo, sin embargo, la transición a este nuevo mundo conectado implica la interrupción, incluso la destrucción, de lo que tenemos hoy en términos de habilidades, las inversiones, los modos de vida y las instituciones básicas de nuestro orden social.

La distribución del ingreso

Las revoluciones tecnológicas provocan giros negativos en la distribución del ingreso, ya que los flujos de ingresos hacia los que toman ventaja temprana de las nuevas tecnologías. Este efecto es más pronunciado en el caso de la revolución actual. Al estar basado en la multiplicación del poder de la mente, es la educación privilegios. Como resultado, la prima de la educación en los ingresos se ha vuelto muy importante en los mercados de trabajo. La encuesta de población de 2008 por la Oficina del Censo de Estados Unidos mostró que el salario medio de una persona con un título universitario era 72% más alta que la de alguien con sólo un diploma de secundaria. Esta brecha fue de 43% en la década de 1970. La de alguien con un título profesional fue 213% mayor. Esta fue del 72% en la década de 1970. Estos son promedios. En los enormes mercados de nuestro tiempo, las oportunidades de hacer ingentes cantidades de dinero fuera de la conectividad están ahí para que la gente que sabe cómo usarlos.
En un reciente artículo, señalé que Facebook compró Instagram por la friolera de $ 1 mil millones. La empresa, creada en 2010, pasó a tener 13 empleados en el momento de su venta. Eso viene a alrededor de $ 76.000.000 por trabajador. Luego, en febrero, Facebook compró Whatsapp para $ 345 millones por trabajador. La empresa compradora, Facebook, creado en 2004, tiene un valor de mercado de 22 millones de dólares por empleado. Apple tiene 14 millones dólares por trabajador, Google $ 10 millones. Esto puede ser comparado con Chiquita, la compañía bananera, fundada en 1870, por valor de $ 50.000 por empleado. En el mismo artículo observé cómo las empresas basadas en el conocimiento tienen los mercados de valores mucho más altos que el precio de sus activos físicos.
Finalmente, se puede esperar que la educación mejoraría en respuesta a la prima pagada por él en la nueva economía, mejorando la distribución del ingreso y la riqueza. Sin embargo, esta mejora tomaría mucho tiempo. Mientras tanto, los políticos han estado trabajando duro en busca de medidas que podrían hacer sentir mejor a las personas quedarse atrás.

Las crisis financieras

En Fault Lines: Cómo fracturas ocultas siguen amenazando la economía mundial, Raghuram G. Rajan, ahora el Gobernador del Banco de la Reserva de la India, los vínculos de la explosión de la inestabilidad financiera con el creciente deterioro de la distribución del ingreso 2008.
En la década de 1990 los políticos respondieron al problema de ingresos y distribución de la riqueza "con un intento de una panacea:. Facilitando el flujo de crédito fácil para los que se quedan por el crecimiento y el progreso tecnológico" Es decir, si los que quedan retrasados no pudieron aumentar su riqueza a través de mayores ingresos, que podrían hacerse sentir que estaban aumentando a través de endeudamiento.
Para facilitar esta operación, los políticos se relajaron las normas que mantienen la estabilidad del sistema financiero. Desde la década de 1990, el crédito fluía hacia los que se quedan (las subprime y los ninjas: sin ingresos, sin empleo y sin activos) especialmente para la adquisición de vivienda.
El crédito no puede sustituir al crecimiento de los ingresos. La gente no podía pagar los préstamos. La crisis de 2008 fue el resultado de estos flujos de crédito.

La enfermedad japonesa

Japón no ha crecido notablemente desde su propia crisis financiera de hace dos décadas y media. No crece incluso si su gobierno y el banco central han creado fondos para financiar los déficits fiscales en cantidades navegables. Esto está sucediendo porque el remedio natural que el mercado se aplica a la insolvencia de la quiebra de las actividades no rentables que no pueden crecer, ha sido desactivada por la intervención del gobierno. La inmensa liquidez creada por el banco central mantiene las actividades ineficientes a flote incluso si son insolventes. El nuevo mundo no puede reemplazar el anterior, y la economía no puede crecer.
La enfermedad japonesa se extendió al resto del mundo en la primera década del milenio. Los bancos centrales de todo el mundo están inundando sus economías en una inmensa liquidez que mantienen a los gobiernos y empresas financieramente muertos vivos mientras las economías se estancan. El increíblemente grande creación monetaria va a volver a perseguirnos con más inestabilidad en el mediano plazo.

El fundamentalismo y el terrorismo

El fundamentalismo, la forma extrema de la resistencia al cambio, es el impulso para forzar el retorno de la sociedad a las costumbres y estructuras sociales de un pasado idealizado, cuando las cosas no cambian y la gente podría planificar sus vidas dentro de una estructura predecible.
Emerge en todos los procesos de transformaciones radicales. Se hace fuerte, sin embargo, sólo en las últimas etapas de la disolución de una sociedad, cuando la gente piensa que están virando hacia el caos. La gente trata de escapar de la presente yendo al pasado, pensando que nada se podía hacer con la sociedad existente, salvo la destrucción de las fuerzas que se están disolviendo -lo cual, en los viejos tiempos eran el capitalismo y la democracia, y en la actualidad son los usos y costumbres occidentales ampliado a Oriente Medio a través de todos los canales de conectividad.
No es por casualidad que los países de la región prohíben todas las formas de comunicación con Occidente, incluyendo películas, televisión y radio, y que quieren restablecer una forma de Estado que desapareció hace mucho tiempo, el califato, que tenía por objeto el control de la mundo entero y le impuso la autoridad religiosa en todos los aspectos de la vida. Para los fundamentalistas, el enemigo es el cambio.

La desilusión con el capitalismo democrático

Como los problemas de aumento de ajuste, la desilusión con el capitalismo democrático se está extendiendo por todo el mundo. Los problemas que se han atribuido a la agitación de los cambios se atribuyen a "el sistema".
Muchos de los antiguos países comunistas (incluyendo China y Rusia), que fueron ampliamente espera se conviertan democrática cuando se liberalizaron sus economías, están aclamando sus sistemas no democráticos como más eficaz que la democracia, y muchas personas están escuchando. Muchos países de América Latina que parecían haberse vuelto democrática han vuelto a caer en sus viejos regímenes populistas.
Pide un mayor control del Estado sobre la economía para evitar cambios que tengan lugar se han vuelto más comunes en todo el mundo: detener la globalización, detener las exportaciones de trabajo, deja de quiebras, detener la competencia del exterior, detener todo lo que pondría en peligro nuestra posición de confort. Para detener todo esto y otras cosas, los gobiernos tienen que ser más autoritario y la democracia deben entonces sufrir.

El gran poder invasivo

Anexión rusa de partes de Georgia y Ucrania trajo otro monstruo que pensábamos había desaparecido entre los años 1930 y la década de 1940-el territorialmente adquisitiva autoritario Gran Poder. Hasta bien entrado el siglo XX, la Rusia de Putin se comportó de la misma manera depredadora como la Alemania de Hitler había hecho con Checoslovaquia, Austria y Polonia a finales de 1930. Junto con estos ataques territoriales, la posibilidad de nuevas guerras entre grandes potencias regresó también.
Rusia ha sido agresiva contra Georgia, Ucrania y los países bálticos para las edades. Su agresividad, sin embargo, se ha convertido en agresiones reales en función de la fuerza de sus enemigos potenciales. El colapso del orden mundial que prevaleció desde la caída de la Unión Soviética como resultado de los problemas económicos del mundo y el aumento del fundamentalismo, que a su vez deben mucho a las interrupciones de la revolución tecnológica, se ha abierto una ventana para el oportunismo ruso . Otros pueden seguir.

¿Qué se debe hacer?

Hay una curiosa contradicción entre la actitud altamente positiva de la gente hacia la revolución de la conectividad y su disposición muy negativa hacia sus consecuencias a corto plazo. Si bien la adopción de las nuevas tecnologías con gran entusiasmo, muchos de ellos organizan una fuerte oposición a los cambios que están introduciendo. La política del mundo actual se están moviendo gradualmente hacia la resistencia al cambio como el principal medio para hacer frente a los problemas causados por la transformación. La gente quiere un gobierno fuerte para detener el cambio.
Tratando de mantener la forma actual de la sociedad sin cambios, sin embargo, es la mejor manera de caer en el estancamiento, la destructividad, o ambos. Los países que tenían una mayor intervención del Estado en la economía como Rusia y Alemania hace cien años, fueron los que rompieron bajo las presiones de cambio y cayeron bajo regímenes destructivas. En su búsqueda de la estabilidad a través de gobiernos autoritarios, estos países vendieron su alma al diablo y en vez de la estabilidad de más edad, los tiempos románticos, que dieron la orden de la esclavitud y la destructividad.
Quienes defienden políticas que detener el cambio dicen, con razón, que el funcionamiento de la sociedad necesita un elemento de permanencia para evitar el caos. Sin embargo, el elemento de la permanencia que todas las sociedades necesitan debe ser proporcionada a través de la aplicación de los derechos de la persona, no mediante la protección de la situación económica o política de algunos sectores vociferantes.